Día 6: quedé con Jasc y un colega suyo (y un alemán) en un bar llamado Lolitas. Era un sitio de mamadas, aunque el nivel de las tías no era muy allá. En cualquier caso, eso no fue problema para que el colega de Jasc se llevara a un par para que le hicieran una mamada a 2 bocas. Parece que salió contento. Si Jasc es un auténtico crack, su colega no le va a la zaga, pues prácticamente vive en Tailandia, y se conoce todos los pequeños trucos para sacarle todo el jugo a estas bellas damas, dulces pero a veces, traicioneras. Noche de borrachera, en la que no hubo bacalao. Pues mañana, dos raciones.
Día 7: salimos por soi 6, y nos tomamos unos refrigerios. El colega de Jasc soba a una morenaza en el “Smoke and Kisses”, a la que me hubiera subido con gusto, pero ahí le dejamos disfrutando. Nos vemos más tarde en el “Quickly”, y una pequeñita rebosante de morbo empieza a tontear, a manosearme y a cogerme el rabo. Para arriba, por morbosa. 300b por la habitación y 1000b por el short time. Echamos 2 kikis en una hora, me corro en su boca y le doy 300b de propina, pues se ha portado de cojones. Por la noche, le entro en Insomnia a una morenita muy guapa, que estaba con sus dos hermanas (una de ellas, tremenda) y dos rusos, que no paraban de invitarlas a copas (pringaos, pensé, aunque luego caí yo, jajajajaja). Mi musa de 20 años (preciosa de cara, pero sin apenas tetas) me pide 3000b, pues es una gogo del Farenheit. Le digo que 2000b, y cuando me estoy yendo, accede. Tiene hambre, y nos sentamos los 6 en el restaurante del Ibar. El caso es que los rusos se ponen a discutir con sus parejas y me veo cenando solo con las 3 hermanas. Tuve que invitar, pero al menos esta vez fueron comedidas, y solo pagué 1000b por las 4 cenas. De camino al hotel, me percato de que mi amiga estaba más borracha de lo que pensaba. Vamos, que no pudimos follar por la noche, y dejamos un polvo para las 11am y otro para las 5pm.
Día 8: voy a soi LK metro y me tomo 2 cervezas con una vieja amiga en el Scooters (es la primera tailandesa que disfruté hace 3´5 años), y nos contamos las batallitas (me quiere llevar al altar…..bueno, a mí, y a cualquiera que la mantenga a ella y a su hijo). Vienen Jasc y un amigo suyo chino, y peinamos los gogos de esa zona. Nada más entrar en el Champagne, reconozco a una tetona alocada a la que me follé en marzo, que fue algo agresiva con mi falo, provocando una herida que me tuvo un par de días fuera de combate. En otro gogo de enfrente, también me encontré con otra conocida (era la noche de los reencuentros). Me separé de mis compañeros, y visité el gogo Windmill (el más bizarro de todos). Estuve tocándole las tetas a dos bailarinas, y cuando salía, vino una corriendo para devolverme la cartera que me había dejado olvidada (un detalle, estaba todo el dinero). Acabé en una zona de after hour que me recomendó Jasc, y estuve charlando con dos doncellas (una de ellas campeona de billar), pero no me convencieron y estaba bastante borracho, así que para casa.
Día 9: escribí a mi amada Yiwaaa, pero se había marchado a Bangkok. Me dijo que fuera a verla y me lo planteé, después del fracaso de anoche, pero iba a ser mucho lío con cambios de hotel, transporte, y luego a saber si me salía rana, así que decidí quedarme en Pattaya (la veré la próxima vez). Visité soi 6, soi7, soi8, gogos e Ibar-Insomnia. Recorriendo las plantas baja y alta, ya sabía donde se ubicaban mis víctimas, y mis acosadoras, así que iba zigzagueando para intentar no coincidir demasiado. Finalmente, divisé a una puretilla tetona (no es mi estilo, pero se la veía viciosilla), y me la llevé al hotel después de unas cervezas (creo recordar que por 2500b). Efectivamente, era muy viciosa. Estuvo bien, pero en mi última noche buscaré alguna más tierna.
Día 10 y último: me estuvo mareando toda la noche una preciosidad que tenía fichada de thaifriendly, que si estoy en esta disco, que si ahora estoy en esta otra, que donde estás. Al final, mi gozo en un pozo. Pero en mi coto de caza favorito (Ibar-Insomnia), después de driblar a mis ex, descubrí a Ice, un bomboncito, medio filipina, medio tailandesa. Nos caemos bien y me la llevo al hotel (creo recordar que por 2000b). Si bien no era la más guapa (Yiwaaa, sin duda), ni el cuerpo más espectacular (Nanny, la hambrienta, enemiga de los condones), el conjunto era notable, y le gustaba la caña. Fue una última noche para recordar. Después del polvazo matutino, me eché la maleta al hombro, y la invité a comer antes de mi marcha. Vino Jasc a despedirse y, bueno, que han sido 10 días, pero se me ha hecho corto. VOLVERÉ.