Pionono
Frikazo
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Como en el hilo del mancuernas están todos muy concentrados en sus hierros y sus mierdas, rescato el hilo de los biciclistas y que luego los moderadores hagan un Max Mix con él y el del subforo. Por mi parte voy a iros contando la aventura del Ultraman de Canadá en tres tochacos de los míos.
Para los que no lo sepan, un Ultraman es el Triathlon más bestiajo que existe. Se hace en tres días, el primero se nadan 10 Km y se ruedan 145 km en bici. El segundo día se ruedan 280 km en bici. El tercero se corre una doble maratón, 84 km. Ahí es nada la salvajada.
Os pongo en antecedentes. Hace meses entrenando con un compi de la grupeta me comentó que se había vuelto loco y había mandado solicitud de inscripción en el Ultraman de Canadá, porque lo quería hacer en homenaje a un amigo fallecido que también quería intentarlo. Yo conocía la prueba y pensé "Estás en la grupeta perfecta porque aquí estamos zumbaos de cojones". La cosa quedó ahí y aunque en los meses siguientes hubo coñas y alguna conversación en plan "Pues me molaría ir" yo estaba muy pendiente de mi preparación para la Titan Desert y el tema se aparcó. Fue un par de semanas antes de la Titan cuando me llamó mi colega y me dijo que estaba más solo que la una para la aventura, que todo Dios que al principio quería ir ahora se habían rajao, que si la pasta, que si son muchos días (aparte de la competición el viaje total es una semana mínimo). Yo le dije que la idea de ir con él de ayudante la tenía rondando en la cabeza y que le contestaría después de la Titan. En ella, aventura aparte, aprendí que ahora sí estaba capacitado para ayudarle, porque una cosa es ver el ultrafondo en los documentales y vídeos y otra experimentarlo. A la vuelta quedamos pa comer y le dije que palante, que iba con él, y en dos días billetes de avión sacados.
De ahí salto a la aventura en sí, que fue los días 1 al 3 de agosto pasados. Hay que decir, parte muy importante en la historia, que también se unió a la aventura un chavalín de 25 años del club de corredores que tiene mi colega. Lo conocí unas semanas antes de ir y no me llamó especialmente la atención en ningún sentido, qué equivocado estaba...
Ellos dos se fueron un par de días antes que yo, que por temas de curro tuve que apurar más el viaje, total que llego por fin a Pentincton, lugar base del Ultraman, tras un viaje de tropecientas horas y tres vuelos diferentes. Allí me recogen y vamos directamente al briefing de la prueba, todo en un perfectísimo inglés. Yo piloto algo pero no tengo ninguna soltura, y el tolai que vino con nosotros sí hablaba bastante más, así que por esa parte de puta madre. Ya teníamos acordado que el primer día yo iba a acompañar a mi colega en los 10 km nadando en un kayak, porque en esta prueba es indispensable la ayuda de un equipo, y en concreto en la parte de natación es mucho tiempo y hay que darle de comer y beber al participante. Le indico al tolai que mientras que nosotros hacemos la natación él tiene tiempo de sobra para llevar el coche a llenarlo de gasolina sobre todo pensando en el día siguiente y para organizar la bici y demás en la zona de transición después de nadar. Estimamos unas 3 horas y media de nado, porque mi colega tiene un problema en un hombro y nada considerablemente más lento de lo normal.
La parte de la natación se hacía en un lago enorme y precioso, qué vistas, la hostia, donde como estaba previsto mi colega se rezagó en seguida y fuimos cerca de dos participantes más, más o menos en el lugar 15-20 de los 25 participantes totales. Yo tenía controlado pararlo cada media hora a beber algo y cada hora a zampar un poco de plátano y pastilla de sal, y lo llevamos todo medido. De vez en cuando le tenía que indicar que rectificara la trayectoria, ya que su lesión le hace que tienda a irse hacia la izquierda, y claro en 10 km de ruta si te desvías mucho en un lago tan enorme al final terminas haciendo 11 ó 12. La natación transcurrió sin mayores incidentes, y llegamos a la transición. Lo cierto es que salió del agua más entero de lo que pensábamos, y se subió a la bici con una idea clara, remontar todas las posiciones que fueran posibles. Yo me cambié y me subí al coche con el tolai. Nada más echar a andar me da por mirar y veo que el nivel de la gasolina está en reserva. Le pregunto al fichaje que por qué no ha echado gasolina y me dice que sí que ha echado, pero que por alguna razón el nivel no se ha movido, que igual es la boya que se ha quedado pegada abajo del depósito. Yo no lo veo claro, porque el tío ya ha dado alguna muestra de bajo nivel neuronal, pero bueno si le ha echado, pues le habrá echado, no concibo la idea de ir a una gasolinera, pagar y no echar gasolina. Craso error. Es posible. LO ES. Transcurridos unos 60 km donde mi colega va a toda hostia y remonta desde la posición 17 en la que salió del agua hasta la 9, le obligo a parar para comer, porque veo el riesgo de pájara muy claro por el calentón que se ha pegado sin necesidad, tenía 145 km para remontar, pero se le metió en la cabeza hacerlo lo antes posible. Además del km 80 al 110 venía una zona muy dura sobre el papel, y quería que llevara el depósito bien lleno, no como el del coche... Sobre el km 70 el coche dice que hasta luego, pega un par de amagos y se para en medio de una carretera sin arcén. Mantengo la calma mientras le digo al tolai que evidentemente no echó gasolina, pero bueno, que vamos a ver qué coño hacíamos porque no sabíamos ni donde estábamos. Él jura y perjura que si, que echó los 40 dólares que llevaba. Claro en ese momento ya me cago en todos sus muertos cuando tras preguntar varias veces, me reconoce que igual fue a pagar y luego se montó en el coche sin echar la gasolina. En fin, ya habíamos tenido un par de choques porque el tío no tiene ni puta idea de entrenamiento ni de nada y me insistía en que por qué había que comer todo el rato, que él pensaba que era mejor comer al terminar y que mejor no le diera de comer a mi colega no fuera que "se le cortara la digestión" . Y observaciones así de inteligentes, unas cuantas. En medio de la carretera veo a lo lejos un motorista de la organización que pasaba, y claro le paro echando hostias para que nos lleve a uno de nosotros a la gasolinera más cercana a llenar un bidón y al menos poder arrancar el coche. Unos 20 minutos después estamos vaciando un bidón de 10 L en el depósito, y claro echando hostias a rellenarlo en la gasolinera y a salir zumbando a buscar a mi colega que debía tener los bidones vacíos y con un cabreo monumental por llevar ya alrededor de una hora y algo sin vernos.
Le cazamos justo antes de una subida dura que venía y le relleno los bidones y le paso un par de geles. El tolai está en estado catatónico pero aún así erupta gilipolleces como la de "Mejor no darle más agua y sólo geles" y claro a la pregunta de "Pero qué dices, por qué???" responde "Ah no se, que se me ha ocurrido".
En el km 120 viene el temido bajonazo, no llega a ser pájara pero el calentón de antes se nota y el rendimiento baja. Estoy tranquilo porque quedan apenas 25 para terminar la etapa, pero le insisto en que beba contínuamente para no desgastarse más de lo normal. Llegamos a meta un rato después y afortunadamente sólo nos adelanta un participante, con lo que quedamos en posición 10 de la general.
El tolai aún tiene fuelle para alguna perla más de sabiduría, pero ya con la etapa terminada me la suda lo que diga, ya puede lamer chapas o mear en la copa de un árbol. Qué saturación de tío, la hostia, y no me quedaba nada en el segundo día... :2
Para los que no lo sepan, un Ultraman es el Triathlon más bestiajo que existe. Se hace en tres días, el primero se nadan 10 Km y se ruedan 145 km en bici. El segundo día se ruedan 280 km en bici. El tercero se corre una doble maratón, 84 km. Ahí es nada la salvajada.
Os pongo en antecedentes. Hace meses entrenando con un compi de la grupeta me comentó que se había vuelto loco y había mandado solicitud de inscripción en el Ultraman de Canadá, porque lo quería hacer en homenaje a un amigo fallecido que también quería intentarlo. Yo conocía la prueba y pensé "Estás en la grupeta perfecta porque aquí estamos zumbaos de cojones". La cosa quedó ahí y aunque en los meses siguientes hubo coñas y alguna conversación en plan "Pues me molaría ir" yo estaba muy pendiente de mi preparación para la Titan Desert y el tema se aparcó. Fue un par de semanas antes de la Titan cuando me llamó mi colega y me dijo que estaba más solo que la una para la aventura, que todo Dios que al principio quería ir ahora se habían rajao, que si la pasta, que si son muchos días (aparte de la competición el viaje total es una semana mínimo). Yo le dije que la idea de ir con él de ayudante la tenía rondando en la cabeza y que le contestaría después de la Titan. En ella, aventura aparte, aprendí que ahora sí estaba capacitado para ayudarle, porque una cosa es ver el ultrafondo en los documentales y vídeos y otra experimentarlo. A la vuelta quedamos pa comer y le dije que palante, que iba con él, y en dos días billetes de avión sacados.
De ahí salto a la aventura en sí, que fue los días 1 al 3 de agosto pasados. Hay que decir, parte muy importante en la historia, que también se unió a la aventura un chavalín de 25 años del club de corredores que tiene mi colega. Lo conocí unas semanas antes de ir y no me llamó especialmente la atención en ningún sentido, qué equivocado estaba...
Ellos dos se fueron un par de días antes que yo, que por temas de curro tuve que apurar más el viaje, total que llego por fin a Pentincton, lugar base del Ultraman, tras un viaje de tropecientas horas y tres vuelos diferentes. Allí me recogen y vamos directamente al briefing de la prueba, todo en un perfectísimo inglés. Yo piloto algo pero no tengo ninguna soltura, y el tolai que vino con nosotros sí hablaba bastante más, así que por esa parte de puta madre. Ya teníamos acordado que el primer día yo iba a acompañar a mi colega en los 10 km nadando en un kayak, porque en esta prueba es indispensable la ayuda de un equipo, y en concreto en la parte de natación es mucho tiempo y hay que darle de comer y beber al participante. Le indico al tolai que mientras que nosotros hacemos la natación él tiene tiempo de sobra para llevar el coche a llenarlo de gasolina sobre todo pensando en el día siguiente y para organizar la bici y demás en la zona de transición después de nadar. Estimamos unas 3 horas y media de nado, porque mi colega tiene un problema en un hombro y nada considerablemente más lento de lo normal.
La parte de la natación se hacía en un lago enorme y precioso, qué vistas, la hostia, donde como estaba previsto mi colega se rezagó en seguida y fuimos cerca de dos participantes más, más o menos en el lugar 15-20 de los 25 participantes totales. Yo tenía controlado pararlo cada media hora a beber algo y cada hora a zampar un poco de plátano y pastilla de sal, y lo llevamos todo medido. De vez en cuando le tenía que indicar que rectificara la trayectoria, ya que su lesión le hace que tienda a irse hacia la izquierda, y claro en 10 km de ruta si te desvías mucho en un lago tan enorme al final terminas haciendo 11 ó 12. La natación transcurrió sin mayores incidentes, y llegamos a la transición. Lo cierto es que salió del agua más entero de lo que pensábamos, y se subió a la bici con una idea clara, remontar todas las posiciones que fueran posibles. Yo me cambié y me subí al coche con el tolai. Nada más echar a andar me da por mirar y veo que el nivel de la gasolina está en reserva. Le pregunto al fichaje que por qué no ha echado gasolina y me dice que sí que ha echado, pero que por alguna razón el nivel no se ha movido, que igual es la boya que se ha quedado pegada abajo del depósito. Yo no lo veo claro, porque el tío ya ha dado alguna muestra de bajo nivel neuronal, pero bueno si le ha echado, pues le habrá echado, no concibo la idea de ir a una gasolinera, pagar y no echar gasolina. Craso error. Es posible. LO ES. Transcurridos unos 60 km donde mi colega va a toda hostia y remonta desde la posición 17 en la que salió del agua hasta la 9, le obligo a parar para comer, porque veo el riesgo de pájara muy claro por el calentón que se ha pegado sin necesidad, tenía 145 km para remontar, pero se le metió en la cabeza hacerlo lo antes posible. Además del km 80 al 110 venía una zona muy dura sobre el papel, y quería que llevara el depósito bien lleno, no como el del coche... Sobre el km 70 el coche dice que hasta luego, pega un par de amagos y se para en medio de una carretera sin arcén. Mantengo la calma mientras le digo al tolai que evidentemente no echó gasolina, pero bueno, que vamos a ver qué coño hacíamos porque no sabíamos ni donde estábamos. Él jura y perjura que si, que echó los 40 dólares que llevaba. Claro en ese momento ya me cago en todos sus muertos cuando tras preguntar varias veces, me reconoce que igual fue a pagar y luego se montó en el coche sin echar la gasolina. En fin, ya habíamos tenido un par de choques porque el tío no tiene ni puta idea de entrenamiento ni de nada y me insistía en que por qué había que comer todo el rato, que él pensaba que era mejor comer al terminar y que mejor no le diera de comer a mi colega no fuera que "se le cortara la digestión" . Y observaciones así de inteligentes, unas cuantas. En medio de la carretera veo a lo lejos un motorista de la organización que pasaba, y claro le paro echando hostias para que nos lleve a uno de nosotros a la gasolinera más cercana a llenar un bidón y al menos poder arrancar el coche. Unos 20 minutos después estamos vaciando un bidón de 10 L en el depósito, y claro echando hostias a rellenarlo en la gasolinera y a salir zumbando a buscar a mi colega que debía tener los bidones vacíos y con un cabreo monumental por llevar ya alrededor de una hora y algo sin vernos.
Le cazamos justo antes de una subida dura que venía y le relleno los bidones y le paso un par de geles. El tolai está en estado catatónico pero aún así erupta gilipolleces como la de "Mejor no darle más agua y sólo geles" y claro a la pregunta de "Pero qué dices, por qué???" responde "Ah no se, que se me ha ocurrido".
En el km 120 viene el temido bajonazo, no llega a ser pájara pero el calentón de antes se nota y el rendimiento baja. Estoy tranquilo porque quedan apenas 25 para terminar la etapa, pero le insisto en que beba contínuamente para no desgastarse más de lo normal. Llegamos a meta un rato después y afortunadamente sólo nos adelanta un participante, con lo que quedamos en posición 10 de la general.
El tolai aún tiene fuelle para alguna perla más de sabiduría, pero ya con la etapa terminada me la suda lo que diga, ya puede lamer chapas o mear en la copa de un árbol. Qué saturación de tío, la hostia, y no me quedaba nada en el segundo día... :2