Vidas de mierda colándose en el sumidero de las tragaperras

Necesitamos máquinas de pachinko o pachenko o como se digs
 
Habría que nacionalizar el juego. Me refiero a todo, no sólo a la lotería.

Menuda forma de recuperar el PER, el paro, el IMV, el Ingreso Mínimo Aragonés...

Sería un win win.
 
Vamos con la clientela.
No tengo ni puta idea de cómo organizar esto. Iba a hacerlo por grupos estilo "ahora voy a hablar de inmigrantes, ahora de viejos, ahora de tal" pero es que entre ellos no había una homogeneidad así que no tendría sentido.
Voy a hablar, pues, de los que recuerde que merecen una pequeña recensión.

- El libanés Kamal. Aprovecharé su importancia para hablar de un tema que acabáis de comentar y es que se tipo se dejaba la puta vida en la ruleta y se le daba un trato que ni a un rey. Servicio personalizado, íbamos a por comida para él, pagada por el salón claro está, si tenía que ir a por algún recado se iba en su lugar, reservas de máquinas por semanas aunque no apareciese y chivatazo de cuándo iba a venir una máquina nueva.
Bueno, el tipo era un libanés que iba como un pincel, olía cojonudamente bien, atractivo pese a ser ya un cincuentón, con su novia de 20 años, puta para más señas, siempre a su lado y podrido de pasta. De dónde provenía ese dinero no lo sé pero algo ilegal con seguridad pues tenía negocios, pisos comprados y el propio hecho de jugar como lo hacía daba a entender que estaba blanqueando dinero de turbio origen.
Nos enseñaba fotos de su novia en bolas, chupando pollas etc. Nos decían "te gusta? Fóllatela si quieres en el baño, yo no te pido nada. Si ella quiere algo de dinero es cosa suya pero fóllatela si quieres"
Yo nunca lo hice pero un compañero ecuatoriano sí y según él la tipa nunca le pidió nada a cambio.
El tipo tenía un restaurante libanés en la zona de prosperidad y nos invitó varias veces a comer allí, con baile incluido de la novia.
El tipo venía a veces vestido especialmente bien y decía que iba a ver al director de no se qué banco. Solía volver ya de noche con ese señor que se supone que era el director del banco y allí que pasaban unos horas echando a la ruleta y hablando de sus cosas.
Para navidades, las dos que pase en ese salón, nos dió a cada mongólico que trabaja allí un billete de 500 euros y también solía dejar buenas propinas, a pesar de que como todo jugador a la larga siempre perdía.

- Laurita: vieja decrépita que venía meada siempre. Mediría 1'40 y tendría 90 años. Apenas podía hablar pero allí que estaba al abrir el salón, se iba a comer y volvía al rato y se quedaba hasta el cierre. Experta en la baby fruits y la nevada.
Era común que se mease y cagase encima, así de claro. Pasar por su lado era un dolor para los sentidos.
Un buen día en vez de chorrear por la pernera de su la talón el meao habitual vinos que chorreaba sangre y que ella estaba con la cabeza apoyada contra los botones de la máquina. Llamamos a una ambulancia que vino, se la llevó y nunca más la volvimos a ver. No sé qué se le rompió por dentro pero debió matarla.

- El escritor que vendía sus poemas en la calle a cambio de la voluntad: El tipo decís ser poeta maldito. Vendía sus poemas en la calle y vivía con su hermana, que de vez en cuando venía a llevarle para casa.
El tipo enloquecía con las máquinas. Habitualmente yo hablaba con él mucho de libros, y me recomendaba buenos libros la verdad y sabía bastante, pero las máquinas eran su perdición. Las insultaba, las golpeaba, se tiraba del poco pelo que tenía. Éste era de los que se enganchan con una y meten lo que no está escrito. Al final acaban sacando el premio gordo pero a costa de haber metido el triple. Siempre se iba diciendo que no volvía pero no tardaba más de un mes y ya estaba liado con cualquier otra.
Un día se juntó con dos rumanas que estaban por ahí pululando y le propusieron ir a un hotel. El pobre hombre volvió al rato, que nada más salir del salón le habían metido en un coche donde estaban dos rumanos, le habían dado de hostias y le habían robado.

- El hombre de negocios: este señor iba siempre muy trajeado, muy educado aunque frío en el trato y siempre estaba hablando por teléfono. Procuraba irse fuera a hablar pero cuando estaba muy atrapado por la máquina ni disimulaba. Oía cosas de negocios, típicas del trabajo y luego otras llamadas él se excusaba. Decía que estaba en no sé qué reunión, que tardaría en en llegar, que le dejasen el trabajo para tal persona etc.
La mujer aparecía a veces por allí desesperaba y lloraba y nos pedía que no le dejaremos pasar. Al parecer en el trabajo estaban al corriente del vicio de este señor aunque él pensase que los tenis engañados y llamaban a la mujer cuando empezaba a faltar y ella se recorría un montón de salones hasta que daba con él.
Un día en vez de la mujer vino el hijo, un chaval ya mayor de edad, y en vez de llevárselo se quedó con él y empezó a ser frecuente verles juntos y el chaval empezó también a venir con la novia al principio y solo más tarde. Acabó igual de atrapados que el padre.

- Los gitanos: los que iban a mi salón eran jóvenes, de trato afable aunque muy dados a enredar a los de su alrededor. Pedían dinero o hacían sus trapis para conseguirlo. Uno de ellos se llevaba a su novia gitanita, una preciosidad, y la enviaba a conseguir dinero tanto por el salón como por la calle. Y lo conseguía.
Este chaval acabó muy mal. En una enganchada con la ruleta se dejó muchísimo dinero. Venía al abrir y se iba al cerrar sin siquiera irse a comer. Vendió su móvil, su ropa, sus cadenas. Vendió todo lo que pudo. Al final y viendo ya que la cantidad era tal que jamás podría conseguirla, pilló un taburete y lo estampó contra la cúpula y destrozó un par de máquinas. Entró el modo berserker, el gitanazo y no había forma de pararle. Lloraba y gritaba y se desgañitaba, que había robado a gente de su familia, que le iba a matar, que llamásemos a la policía, que prefería ir a la cárcel. El encargado ya había llamado mucho antes de que dijese nada. La policía vino y supongo que para asegurarse su entrada en prisión el tipo recibió a uno de los topboc con un taburetazo.
Recuerdo cuando venía las primeras veces con el brazo siempre echado por los hombros de su preciosa novia, pidiendo fantas porque le gustaban mucho, con un aire infantil en el trato, y el tipo ahí lo tenías ahora, esposado. Un descenso a los infiernos que no fue el único que vi, desde luego, pero sí el más gráfico.

Luego sigo que esto está quedando muy largo
 
Por cierto @naxo, si bien es cierto que hay salones por todo Madrid, incluso por buenas zonas como la calle Goya o la zona de Alberto Aguilera, es una realidad que calles como Alcalá en su tramo de ciudad lineal a ventas, Bravo Murillo en su tramo de plaza castilla a cuatro caminos, puente de vallecas o Carabanchel, están totalmente plagadas de estos negocios. Son barrios humildes, con mucha inmigración, y que hay más salones ahí que en zonas de postín es una realidad
 
Es una realidad que hay más, no que estén reducidos a esos sitios. Y no siempre. En Málaga tengo yo vistas calles con 2 o 3 de estas salas y el piso en venta no baja de 350,000€, para lo que es Málaga.
Lo que vengo a decir es que a fuerza de repetirlo, se convierte en realidad que solo hay salones de juego en barrios humildes, y no. Ni de coña. Ludópatas hay en todos lados, algunos incluso serán capaces de desplazarse a otras zonas para que no les vean los vecinos ya que tendrán cierta reputación que mantener.
 
Yo vi una señora en la zona de tragaperras que se había quedado literalmente petrificada con la palma de la mano hacia arriba pareciendo que sujetaba una bandeja imaginaria.

Hubiese pagado por saber que estaba pasando por esa cabeza en esos momentos.
 
Al lado de mi curro, en una zona para nada deprimida, los que siempre estaban merodeando por la sala eran los típicos moritos que no tienen nada que hacer más que invertir las ayudas que reciben y los que estaban trabajando en la obra de los edificios que, en ese momento, se estaban construyendo, una banda que en el momento del descanso se fumaba su canutito y enfilaba hacia las maquinolas.
 
Al lado de mi curro, en una zona para nada deprimida, los que siempre estaban merodeando por la sala eran los típicos moritos que no tienen nada que hacer más que invertir las ayudas que reciben y los que estaban trabajando en la obra de los edificios que, en ese momento, se estaban construyendo, una banda que en el momento del descanso se fumaba su canutito y enfilaba hacia las maquinolas.
En el casco viejo de Bilbao antes de que tapasen las cristalera se podía ver que en la sala de apuestas eran todos negros y moros jóvenes provenientes de otras zonas.
En mi barrio hay un bareto sala de juegos donde los rumanos han liado varías.

En esto se van los impuestos de los españoles.
 
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En el casco viejo de Bilbao antes de que tapasen las cristalera se podía ver que en la sala de apuestas eran todos negros y moros jóvenes provenientes de otras zonas.
En mi barrio hay un bareto sala de juegos donde los rumanos han liado varías.

En esto se van los impuestos de los españoles.

Que barrio es?
 
Por cierto @naxo, si bien es cierto que hay salones por todo Madrid, incluso por buenas zonas como la calle Goya o la zona de Alberto Aguilera, es una realidad que calles como Alcalá en su tramo de ciudad lineal a ventas, Bravo Murillo en su tramo de plaza castilla a cuatro caminos, puente de vallecas o Carabanchel, están totalmente plagadas de estos negocios. Son barrios humildes, con mucha inmigración, y que hay más salones ahí que en zonas de postín es una realidad

Los arrendamientos no valen lo mismo en unas zonas que otras y el negocio va de rentabilidad/m2.

Muy buenas sus narraciones, por cierto.
 
Los arrendamientos no valen lo mismo en unas zonas que otras y el negocio va de rentabilidad/m2.

Muy buenas sus narraciones, por cierto.
No, si yo no he querido decir que estén ahí porque quieren desplumar al Wilson de turno o al hijo del camarero, solo quería puntualizar que hay muchas más en esas zonas, por los motivos que sea
 
No, si yo no he querido decir que estén ahí porque quieren desplumar al Wilson de turno o al hijo del camarero, solo quería puntualizar que hay muchas más en esas zonas, por los motivos que sea
Claro, y si hay más por esa zona es por la razón que menciona @THORNDIKE, entre otras de menor calado, y no porque la estrategia global sea despojar de sus riquezas a quien menos tiene.
 
Yo, el practicum de la carrera lo hice en una asociación para la rehabilitación de jugadores patológico y otras adicciones sin sustancias.
Era puro lol las historias de los notas que venían a consulta.
Alguno venía con la bigotuda con el morro bien torcido.
Familias completamente arruinadas por los jugadores que se lo fundían absolutamente todo sin que nadie se enterara.
Auténticos artistas del engaño y el subterfugio.
Cuando se querían dar cuenta las parientas, las cuentas estaban en números rojos más unos cuantos "Cofidis" a deber.

Me sorprende que sean legales los salones de juego cada diez metros. Han salido como setas.
 
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¿Cómo, cómo? ¿Que hay ludópatas grabándose en ataques de ludopatía y dando discursos alucinados sobre esta u otra tragaperras? :lol:

Qué puta maravilla.

En mi putísima vida he jugado a ninguna tragaperras. Es que me dan una moneda para que juegue y no sé cómo se hace. No sé qué es un avance, ni para qué valen los botones, ni cómo se maneja, ni hostias. Me ponen delante de una de esas y es como si me ponen delante de la consola de mandos de un reactor termonuclear, ni puta idea de qué botón hay que dar. Y ni me interesa.

Hombre, raro es que no conozcas a este amo:

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Yo eché una vez una moneda de cinco duros a una máquina de estas, por probar. Vi que en cinco segundos se la había comido a cambio de nada, y nunca mais. Me duraban más en el Punch Out o el Golden Axe.
 
Eso sucede en los casinos de Macao donde te traen bebidas gratis por el mero hecho de estar en algunas salas de juego, son birrias de bebidas pero claro, si estás dándole duro te mandan un camarero con lo que quieras tomar.

Un libanés que conoci me contó que en Las Vegas un paisano suyo que se deja millones en cada viaje pedía lo que quería y lo tenía; ejemplo : No haber entradas para ver a Celine Dion que actuaba en ese casino y ponerle una fila de butacas para el y sus amigos a la altura del escenario.
Eso de las bebidas gratis como si fuera una barra libre all you can drink me pasó allí y también en Las Vegas, jugando al poker que es a lo único que sé jugar en un casino. En Filipinas hasta te dan gratis de comer; allí a falta de tragaperras lo que engancha al personal y destroza familias son las peleas de gallos, impresionante espectáculo, cómo lo viven, cómo vuelan los billetes en recintos abarrotados todos los domingos hasta en la más remota de las aldeas.

De las tragaperras ni puta idea pero con lo poco que vi en estos tres sitios y algún casino más de baja estofa me creo todas las historias contadas y todas las barbaridades serán pocas.

En mi ciudad algún fin de semana hemos acabado el grupo de hamijos en un bingo céntrico a eso de las 5 de la madrugada tajaos despollándonos con los tropecientos cartones que nos juntábamos, las líneas que cantábamos o casi y sobre todo el ambientazo que allí se podía ver, no sé cómo no nos echaban. Aquí tenemos pocos chinos o negros pero de viejas estaba aquello abarrotado, alguna hasta tirando miraditas que harían estremecer al forero medio (a alguno que otro también lo engatusarían, que nos vamos conociendo). Más bingo y menos fracachat, y regresen a contarlo.
 
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En el casco viejo de Bilbao antes de que tapasen las cristalera se podía ver que en la sala de apuestas eran todos negros y moros jóvenes provenientes de otras zonas.
En mi barrio hay un bareto sala de juegos donde los rumanos han liado varías.

En esto se van los impuestos de los españoles.
Yo es que a la entrada de estos sitios no veo otra cosa que moros, negros y alguno del este. Si viese a un tipo normal me sorprendería.

A veces los rumanos andan con buenos coches aparcados en doble fila. Algo turbio se traen entre manos esos.
 
No, si yo no he querido decir que estén ahí porque quieren desplumar al Wilson de turno o al hijo del camarero, solo quería puntualizar que hay muchas más en esas zonas, por los motivos que sea
Yo sí lo quiero decir. El target de las casas de apuestas, sobre todo las online, es clase social media baja y baja y menor de treinta. Ahora porque la nueva legislación lo ha limitado y les ha jodido, pero antes su planificación de medios buscaba esta audiencia.

Intentan ser vistas por gente joven de recursos escasos como el atajo para subir de nivel económico, porque para esta gente eso es algo que no es fácil de realizar por la vía convencional del estudia y trabaja. Haber hay clientes de todos los estratos y edades, pero su target es este.
 
Olvidé decir que en las ciudades africanas que visité los últimos años también se veían, como aquí, los antros estos cada pocos pasos. Recuerdo entrar a uno en Kampala porque había a esa hora algún evento deportivo que me interesaba y joder qué tugurio, muchos niggas apostando vete a saber a qué y ni una triste TV tenían. Me miraron todos asombrados y salí por patas. Cuando vuelva intento hacerme hamijo de algún enganchao o algún currante a ver qué anécdotas me cuentan.
 
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Lo que decís de las bebidas, también se da aquí. O se daba, porque se lo prohibieron, pero cuando yo curraba allí desde luego que dábamos bebida gratis a todos los clientes y si el cliente era habitual, que solían ser casi todos, tenían barra libre. Teníamos refrescos de todo tipo, una máquina de café y alcohol cervecero. También de vez en cuando, normalmente una vez por turno, calentábamos una tortilla y tocaba pasar la misma cliente por cliente a ver si quería un cacho. La tortilla era lo habitual pero también hacíamos sandwicheses.
Si el cliente era un perdido estilo el libanés Kamal, podían libremente pedir que fuésemos a por una hamburguesa al McDonald's o un bocadillo o lo que quisiera que íbamos a por su comida, pagada por el salón claro. Con Kamal la cosa se fue un poco de madre porque el mongólico del encargado acabó por darle tales poderes en el salón que prácticamente podía utilizarnos como sus criados personales para cosas de lo más dispares como ir a su casa a esperar un paquete que iba a llegar esa mañana.

Había también días de evento especial en los que nos hacían disfrazarnos y había alcohol a raudales. Los clientes y nosotros mismos acabamos borrachos todos. Yo esos días me sentía fatal, ridiculizado y el ambiente de ver cómo muchos clientes iban a este evento ilusionados no favorecía en mi estado de ánimo.
Muchos clientes, durante la semana, me decían "el viernes es el evento, no? Qué ganas tengo" y esa persona me daba mucha pena. Pensaba que llevaba una vida tan jodidamente triste que le ilusionaba que se decorarse el salón y hubiera ese día un ambiente festivo, con la finalidad única de sacarles más el dinero, claro, pero muchos lo vivían como una especie de nochevieja y eso me daba pena, me ponía triste y de mal humor.
Había viejos que venían solos, que estaban solos en el mundo, que sus hijos estaban por ahí haciendo sus vidas y la mujer bajo tierra, que su mejor momento era el rato que pasaba en el salón, echando a la máquina no solo por vicio sino porque era la única manera que habían encontrado de relacionarse con otras personas, y esta gente vivía los eventos con ilusión porque le iba a dar comida y bebida y en los eventos se reían y aplaudían y al final te decían lo bien que se lo habían pasado y todo esto, ya digo, me ponía muy triste.

También decir que si bien el tabaco estaba prohibido de manera generalizada, a partir de las 10 cuando la clientela decaía, se solía dejar a los clientes que fumasen.
Con lo único que eran del todo estrictos era con el tema menores. No querían ni un menor en la sala, daba igual quién fuese o qué fuese a hacer, no querían a ni uno.
En cierta ocasión se les coló un menor en otro salón con la buena suerte que la policía entró y denunció, perdón, propuso para sanción, y el gerente suspendió de empleo y sueldo a los presentes en ese turno. Meses después les volvió a pasar lo mismo pero con el resultado de que por reincidir les cerraron el salón durante 6 meses. La medida que el gerente tomó fue echar a la calle a todos los trabajadores de ese salón, no solo a los del turno que se les coló.
Ya digo, con este tema eran muy estrictos.
 
No querían ni un menor en la sala, daba igual quién fuese o qué fuese a hacer, no querían a ni uno.
En los casinos es lo mismo; de hecho tienen un monton de animadores e imbeciles haciendo cosas para crios fuera de las salas para que te metas dentro a jugar y los crios tengan algo divertido que hacer y no se quieran marchar a otro lado.

Otra cosa prohibidisima son las fotografias y es imposible sacar una sin que te pillen (en Macao en estas labores tiene a filipinos). Mi mujer saco una fotografia panoramica desde unas escaleras sin darse cuenta que estabamos dentro de la zona de juegos y de la nada salio un guarda.

Dejando a un lado el juego en si,me encanta el ambiente de los casinos; te metes un domingo a las 11 am de verano en Macao a 40 grados a la sombra y alli estas en un ambiente fresco, con el oxigeno a tope y con una sensacion de que estas un sabado a las 11 de la noche de subidon.

Son unos crack en crear sensaciones artificiales al cerebro.
 
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En los casinos es lo mismo; de hecho tienen un monton de animadores e imbeciles haciendo cosas para crios fuera de las salas para que te metas dentro a jugar y los crios tengan algo divertido que hacer y no se quieran marchar a otro lado.

Otra cosa prohibidisima son las fotografias y es imposible sacar una sin que te pillen (en Macao en estas labores tiene a filipinos). Mi mujer saco una fotografia panoramica desde unas escaleras sin darse cuenta que estabamos dentro de la zona de juegos y de la nada salio un guarda.

Dejando a un lado el juego en si,me encanta el ambiente de los casinos; te metes un domingo a las 11 am de verano en Macao a 40 grados a la sombra y alli estas en un ambiente fresco, con el oxigeno a tope y con una sensacion de que estas un sabado a las 11 de la noche de subidon.

Son unos crack en crear sensaciones artificiales al cerebro.
Yo a los únicos casinos que he entrado es en las Vegas y sí, pasar del horribles clima desértico de allí y meterte a una temperatura fresca daba mucho gusto. Por otro lado los casino-hoteles de allí eran un espectáculo digno de ver, tanto por fuera como por dentro.
Allí, por cierto, solo eché 25 centavos en un futbolín y a nada más.
Bueno, también le di otra moneda a un mendigo que estaba tocando una tonada muy bonita con una trompeta
 
Había viejos que venían solos, que estaban solos en el mundo, que sus hijos estaban por ahí haciendo sus vidas y la mujer bajo tierra, que su mejor momento era el rato que pasaba en el salón, echando a la máquina no solo por vicio sino porque era la única manera que habían encontrado de relacionarse con otras personas, y esta gente vivía los eventos con ilusión porque le iba a dar comida y bebida y en los eventos se reían y aplaudían y al final te decían lo bien que se lo habían pasado y todo esto, ya digo, me ponía muy triste.

Te creo, por trabajo durante unos años traté a diario con mucha gente y para los mayores era una especie de nieto-psicólogo, te empezaban a explicar sus cosas y tal y claro... allí un buen rato (hora larga más de una y de dos veces). La verdad es que se me ponía mal cuerpo, y tampoco les quieres cortar porque ves que realmente están ilusionados de hablar con alguien y al conocerlos pues te das cuenta que su vida es dejar que los días vayan pasando...lo que nos pasará a nosotros de mayores supongo.

Volviendo al tema, si que es cierto lo de los menores, en ese aspecto siempre los he visto muy estrictos, DNI o no entras
 
Lo de las casas de apuestas sí es por target donde la gente humilde. Tú ves las apuestas de @cuellopavo y son una muestra. Las cifras quiero decir. A él se le nota que controla para no pillarse, pero el target es más o menos ese. Gente que apuesta 200 y un día gana 50 y le arregla el fin de semana y que cuando pierde se pica y va cuesta abajo.

En los barrios "bien" lo normal es que un tío de los que vive allí se limpie el culo con 50€, no sé si me entienden.
 
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Lo de las casas de apuestas sí es por target donde la gente humilde. Tú ves las apuestas de @cuellopavo y son una muestra. Las cifras quiero decir. A él se le nota que controla para no pillarse, pero el target es más o menos ese. Gente que apuesta 200 y un día gana 50 y le arregla el fin de semana y que cuando pierde se pica y va cuesta abajo.

En los barrios "bien" lo normal es que un tío de los que vive allí se limpie el culo con 50€, no sé si me entienden.
Las casas de apuestas tienen que objetivo las clases sociales bajas porque tienen un nivel cultural menor y nula educación.

Y entre el grupo anterior, como todos hemos visto, inmigrantes que se han criado entre perros pulgosos y una banda de hermanastros de padre desconocido.
 
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