Por una parte, es debido a que ya paso bastante del fútbol moderno. Este deporte, actualmente, ya empieza a darme bastante asco, por muchas de las cuestiones aquí ampliamente comentadas. La última, es la idea de la FIFA de querer hacer mundiales cada dos años. Cosas como esa hacen que cada día me aleje más y más de este deporte.
La otra cuestión es casera, de mi equipo. La particularidad con la que nos regimos, esa farsa de jugar sólo con gente "de casa". Una mal llamada filosofía, amparada y protegida desde el régimen político que usa al Athletic como baluarte de un 'hecho diferencial', y donde la cuestión deportiva es secundaria, porque lo que importa es la ideología, la política, en definitiva, otras cosas. De ahí que, desde hace muchos años, las intituciones públicas vascas, y concretamente las vizcaínas, lancen contínuas campañas dirigidas a la masa para que asuma que somos un club de fracasados y de perdedores, pero que eso nos hace especiales, y que lo importante no es ganar nada, que lo importante es "pasarlo bien", "divertirse", que jugar una final a es, en sí mismo, un título, etc, etc.
Una mal llamada filosofía que permite que un grupo de niñatos con apellidos vascos, muchos de los cuales no tienen nivel ni para jugar en Segunda B, sean los veraderos amos de club, cobrando pastizales de Champions que no merecen y firmando contratos por muchos años, como el caso de Williams, un negro que sólo sabe correr, cobrando 7 millones al año y con un contrato a 10 años. Y todo eso para un tío que te va a marcar entre 4 y 6 goles en toda la temporada entre LaLiga y la Copa del Rey.
Por todo ello, cada vez estoy más distanciado del fútbol, de este fútbol de niñatos y mamarrachos, de clubs proiedad de países como Qatar o de fondos de inversión, un deporte lleno de corrupción y donde casi todo es mentira, farsa e hicpocresía. Por eso ya casi no veo nada de este deporte por televisión, ni aunque sea en abierto.
Buenas tardes, y que tenga buen servicio, agente.