YoHiceARoqueIII
Frikazo
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Pues yo aplaudo a Curro.
Ni crisis, ni recortes, ni pollas... en este país lo que hace falta son COJONES y MANO DURA. Una rara avis políticamente incorrecta.
Aún recuerdo tóenhiesto cuando curraba de Puerta en la calle Campoamor de Madrid. Un graciosín que pasaba le estalló un vaso de tubo en la cara al venerable Aparca de Impacto. Un hombre mayor, de trato exquisito yacía en el suelo inconsciente y con la cara destrozada.
Vía radio macuto nos enteramos y todos los puertas y seguratas de Impacto, Autores, Speakeasy, Tulum y varios sitios más partimos a la carrera a trincar al grupito éste de guays. Los trincamos en Zurbano esquina Génova (sede del PP). Eramos unos 20 y ellos unos 12. Antonio (boxeador profesional, de temple tranquilo y voz grave) les dijo que o nos daban al graciosín o los doce, sin excepción, acababan en la UCI.
Porsupues y en un alarde emotivo y conmovedor de auténtica amistad, los coleguis entregaron al graciosín y salieron por patas.
Le calló tal somanta de ostias, pero de las bien dadas, que nosotros mismos acabamos llamando a la ambulancia a que recogiese los restos.
Creo que aún debe quedar alguna pieza dental por la zona...
Porsupuesto no hubo denuncia ni nada y estos pollos no han vuelto a pisar Campoamor y aledaños.
Otro día contaré la vez que me amenazaron de muerte en la puerta del local y algunas historietas lolescas de cuando hice el Glorioso Servicio Militar.
Me la suda que os lo creáis o no.
Ni crisis, ni recortes, ni pollas... en este país lo que hace falta son COJONES y MANO DURA. Una rara avis políticamente incorrecta.
Aún recuerdo tóenhiesto cuando curraba de Puerta en la calle Campoamor de Madrid. Un graciosín que pasaba le estalló un vaso de tubo en la cara al venerable Aparca de Impacto. Un hombre mayor, de trato exquisito yacía en el suelo inconsciente y con la cara destrozada.
Vía radio macuto nos enteramos y todos los puertas y seguratas de Impacto, Autores, Speakeasy, Tulum y varios sitios más partimos a la carrera a trincar al grupito éste de guays. Los trincamos en Zurbano esquina Génova (sede del PP). Eramos unos 20 y ellos unos 12. Antonio (boxeador profesional, de temple tranquilo y voz grave) les dijo que o nos daban al graciosín o los doce, sin excepción, acababan en la UCI.
Porsupues y en un alarde emotivo y conmovedor de auténtica amistad, los coleguis entregaron al graciosín y salieron por patas.
Le calló tal somanta de ostias, pero de las bien dadas, que nosotros mismos acabamos llamando a la ambulancia a que recogiese los restos.
Creo que aún debe quedar alguna pieza dental por la zona...
Porsupuesto no hubo denuncia ni nada y estos pollos no han vuelto a pisar Campoamor y aledaños.
Otro día contaré la vez que me amenazaron de muerte en la puerta del local y algunas historietas lolescas de cuando hice el Glorioso Servicio Militar.
Me la suda que os lo creáis o no.