Siempre creí en Dios. Hoy Dios me ha ayudado. Ha bajado, me ha tocado para sobreprotegerme de un OWNED clamoroso.
Andaba yo borracho por un antro, cuando he visto a un pivonazo nivel diez. Una tia para quitarse el sombrero. Alta, pelo castaño, largo y liso, un cuerpo sencillamente perfecto, una delicia. Un estilazo de tia. Shorts negros. Cómo se meneaba, la puta.
Ni corto ni perezoso me planto allí mismo -cuando voy bebido todo me suda la polla-, y la agarro. La agarro de tal modo que su culo nota claramente el desmesurado empalme que ha originado en mi polla. Respondía, la muy zorra vaya que si respondía mientras mis manos acariciaban suavemente sus caderas y las suyas correspondían a mis propias manos. Duró poco, más o menos un minuto. Es entonces cuando su amiga se dirige a mí y me dice:
- ¿Qué pasa? ¿Eres su guardaespaldas?
Mi respuesta es:
- Jiji ("gorda, dáte una vuelta, anda", es lo que realmente se deducía en la intención de mi respuesta).
Pero a su vez algo temía. Lo encontraba demasiado bonito. Demasiado fácil, nadie da duros a cuatro pesetas. Entonces decido moderarme y dar un paso atrás, despegarme de ella, darle un respiro, mientras le digo: "¿es tu amiga? jeje ¿qué dice? jeje".
- Nada, es que lo dice por mi novio.
-

:-|

Jiji ¿qué tienes novio?
Y en ese instante aparece. Aparece una masa de 1,90 enorme, señores. Un brazo como mi espalda, simple y llanamente, exactamente un brazo como mi espalda de ancho. Algo increíble, de verdad, nunca había visto nada así en persona, solo había visto tipos así en el cine. Una cara de luchador girao de Pressing Catch que es que no podía ser verdad.
Había visto cómo, ya con una distancia respetable, estaba hablando con la puta esa que resultaba ser su novia. Mi primera reacción fue dialogar, por supu, enseguida ve esa intención en mí, levanta ambas cejas indicándome que estaba atento a mis palabras, aproxima su oído hacia mí, y me dice:
- Dime, dime.
Me cagué en todas las Virgenes. Lo que pensé en aquel momento fue: "mierda, Slk, tienes el hueso de la nariz intacto y todos los dientes colocados perfectamente, esto es un putadón. Les digo adiós y tal".
Respondo:
- :D No, jeje, que la chica esa -la gorda- no sé que estaba diciendo a la chica esta -el zorrón al que sobé- de que si soy su guardaespaldas o no sé qué, digo qué va, jiji.
Aproxima más su oído contra mí haciendo un gesto para decirme que con la música no entendía lo que le decía. Aprovecho la ocasión para tergiversar todavía más la historia, y le digo:
- Que te decía que estaba aqui bailando, y no sé que me dijo la chica aquella -la gorda- de que si conocía o algo a la chica esta -zorrón slkpolleada- y es que no la entendía bien, que vaya que les dije que no las conozco, jeje.
Simultaneamente el zorrón de su novia con una conciliadora sonrisa añade:
- Ya está, ya está, no pasa nada.
Casi que al mismo instante que el bicharraco ese levanta el dedo pulgar en señal buenrollista para decirme: "Vale, vale".

Qué mal lo pasé.
Jódete, saco de músculos descerebrado :48