Me lo acaban de pasar, de hecho alguien que conoce a la autora del esperpento.
La tía esta, harta de que no le haga caso ni su marido ni sus hijos, ni sus amigas (que supongo que no tendrá), decide que es buena idea hacerle una cuenta de Facebook AL PERRO. Postea sus camadas, sus pensamientos (supongo que hablará perruno ella, o se los comunicará por telepatía o vía anal, no sé), sus cosas. También, en nombre del perro (supongo que preguntando antes) manda solicitudes de amistad a diferentes personas, porque claro, el perro no controla mucho del ordenador pero sí sabe quién son sus amigos. Supongo que con las mismas también se enfada en nombre del perro porque alguien le borra o porque alguien no le acepta como amigo. ¿Quién no lo haría? Y en estas, tras llevar años cuidando de la cuenta de FB del perro, llegan los señores de Facebook y se la cierran, porque claro, sospechan que esa cuenta no pertenece a una persona real, que no está usando un nombre auténtico...
Y la tía se indigna. Lógico. ¿Cómo que no está usando su nombre auténtico? ¡El perro se llama así! En fin. Aquí tenéis la indignación de la tía, sus argumentos:
https://www.facebook.com/gloria.fg.5/posts/10202773330396579
Dejadle un recado o algo.
(También que la persona que me lo ha pasado estaba hasta los cojones de tanta tontería y un par de reportes sí que le ha dado, el hi de puta. Bien hecho, tú

)