Nikoro
El Forero más blando que la mierda de pavo
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No, no va en el Foro deportes subforo Golf.
Tampoco en el Foro ligue, ya que alguno del general, nunca asoma el hocico por ahí, y es un tema por el que casi todos hemos pasado, bueno,
hay alguno que tiene pinta de no haber catado mujer/hombre/travelo/animal.
Se trata de esa primera vez que la metísteis en adobo, con una novieta, vecina, puta, travelo o con el gato.
Mi relato :
Debía tener 13 o 14 primaveras, con el rabo siempre como el bate de Negan, y estaba con un primo mío, unos 4 o 5 años mayor, con novieta, y que ya mojaba el nardo,
de hecho, a los 18 la dejó preñada y se casaron.
Hoy en día, todavía son happys con un nieto.
A lo que vamos, aquel día fuimos a dar una vuelta por la famosa calle de las Tapias, barrio chino de Barcelona, lúgrube, penoso, cutre, las putas más viejas
y desdentadas de la ciudad, quizás del mundo entero, años más tarde ví que no era así, la mili me enseñó El Molinete en Cartagena, el terror, el inframundo,
pero esa es otra historia.
Estábamos sentados, haciendo el gilipollas, y mirando las entradas y salidas de las putas en la portería del meublé, y pasó lo que tenía que pasar
- A que no hay huevos
- que no ? más que tú pringao, pero solo llevo 300 pelas, y la rubia pide 400.
- yo te dejo las 100, toma.
Me acerco a la rubia acojonao, no sé ni la edad que debía tener, muchos, pero estaba buena,
mi rabo no distinguía edades ni razas, y si me hubieran apurao, ni sexo,
solo veía 2 tetas como 2 cabezas de Benito.
- Cuanto ?
- Que edá tienes niño
- 15, casi 16
- pos son 400 peseta
- vale, hace francés ?
- pero que francé ni francé, questamo en españa, chava
- vale vale, 400, tenga
Nos metimos en la portería, planta baja, sala de recepción, y una taquilla como de cine con una vieja muy vieja, que le dio una toalla y una mini pastilla de jabón.
Salió la vieja y la seguimos por un pasillo a ritmo tortuga, 3 o 4 minutos menos de 10 metros.
- Dale una propinilla a la señora, chiquillo.
Joer, 5 duros me costó el paseo.
Abre la mini habitación, y el horror, una cama indescriptible, sábana amarillenta curtida en mil folladas, con lamparones,
una mesita para dejar el condón y un bidet con el grifo roto y con el mango unido con cinta aislante.
Olor a humedad, a orines a lefa y a pobreza.
- Quitate los pantalones y siéntate en el bidé que te lave.
Me siento, viene, se enjabona las manos con jabón lagarto y procede a descapullarme y lavarme.
Después ella, se echa un poco de agua en el papo, sin jabón.
Se quita el mini vestido y las bragas y se tumba en aquello que no se hubiera acostao ni Papillón.
- Niño, ven paquí, túmbate al lao.
Lo hago, me coje el cimbrel, y le da unos meneillos, y cuando alcanza el tamaño máximo de 9x2, con un punto de dureza razonable,
me enfunda una goma que me bailaba por todas partes y ruge
- Niño, ponte encima, aligera
Hasta ese momento, había visto potorros en las revistas, pero en esa época, siempre estaban tapados por una mata de pelo, que ni chewaka.
Y esa es la primera vez que ví aquello, horrible y feo, color morao, un puto hachazo en medio del coño, que asco, casi hecho la pota.
Metí en la grieta mi mini-polla, pensando que quizás había un alien dentro y que no saldría entera, hice flop-flop cuatro veces, descargué el lechazo segoviano.
Y ya era un hombre.
- Que, ehh, a que ta gustao ?
Me vestí y salí por patas, aún me dura el trauma. No soy como soy por que sí.
Let´s go.
Tampoco en el Foro ligue, ya que alguno del general, nunca asoma el hocico por ahí, y es un tema por el que casi todos hemos pasado, bueno,
hay alguno que tiene pinta de no haber catado mujer/hombre/travelo/animal.
Se trata de esa primera vez que la metísteis en adobo, con una novieta, vecina, puta, travelo o con el gato.
Mi relato :
Debía tener 13 o 14 primaveras, con el rabo siempre como el bate de Negan, y estaba con un primo mío, unos 4 o 5 años mayor, con novieta, y que ya mojaba el nardo,
de hecho, a los 18 la dejó preñada y se casaron.
Hoy en día, todavía son happys con un nieto.
A lo que vamos, aquel día fuimos a dar una vuelta por la famosa calle de las Tapias, barrio chino de Barcelona, lúgrube, penoso, cutre, las putas más viejas
y desdentadas de la ciudad, quizás del mundo entero, años más tarde ví que no era así, la mili me enseñó El Molinete en Cartagena, el terror, el inframundo,
pero esa es otra historia.
Estábamos sentados, haciendo el gilipollas, y mirando las entradas y salidas de las putas en la portería del meublé, y pasó lo que tenía que pasar
- A que no hay huevos
- que no ? más que tú pringao, pero solo llevo 300 pelas, y la rubia pide 400.
- yo te dejo las 100, toma.
Me acerco a la rubia acojonao, no sé ni la edad que debía tener, muchos, pero estaba buena,
mi rabo no distinguía edades ni razas, y si me hubieran apurao, ni sexo,
solo veía 2 tetas como 2 cabezas de Benito.
- Cuanto ?
- Que edá tienes niño
- 15, casi 16
- pos son 400 peseta
- vale, hace francés ?
- pero que francé ni francé, questamo en españa, chava
- vale vale, 400, tenga
Nos metimos en la portería, planta baja, sala de recepción, y una taquilla como de cine con una vieja muy vieja, que le dio una toalla y una mini pastilla de jabón.
Salió la vieja y la seguimos por un pasillo a ritmo tortuga, 3 o 4 minutos menos de 10 metros.
- Dale una propinilla a la señora, chiquillo.
Joer, 5 duros me costó el paseo.
Abre la mini habitación, y el horror, una cama indescriptible, sábana amarillenta curtida en mil folladas, con lamparones,
una mesita para dejar el condón y un bidet con el grifo roto y con el mango unido con cinta aislante.
Olor a humedad, a orines a lefa y a pobreza.
- Quitate los pantalones y siéntate en el bidé que te lave.
Me siento, viene, se enjabona las manos con jabón lagarto y procede a descapullarme y lavarme.
Después ella, se echa un poco de agua en el papo, sin jabón.
Se quita el mini vestido y las bragas y se tumba en aquello que no se hubiera acostao ni Papillón.
- Niño, ven paquí, túmbate al lao.
Lo hago, me coje el cimbrel, y le da unos meneillos, y cuando alcanza el tamaño máximo de 9x2, con un punto de dureza razonable,
me enfunda una goma que me bailaba por todas partes y ruge
- Niño, ponte encima, aligera
Hasta ese momento, había visto potorros en las revistas, pero en esa época, siempre estaban tapados por una mata de pelo, que ni chewaka.
Y esa es la primera vez que ví aquello, horrible y feo, color morao, un puto hachazo en medio del coño, que asco, casi hecho la pota.
Metí en la grieta mi mini-polla, pensando que quizás había un alien dentro y que no saldría entera, hice flop-flop cuatro veces, descargué el lechazo segoviano.
Y ya era un hombre.
- Que, ehh, a que ta gustao ?
Me vestí y salí por patas, aún me dura el trauma. No soy como soy por que sí.
Let´s go.