Chico_normal
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Hola piara.
Me encontraba yo absorto en mis profundísimas meditaciones metafísicas de las que no os puedo hacer partícipes por el momento (top secret) y algo ha perturbado mi levítica estancia al margen del tiempo y el espacio.
Se trata de una pequeña observación acerca de la naturaleza de la voz humana. Al grano.
Entiendo que el el timbre y tono de voz, con sus armónicos que la definen es una manifestación fisiológica de cada indivíduo y por lo tanto una expresión y representación de su mundo anímico, de su voluntad, de su íntima esencia y por lo tanto de su carácter. Esto es así tanto en los animales como en el hombre.
Aquí debería aclarar que concibo la sexualidad como dos imanes opuestos con sus respectivos polos (Masculino y Femenino) separados por un amplio espectro magnético, tal y como bien apunta el gran Otto Weininger, con dos extremos siendo M y F la normalidad (heterosexualidad) y entre los cuales se encuentran todo tipo de tendecias homosexuales en diverso grado y parafilias.
La tonalidad grave está asociada sin duda con las facultades masculinas, es por esto que las voces graves buscan su complemento femenino y corresponden a hombres cuya faceta femenina existe con menos intensidad o es nula. Esta es la razón por la cual muchos homosexuales fuerzan y "feminizan" su voz y tienen un acento característico en cualquier idioma, ya que lo que buscan es a un hombre masculino (su opuesto). Entre las lesbianas ocurre lo mismo de forma inversa, y es raro encontrar a alguna de ellas cuya voz y fisiognomía completa no recuerde a la de un hombre.
La voz que agrada a un varón normal que no se encuentra entre los grados intermedios entre M y F debe ser dulce y con un timbre agradable con unos 250Hz como frecuencia fundamental. Nos asquea una voz demasiado estridente y aniñada pues es el aviso previo a todo tipo de taras mentales y actúa casi como una alarma, y por otro lado, también nos repugna una voz excesivamente grave (tipo Lana del Rey o tonalidades inferiores, este tipo de voz sólo puede gustar a un semihomosexual) ya que es tambíen síntoma de diversas patologías provocadas por un alto grado de nivel hormonal masculino.
Minutos musicales y que os folle un pez;
, tengo ladillas como centollos, tengo ladillas como centollosOLV0
Me encontraba yo absorto en mis profundísimas meditaciones metafísicas de las que no os puedo hacer partícipes por el momento (top secret) y algo ha perturbado mi levítica estancia al margen del tiempo y el espacio.
Se trata de una pequeña observación acerca de la naturaleza de la voz humana. Al grano.
Entiendo que el el timbre y tono de voz, con sus armónicos que la definen es una manifestación fisiológica de cada indivíduo y por lo tanto una expresión y representación de su mundo anímico, de su voluntad, de su íntima esencia y por lo tanto de su carácter. Esto es así tanto en los animales como en el hombre.
Aquí debería aclarar que concibo la sexualidad como dos imanes opuestos con sus respectivos polos (Masculino y Femenino) separados por un amplio espectro magnético, tal y como bien apunta el gran Otto Weininger, con dos extremos siendo M y F la normalidad (heterosexualidad) y entre los cuales se encuentran todo tipo de tendecias homosexuales en diverso grado y parafilias.
La tonalidad grave está asociada sin duda con las facultades masculinas, es por esto que las voces graves buscan su complemento femenino y corresponden a hombres cuya faceta femenina existe con menos intensidad o es nula. Esta es la razón por la cual muchos homosexuales fuerzan y "feminizan" su voz y tienen un acento característico en cualquier idioma, ya que lo que buscan es a un hombre masculino (su opuesto). Entre las lesbianas ocurre lo mismo de forma inversa, y es raro encontrar a alguna de ellas cuya voz y fisiognomía completa no recuerde a la de un hombre.
La voz que agrada a un varón normal que no se encuentra entre los grados intermedios entre M y F debe ser dulce y con un timbre agradable con unos 250Hz como frecuencia fundamental. Nos asquea una voz demasiado estridente y aniñada pues es el aviso previo a todo tipo de taras mentales y actúa casi como una alarma, y por otro lado, también nos repugna una voz excesivamente grave (tipo Lana del Rey o tonalidades inferiores, este tipo de voz sólo puede gustar a un semihomosexual) ya que es tambíen síntoma de diversas patologías provocadas por un alto grado de nivel hormonal masculino.
Minutos musicales y que os folle un pez;
, tengo ladillas como centollos, tengo ladillas como centollosOLV0