- Hace poco pescó a un viejo de 82 años, que seguramente debe tener demencia senil, y lo está dejando seco. Le comió de tal forma la cabeza que el viejo se comprometió a entregarle todo lo que tenía (unos 18.000 $) en un plazo de seis meses. Al final, le envió hasta el último dólar que tenía, quedándose sin dinero para comprar comida. Entonces ella, según cuenta detalladamente en su página, le envió toda la comida caducada que había en su despensa, no porque le diera pena, sino “porque muerto no podría seguir enviándole dinero”.
- Otro de los casos que comenta en su blog es especialmente sangrante. Uno de sus adoradores, de avanzada edad, dejó de enviarle dinero porque estaba en el hospital, con un cáncer terminal.[ Su comentario sobre esto fue que esa no era excusa para dejar de pagar. Es más, que debería coger el portátil y empezar a enviarle dinero lo más rápidamente posible, ya que estaba con un pie en la tumba.