BILBOKOA
¡WAOH! qué cacao con BILBOKAO
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A Irene Montero. Gracias ministra. GRACIAS.
A @topbox y @Retraso Deluxe ¿Cuándo váis a dar el paso?
Un día de estos, en esta España nuestra, roja, empoderada e igualitaria, en una comisaría de la Ertzaintza, llegó uno de sus agentes, como hacía siempre. Pero ese día, ese agente se dirigió a los responsables de la comisaría con unos papeles del Registro Civil que indicaban que ese agente era, desde ese momento, una mujer de pleno derecho.
Sorprendidos e incrédulos, los reposnables de la comisaría, (en cuyo pellejo no quisiera estar ahora mismo) tuvieron que dar conocimiento a todos los trabajadores del centro de la nueva situación de su compañero, que, desde ese momento, era ya una compañera de pleno derecho.
Cuando ELLAS, las agentes, tuvieron noticia del 'cambio', pusieron voz en grito, y mostraron, sin fisuras, sin voces discordantes, un completo rechazo a esta nueva situación.
Una situación indesesable para ellas, y que les genera mucha inquietud, preocupación e incomodidad, ya que ahora su ex-compañero y ahora compañera, puede usar todas las zonas reservadas para las mujeres, de tal forma que las agentes se ven ahora indefensas ante su nueva 'compañera' que puede contemplar impunemente sus pechos o vulvas, como lo haría cualquier otra mujer.
A pesar del rechazo, su nueva 'compañera' hace uso de los espacios de mujeres, como duchas, vestuarios, taquillas, etc pero llegando la situación a tal grado de queja que esta nueva agente, que parece buena persona, decidió llevar desde casa una especie de cortinilla para cambiarse en los vestuarios y así hacer sentir menos incómodas a sus compañeras que no desean ver sus huevos peludos y su falo de macho alfa.
Pero no ha bastado, ni mucho menos. Tal es el grado de enfado y queja entre la plantilla femenina, que esa nueva 'agente', que se le ve, como digo, buena persona, decidió proponer a los responsables de la comisaría otra opción: venir ya con el uniforme puesto desde casa. Los uniformes en la Ertzaintza son los mismos para hombres que para mujeres. Pero esta opción es inviable, ya que está estrictamente prohibido llevar el uniforme puesto desde casa.
Los responsables de la comisaría, que no saben cómo salir de este entuerto, han decidido que su nueva 'agente' patrulle, pero de paisano. Los ertzainas que patrullan de paisano son los llamados 'askatus'.
Las mujeres de la comisaría, unas 50, han llamado a todas las puertas para poner fin a este desvarío. Han hablado con los sindicatos policiales, con asuntos internos, y con otras instancias, pero todas les han dicho lo mismo: no se puede hacer nada, es una mujer de pleno derecho.
Es más, los sindicatos policiales han advertido a las agentes enfadadas con esta situación que no sólo no se puede hacer nada, sino que, a partir de ahora, tengan mucho cuidado qué dicen sobre su nueva compañera, porque podrían incurrir en un delito de odio.
Las mujeres policías, horrorizadas y espantadas ante la situacón, claman ante la prensa que "es que puede entrar en cualquier momento y verte desnuda", mientras rumian por todas las esquinas de la comisaría, y también ante los periodistas, el "todo el mundo sabe que es mentira, pero nadie hace nada".
A nuestro agente, que ahora es mujer, no sólo la han puesto a patrullar de paisano, para que así, al menos, coincida lo menos posible con su otras compañeras en las zonas sensibles, como duchas, vestuarios, etc, sino que, además, le han prohibido hacer cacheos a mujeres.
Es una mujer de pleno derecho, una agente femenina de la policía, pero no le dejan cachear a las sospechosas.
Y esto es todo por el momento. Los reponsables de la comisaría han intentado 'parchear' la situación como han podido, pero el problema sigue ahí.
Buenas tardes.
P.D. Los políticos, y la política, como siempre en España, ayudando al ciudadano, dando soluciones a los problemas y no creándolos. Verdad verdadera.
A @topbox y @Retraso Deluxe ¿Cuándo váis a dar el paso?
Un día de estos, en esta España nuestra, roja, empoderada e igualitaria, en una comisaría de la Ertzaintza, llegó uno de sus agentes, como hacía siempre. Pero ese día, ese agente se dirigió a los responsables de la comisaría con unos papeles del Registro Civil que indicaban que ese agente era, desde ese momento, una mujer de pleno derecho.
Sorprendidos e incrédulos, los reposnables de la comisaría, (en cuyo pellejo no quisiera estar ahora mismo) tuvieron que dar conocimiento a todos los trabajadores del centro de la nueva situación de su compañero, que, desde ese momento, era ya una compañera de pleno derecho.
Cuando ELLAS, las agentes, tuvieron noticia del 'cambio', pusieron voz en grito, y mostraron, sin fisuras, sin voces discordantes, un completo rechazo a esta nueva situación.
Una situación indesesable para ellas, y que les genera mucha inquietud, preocupación e incomodidad, ya que ahora su ex-compañero y ahora compañera, puede usar todas las zonas reservadas para las mujeres, de tal forma que las agentes se ven ahora indefensas ante su nueva 'compañera' que puede contemplar impunemente sus pechos o vulvas, como lo haría cualquier otra mujer.
A pesar del rechazo, su nueva 'compañera' hace uso de los espacios de mujeres, como duchas, vestuarios, taquillas, etc pero llegando la situación a tal grado de queja que esta nueva agente, que parece buena persona, decidió llevar desde casa una especie de cortinilla para cambiarse en los vestuarios y así hacer sentir menos incómodas a sus compañeras que no desean ver sus huevos peludos y su falo de macho alfa.
Pero no ha bastado, ni mucho menos. Tal es el grado de enfado y queja entre la plantilla femenina, que esa nueva 'agente', que se le ve, como digo, buena persona, decidió proponer a los responsables de la comisaría otra opción: venir ya con el uniforme puesto desde casa. Los uniformes en la Ertzaintza son los mismos para hombres que para mujeres. Pero esta opción es inviable, ya que está estrictamente prohibido llevar el uniforme puesto desde casa.
Los responsables de la comisaría, que no saben cómo salir de este entuerto, han decidido que su nueva 'agente' patrulle, pero de paisano. Los ertzainas que patrullan de paisano son los llamados 'askatus'.
Las mujeres de la comisaría, unas 50, han llamado a todas las puertas para poner fin a este desvarío. Han hablado con los sindicatos policiales, con asuntos internos, y con otras instancias, pero todas les han dicho lo mismo: no se puede hacer nada, es una mujer de pleno derecho.
Es más, los sindicatos policiales han advertido a las agentes enfadadas con esta situación que no sólo no se puede hacer nada, sino que, a partir de ahora, tengan mucho cuidado qué dicen sobre su nueva compañera, porque podrían incurrir en un delito de odio.
Las mujeres policías, horrorizadas y espantadas ante la situacón, claman ante la prensa que "es que puede entrar en cualquier momento y verte desnuda", mientras rumian por todas las esquinas de la comisaría, y también ante los periodistas, el "todo el mundo sabe que es mentira, pero nadie hace nada".
A nuestro agente, que ahora es mujer, no sólo la han puesto a patrullar de paisano, para que así, al menos, coincida lo menos posible con su otras compañeras en las zonas sensibles, como duchas, vestuarios, etc, sino que, además, le han prohibido hacer cacheos a mujeres.
Es una mujer de pleno derecho, una agente femenina de la policía, pero no le dejan cachear a las sospechosas.
Y esto es todo por el momento. Los reponsables de la comisaría han intentado 'parchear' la situación como han podido, pero el problema sigue ahí.
Buenas tardes.
P.D. Los políticos, y la política, como siempre en España, ayudando al ciudadano, dando soluciones a los problemas y no creándolos. Verdad verdadera.
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