JAJAJAJA QUE GRANDE LA FOTO!
Estoy por reducirla y ponerla de avatar, pero me da pereza hacerlo, no tengo el photoshop instalado.
Y mira tío yo no creo que hiciera bien. Caí como un pringao en su juego: ella se montó la película de que se había enamorado locamente de mí, y en vez de tomármelo con calma, la seguí el rollo, para que entonces ella me dijera "NO PUEDE SER". Coño si lo empezó ella, pero debí haber sido más frío, seguirla la corriente cuando decía que lo nuestro era imposible, en vez de como un gilipollas tratar de convencerla desesperado perdido de que no, de que era posible, de que me importaba y no iba a dejarla ni a utilizarla ni esas cosas que me achacaba si se lanzaba ella, que me diera una oportunidad. Porque a la postre me mandó a la mierda igual. Luego no vale de nada rebajarse, esa enseñanza he aprendido, es más es contraproducente, un macho alfa jamás lo haría (pero yo no soy un macho alfa).
En realidad como dicen wetamir y Hoyt son adictas al DRAMA. A ese drama del amor imposible y toda esa mierda, el daño que me hiciera cuando me había ilusionado no parecía importarla tanto, porque gracias a él podría contar a sus amigas que un tío mayor se había declarado y ella estaba enamorada sí, pero no se sentía preparada para un compromiso tan serio y prefería divertirse y tal.
Pero no pienso que lo hiciera friamente todo ese montaje, simplemente es que son así, y terminará como dice Hoyt siendo brutalmente percutida por un pelocenicero o un bakala que a los tres segundos se corra dentro de ella igual sin condón.
El caso es que yo vi a una persona muy especial por su sensibilidad artística e ingenio, pero no vi o no supe tratar a la mujercita neurótica que también era, más pendiente de vivir el DRAMA para contar a sus amigas que de tener una historia con un tipo que la comprendiera sin duda más (al menos en su faceta artística e intelectual) que los novietes que se eche. Y que estoy seguro de que la trataría mucho mejor.
En cualquier caso, y a pesar de que esa persona me parecía especial, al margen de su sexo y edad, porque tenía ciertas inquietudes que yo comparto así como la misma vocación. Por lo que me sentí muy unido en cierta manera a ella, y pude hablar con ella de temas y proyectos que con otras muchas jamás se dio la ocasión porque pertenecían a ámbitos muy distintos. Lo cierto es que no dejaba de ser y comportarse como una muchachita de 18 años con sus pajitas mentales y sus tonterías en la cabeza. Y a mí por infeliz me cazó, otra igual no, pero de ella no me lo esperaba, la creía de otra manera que cualquier jenny adicta a las telenovelas. Pero así fue.
En realidad pienso que todo fue mucho más prosaico que sus rollos, platónicamente igual me amaba o se había montado la película de que se estaba enamorando de mí, pero eso no era amor, era una fantasía que luego tuvo la frialdad de cortar por lo sano, porque con los pies en el suelo que tienen, pensó que no la convenía sencillamente. Luego sus excusas y rollos pseudorománticos de amores imposibles y desgarros de alma son pura mierda cuando me negó una puta oportunidad de empezar a salir, luego tanto no me amaba como decía, eso creo yo.
Creo que para amar hay que nacer como para pintar o esculpir o crear música y muy poca gente tiene ese don en realidad, que más es una maldición a veces, por el daño que hace a quien lo posee. La jenny escritora desde luego no sabe lo que es el amor ni creo que lo sepa nunca. Lo digo porque yo sí me he enamorado alguna vez en la vida y no me importaron todas esas cosas que a ella la echaron para atrás, es un sentimiento suicida a veces y autodestructivo, lo suyo más parecía ganas de vivir o pseudovivir un rollo romántico imposible y dramático, pura bazofia emocional de tercera. Que tiene que ver con el amor de Byron o Espronceda lo que las telenovelas venezolanas a las que son tan adictas.
Esa reflexión me hago.
Un saludo.
PD Otra reflexión que me hago es algo que he aprendido en la vida que no es otro que cuando una mujer toma una decisión, es muy dificil por no decir imposible que la cambie. Y que no hay que rebajarse ni suplicar, ni siquiera pedir como esto último yo hice, ni por una mujer ni por nada. Sino quererse a uno mismo y saberse valorar sin perder la perspectiva por lo que nadie te diga, pero yo la vi confusa y me gustaba y no quise perderla, error, el Maestro del Tao me hubiera dicho déjala pasar, si de verdad te quiere volverá al redil ella sola y si no de nada servirán tus palabras.