Pero es que eso tampoco tiene nada de malo. Antes del miércoles Juanín Mata dijo que era imposible y absurdo intentar quitarle la pelota al Barça, que era una guerra perdida. Y eso hicieron, se olvidaron de la pelota, plantaron un frontón y pusieron a un tío de 34 años a la contra. Y va, y una que pilla, una que te enchufa.
Ajo y agua. Si tienes 3 delante del portero y las perdonas, es lo que hay.
Yo me quedo con el planteamiento y el juego del Barça, pero al final tambien lo que cuenta es estar en la final de Munich, no lamentarse de perdonar una tras otra. Ayer pasó igual, Xavi perdonó una que habría cambiado el rumbo del partido, a partir de ahí si a tu rival le sale la película al 100% no hay mucho más que hablar.