Tras cinco capítulos vistos, hago mi pequeña valoración y refloto brevemente. Spoilers light.
Han conseguido mezclar al megamacho subnormal con la megahembra(s) megafemenina. Oda a la violencia American Way, donde no sólo se trata de derrotar al macho contrario sino de hacerlo delante del público de monos. El nuevo alpha belfo que, sin saber cómo, pasa de delincuente perseguido a chérif de pueblo de mierda en a tomar por culo pero que tiene de todo, a saber, mafiosos, matones, nazis, indios, amish, moteros,..y tías buenas, everywhere. Eso sí, tías indepes y que se follan al alpha a voluntad.
Porque veremos tetas, culos y coños en acción, pero acción que toman ellas. Se comerán coños, no pollas. Se pegarán hostias durante el sexo, pero de ellas a ellos. Serán, si nos fijamos, siempre ELLAS las que toman la iniciativa. Ellas, que son rebeldes (como la amish de toma pan y moja), la ex (que pelea y tal), la poli (tipa dura pero a la vez frágil), la viuda (enviuda y a follar). También veremos ataques directos al hombre malo: hombre que viola en solitario a la groupie, violación en grupo, violación del fulano de la cárcel, corte de miembro viril, muerte del violador, paliza al otro violador, etc, etc.
Joder, y todo esto en 5. Me ha resultado excesiva en todos los aspectos, pero vamos, por ver a la amish quitarse el minivestido se perdona el resto, incluso la camarilla Benetton que se monta el carapatata, que recibe más hostias que el ruso de rocky y al día siguiente tan campante.