Eso mismo me he preguntado yo.
Yo siempre me he resistido a que esta mujer me cayera mal. Simplemente me parece que era una cateta (reconocido por ella, vamos) a la que la fama la atropelló porque mentalmente no estaba ni remotamente preparada para nada parecido. De hecho es un milagro que no haya terminado loca perdida y como juguete rotísimo hace mucho tiempo, porque aquel primer OT fue algo que no se ha vuelto a repetir como fenómeno mediático, habría que haber estado en el pellejo de esa gente para entender lo que se les vino encima.
A algunos les he ido siguiendo a ratos, y Rosa se recompuso bastante bien, al final las carencias de juventud las arrastras toda la vida, pero al menos a base de pasta pudo tener una mínima educación. Musicalmente vendió la de Dios con el primer disco, que era un truño pero en aquel momento esta gente lo vendía todo. Luego que yo sepa ha ido de aquí para allá pero no creo que le haya faltado ni curro ni dinero.
Sin embargo esta salida de tono me ha sorprendido. Como bien dicen por ahí atrás, si tu producto ya no interesa, ya no gusta, pues o te reinventas o te buscas la vida de otra forma. Su compañera de promoción, Chenoa, ha sido de las más listas, intentó varios discos pero jamás funcionó un carajo y hace años lo tuvo claro; meter el hocico en la TV en cualquier formato de los trescientos que hay de talents shows, y ahora creo que anda haciendo de jurado en La Voz o algo así. Pues Rosa, nena, ¡mueve el puto culo! Y si no, pues, oh maravilla, igual te tienes que poner a buscar un curro anónimo. Pero vamos, no creo, estos tienen tirón mediático innegable, a poco que menee contactos la meten en cualquier Masterchef o similar, que allí cabe todo el mundo. Y si no, en la siguiente edición de OT la ponen de profesora, la alumna que se hace maestra, y listo.
Pero este hazmecasismo me jode, de verdad, porque da muestras que de la almendra no termina de carburar bien del todo.