A mí no me caigo bien ni yo.
Ha sido un tremendo espectáculo circense a cargo del trío de los payasos del fachaleco, han venido los tres SLK, el gordo calvo, el gordo mal afeitado y el engominado. No ha faltado de nada, la función ha constado de funambulismo por encima de la cuerda de la lógica, malabares con corporativismo, huevos muy gordos y comparaciones bélicas muy fuera de contexto, y como número final han sacado unos aros de fuego a través de los cuales teníamos que saltar. Todos en circulito, sólo faltaba cantar la canción de la empresa. Ha sido bochornoso.
La queja central ha sido que no se pueden ir a tomar coscolas a la barra que queda poco profesional. Lo del cuchillo ha salido al final y muy de pasada, la conclusión ha sido que tranquilos que tenemos un seguro de responsabilidad civil que nos cubre hasta el millón y pico de euros, pero sólo dentro de un radio de no más lejos de 25 metros del local. Y que el tío ese va a entrar cuando vuelva, porque hace un gasto de 30000 euros y tenemos que entender. Son sus respetos y hay que acostumbrarlos.