Es que no hay mucho que contar...
Me pasé por allí a eso de las 12 y cuarto, pagué mi entrada, el local bonito, bien decorado, música estridente, mucha chavalería, demasiado viejo para ellos... No estaba en mi ambiente, precisamente. Al final terminé abordando a una chica de Toulouse llamada Jaqueline que estudiaba empresariales y era su último año, una chica bajita cabezona y algo rechoncha. Ninguna beldad gala precisamente, pero elegante. Y llegado a un punto me enrrollé con ella, como si fuera un adolescente, la besé en la boca. A eso de las 4 me la llevé a El Sol, tomamos otra copa (estaba tan borracho que pretendí meterla mano ahí) y me dijo de ir a su piso, un piso de estudiantes de la zona de Cuatro Caminos en donde vivía con otras tres al parecer. Me metí en su cuarto. Estaba cachonda y reía mucho, debía hacer tiempo que no follaba. La subí su blusa y y la quité el sujetador y tenía unas tetitas pequeñas pero duritas puntiagudas con los pezones haciendo curvita, se las estuve lamiendo y fue delicioso para mí, a pesar de que ya estaba bastante borracho y no se disfruta igual. No tenía condones y ella volvió con ellos (se los debió de prestar otra compañera de piso, vete a saber). Estaba muy mona en braguitas, y olía muy bien, eso sí lo recuerdo. la estuve tocando por encima de la braga y soltaba como risitas, como si la hiciera cosquillas, se la baje y tenía un coñito estrecho cuando se la metí, me corrí de gusto y me dormí. Me desperté sobre las 9 y me fui, quedamos en que la llamaría.
Y esa es la historia.