Pionono
Frikazo
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Bueno chavales, este hilo era necesario, y como me estoy tocando la polla en el curro voy a ello.
Este fin de semana me he estrenado en el Triathlon. Como hace un par de meses se me fue la olla y me apunté al IronMan de Vitoria del año que viene, y se da la circunstancia que sólo hacía bici, ni corro ni nado, pues pensé que cuanto antes había que probar un triathlon de corta distancia para experimentar de qué va la película, sacar conclusiones y a entrenar como un cabrón.
Para los que no lo sepan, el Triathlon es hacer, en este orden, una distancia de natación, otra de bicicleta y terminar corriendo a pie. El Triathlon como se conoce hoy en día data de finales de los 70 principio de los años 80, y la distancia original era la que hoy se denomina IronMan, o sea, 3,8 km nadando, 180 km en bici, y 42 km corriendo. Desde entonces se han creado multitud de distancias para los diferentes niveles de competidores, desde la más corta, modalidad Supersprint, a la más larga, el IronMan, ya que existe otra modalidad, el Ultraman, pero que no se realiza en un sólo día, sino en tres.
El Triathlon es posiblemente el deporte definitivo en cuanto a postureo se refiere. Al margen de la cantidad de flipaos que hay, encima es que son flipaos motivados, porque lo primero que suelen hacer es comprarse el neopreno de 500 pavos, la bici cabra de 6000 y las zapatillas más "tó guapas" que haya en el mercado. Así a bote pronto en el último Triathlon de Vitoria miraba yo la zona de transición del agua a la bici y haciendo una media a ojo me salía que había allí más de 5 millones de euros en bicis.
Aquí el que suscribe os va a contar mi debut el pasado fin de semana. He de decir que he empezado a correr hace apenas 2 semanas y muy poca cosa, porque la primera misión es que la musculatura, que la tengo totalmente adaptada a la bici, se acostumbre a correr, así que ni tiradas largas ni series ni hostias, carrera corta a trote y alternando alguna zona andando para no sobrecargar. En el agua, a ver yo se nadar de toda la vida, pero tampoco es un deporte habitual, así que también he empezado a entrenar pero se nota que el músculo tiene memoria porque la adaptación está siendo muy rápida, mucho más que en la carrera.
Decidí inscribirme en modalidad sprint, que son 750 m nadando, 20 km en bici y 5 km corriendo, una distancia muy asequible para alguien en forma y que además no pensaba hacer a saco, no tenía sentido ninguno, la historia era más probar y aprender. Ya probé en el mes de julio a hacer uno por relevos, lógicamente yo hice la parte de la bici y flipé de la intensidad, porque un triathlon sprint hecho a tope es la hostia, es estar 1 hora y pico con la sangre en la boca, la parte mía de la bici, los 21 km, la hice en 42 minutos, con unas pulsaciones medias de 174 ppm y picos de 186 ppp, cuando mi máximo teórico según la prueba de esfuerzo, el VO2 Max lo tengo en 178 ppm.
Llegado el momento, me tiro al agua, y la idea era ir a ritmo tranquilo a ver qué pasaba, porque hace años y años que no nado una distancia superior a 10 largos en una piscina de 25 metros. Sin embargo, no controlo el chute de adrenalina y me pongo a nadar como un hijo de puta, tanto que a los 150 metros levanto la cabeza y voy primero de mi tanda, pero destacado. ¿Qué cojones estoy haciendo? A los 100 metros estoy asfixiado, así que tengo que ponerme a nadar a braza para recuperar el aliento, y así alterno estilos hasta controlar el pulso y lo bueno de esta distancia es que se acaba rápido. Lógicamente ya vamos mezclados los de varias tandas, así que no tengo ni idea en qué puesto voy, pero vamos hoy los resultados me dan igual. Lo primero que aprendo es la cantidad de hostias que se reparten en el agua en un triathlon, que ya lo sabía pero experimentarlo es diferente. Tocas piernas, culos, espaldas, hombros y cabezas. Y te tocan piernas, culo, espalda, hombro y cabeza.
La transición a la bici no es complicada, claro que sólo he nadado 750 m, las sensaciones en casi 4 km seguro que son diferentes. La bici es mi zona controlada, así que me doy cera y voy muy bien, aunque un puntito menos de lo que podría reservando un pelín para la carrera, territorio ya desconocido de por sí y más en un triathlon. El recorrido es fácil, se me ha olvidado decir que era un triathlon de MTB. Hay un par de hostiones gordos, porque la gente va como loca, cosa que no entiendo salvo en los primeros, porque en el resto de la plebe qué necesidad hay de arriesgar, pero en fin. Y llega el momento de la transición a la carrera, comúnmente conocida como T2. Aquí es donde está lo difícil de verdad del triathlon. Lo descubro en seguida, porque al igual que la otra transición, una cosa es que te lo cuenten y otra experimentarlo. Te calzas las zapatillas y echas a correr... y una polla correr. Tu cuerpo y tu mente dicen que qué cojones haces, que te pares ahora mismo o al menos andes tranquilamente. Pareces Chiquito de la Calzada contando un chiste, la hostia que sensación más mala. Sin embargo ves a otros que salen tranquilamente cual gacelas. El primer Km es criminal, hasta que no pasan 5 ó 10 minutos las piernas no empiezan a ir medio en condiciones, y el pulso está más acelerado de lo normal. Menos mal que hice bien en una distancia corta porque se acaba en 20 minutos, justo cuando el cuerpo ya estaba reaccionando "normal", pero es verdad que quieres aprentar y no puedes.
En fin, mucho por aprender y entrenar sobre todo en la carrera, ahora lo importante es hacer muy buena base e ir aumentando distancias para fortalecer musculatura adecuándola, y a final de año empezaré a entrenar transiciones.
Este fin de semana me he estrenado en el Triathlon. Como hace un par de meses se me fue la olla y me apunté al IronMan de Vitoria del año que viene, y se da la circunstancia que sólo hacía bici, ni corro ni nado, pues pensé que cuanto antes había que probar un triathlon de corta distancia para experimentar de qué va la película, sacar conclusiones y a entrenar como un cabrón.
Para los que no lo sepan, el Triathlon es hacer, en este orden, una distancia de natación, otra de bicicleta y terminar corriendo a pie. El Triathlon como se conoce hoy en día data de finales de los 70 principio de los años 80, y la distancia original era la que hoy se denomina IronMan, o sea, 3,8 km nadando, 180 km en bici, y 42 km corriendo. Desde entonces se han creado multitud de distancias para los diferentes niveles de competidores, desde la más corta, modalidad Supersprint, a la más larga, el IronMan, ya que existe otra modalidad, el Ultraman, pero que no se realiza en un sólo día, sino en tres.
El Triathlon es posiblemente el deporte definitivo en cuanto a postureo se refiere. Al margen de la cantidad de flipaos que hay, encima es que son flipaos motivados, porque lo primero que suelen hacer es comprarse el neopreno de 500 pavos, la bici cabra de 6000 y las zapatillas más "tó guapas" que haya en el mercado. Así a bote pronto en el último Triathlon de Vitoria miraba yo la zona de transición del agua a la bici y haciendo una media a ojo me salía que había allí más de 5 millones de euros en bicis.
Aquí el que suscribe os va a contar mi debut el pasado fin de semana. He de decir que he empezado a correr hace apenas 2 semanas y muy poca cosa, porque la primera misión es que la musculatura, que la tengo totalmente adaptada a la bici, se acostumbre a correr, así que ni tiradas largas ni series ni hostias, carrera corta a trote y alternando alguna zona andando para no sobrecargar. En el agua, a ver yo se nadar de toda la vida, pero tampoco es un deporte habitual, así que también he empezado a entrenar pero se nota que el músculo tiene memoria porque la adaptación está siendo muy rápida, mucho más que en la carrera.
Decidí inscribirme en modalidad sprint, que son 750 m nadando, 20 km en bici y 5 km corriendo, una distancia muy asequible para alguien en forma y que además no pensaba hacer a saco, no tenía sentido ninguno, la historia era más probar y aprender. Ya probé en el mes de julio a hacer uno por relevos, lógicamente yo hice la parte de la bici y flipé de la intensidad, porque un triathlon sprint hecho a tope es la hostia, es estar 1 hora y pico con la sangre en la boca, la parte mía de la bici, los 21 km, la hice en 42 minutos, con unas pulsaciones medias de 174 ppm y picos de 186 ppp, cuando mi máximo teórico según la prueba de esfuerzo, el VO2 Max lo tengo en 178 ppm.
Llegado el momento, me tiro al agua, y la idea era ir a ritmo tranquilo a ver qué pasaba, porque hace años y años que no nado una distancia superior a 10 largos en una piscina de 25 metros. Sin embargo, no controlo el chute de adrenalina y me pongo a nadar como un hijo de puta, tanto que a los 150 metros levanto la cabeza y voy primero de mi tanda, pero destacado. ¿Qué cojones estoy haciendo? A los 100 metros estoy asfixiado, así que tengo que ponerme a nadar a braza para recuperar el aliento, y así alterno estilos hasta controlar el pulso y lo bueno de esta distancia es que se acaba rápido. Lógicamente ya vamos mezclados los de varias tandas, así que no tengo ni idea en qué puesto voy, pero vamos hoy los resultados me dan igual. Lo primero que aprendo es la cantidad de hostias que se reparten en el agua en un triathlon, que ya lo sabía pero experimentarlo es diferente. Tocas piernas, culos, espaldas, hombros y cabezas. Y te tocan piernas, culo, espalda, hombro y cabeza.
La transición a la bici no es complicada, claro que sólo he nadado 750 m, las sensaciones en casi 4 km seguro que son diferentes. La bici es mi zona controlada, así que me doy cera y voy muy bien, aunque un puntito menos de lo que podría reservando un pelín para la carrera, territorio ya desconocido de por sí y más en un triathlon. El recorrido es fácil, se me ha olvidado decir que era un triathlon de MTB. Hay un par de hostiones gordos, porque la gente va como loca, cosa que no entiendo salvo en los primeros, porque en el resto de la plebe qué necesidad hay de arriesgar, pero en fin. Y llega el momento de la transición a la carrera, comúnmente conocida como T2. Aquí es donde está lo difícil de verdad del triathlon. Lo descubro en seguida, porque al igual que la otra transición, una cosa es que te lo cuenten y otra experimentarlo. Te calzas las zapatillas y echas a correr... y una polla correr. Tu cuerpo y tu mente dicen que qué cojones haces, que te pares ahora mismo o al menos andes tranquilamente. Pareces Chiquito de la Calzada contando un chiste, la hostia que sensación más mala. Sin embargo ves a otros que salen tranquilamente cual gacelas. El primer Km es criminal, hasta que no pasan 5 ó 10 minutos las piernas no empiezan a ir medio en condiciones, y el pulso está más acelerado de lo normal. Menos mal que hice bien en una distancia corta porque se acaba en 20 minutos, justo cuando el cuerpo ya estaba reaccionando "normal", pero es verdad que quieres aprentar y no puedes.
En fin, mucho por aprender y entrenar sobre todo en la carrera, ahora lo importante es hacer muy buena base e ir aumentando distancias para fortalecer musculatura adecuándola, y a final de año empezaré a entrenar transiciones.