Jeje, MIP yo también estoy empezando a no poder con mi alma, llevo un par de semanas que el día de descanso me lo paso por el rabo y acabo entrenando con ira y furia, ahí, metido en mi cubículo, aislado de la sociedad, sí, esa caterva de analfabetos ,gordos y tías que pululan por ahí hinchándose a copas, hamburguesas y robóticos polvos.Mi cuerpo pide descanso, yo le doy repeticiones -toma hijo de puta- nuevos pinchazos me saludan a la mañana siguiente, atrincherados en recónditos lugares de mi cuerpo, ayer, una cremallera de dolor se abrió en mi triceps izquierdo esforzado en el frances, era esa última repetición de la última serie, esa que discrimina entre los que hacen pesas por pasar el rato o gustar a las titis y los que vivimos de esto por ser una de las pocas fuentes de satisfacción que se nos ha permitido en este falso mundo de cartónpiedra. Por eso, hamijo, en estos días de bajeza, mira al frente y aprieta los dientes, porque el cansancio es una oportunidad que no hay que dejar pasar para demostrar tu fortaleza, entrenar hecho una mierda es el verdadero sumun de los hierros, dolor, sudor, SATISFACCIÓN.
Que Dios os bendiga a todos.