La borbonada siempre ha representado una fatalidad en la historia de España, desde el primer Borbón, el Anjou, en adelante, esta banda de frenchis de mierda no han hecho más que jodernos vivos, con su modelo centralista jacobino, rompiendo con el régimen foral y tradicional de Las Españas de los Austrias (Esos sí que tenían la polla gorda) y el resto de fatalidades que durante más de más de 300 años nos han hecho pasar de ser un Imperio a la mierda que somos con el R78.
Recordad que hasta la primera década del presente siglo todo el mundo era Juancarlista y le comían la polla con olor al toto de Bárbara Rey hasta la misma base al susodicho, ni una voz crítica. Luego todo empezó a derrumbarse, y la imagen de esta familia de degenerados se fue a tomar por culo. Recordemos al Duque Empalmado, los berrinches y pollas en la mesa de cristal de Froilán, el fenómeno del marichalazo, los líos del Juanca, los problemas de frenopático de Elenita la policromosómica y suma y sigue. Y en definitiva han sido los garantes, desde los años de la transición, de la mierda de régimen que nos hunde actualmente.
Al final tenemos a un planchabragas, Letizio VI, con una guarra izquierdosa, ambos intrascendentes en el devenir de España, con sus propios líos, probablemente alimentados por terceros, y no me refiero al tal De Burgos, para montar cortinas de humo mientras terminan de arruinarnos del todo. Además la tipeja esa hace proselitismo de su adhesión a la agenda 2030 públicamente con teorías del "decrecimiento" y su puta madre.
Vamos, que por mi pueden divorciarse y marcharse a las islas Sentinel.