mister4
Clásico
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Me prometí no volver a iniciar un nuevo hilo en este foro, pero al final he decidido hacer uno porque soy un débil con ganas de triunfar.
Además de que el caso está a huevo: un amigo mío es bastante triunfador. Liga rápido y en abundancia con jóvenes de buen ver, pero tiene un extraño fetiche. Y este es... las mujeres casadas (seguro que os habréis sorprendido, el título era bastante ambiguo). En su trabajo trabaja con gente de más edad, y las mujeres casadas se le entregan casi sin esfuerzo. Este atlético muchacho, en sus propias palabras, disfruta muchísimo del morbo de poner cuernos, es algo casi enfermizo.
Pero su imprudencia le llevó hace poco a una situación poco agradable, consecuencia de meterla en vagina ajena. Una señora, de la que disfrutaba sus placeres carnales, quiso abandonar a su marido y sentar una nueva vida con un chico diez años menor que ella. Una especie de crisis de los cuarenta femenina. Ya os imaginaréis que mi amigo estaba acojonado, y lo sigue estando of course, porque la pirada esa le amenazó con contarle todo su idilio a su hombre, y por lo visto ese caballero bien podía reaccionar cavando un par de agujeros en Monegros, si entendéis lo que os quiero decir.
Esta historia os la cuento para que opinéis sobre la suerte que puede correr mi pronto finado amigo y me contéis experiencias similares y su feliz desenlace.
También, para relacionarlo con el tema del ligue que tanto da de si y para que la gente levante el dedo del botón, os diré que las casadas deben ser presas fáciles de cojones. Cuando veáis cenas de empresas, fiestas de amigas o cualquier otra ocasión que tengáis para entablar relaciones con mujeres casadas, por lo visto vuestro éxito será espectacular. Yo no lo hago porque tengo valores, pero vosotros no creo que tengáis que preocuparos por eso.
Además de que el caso está a huevo: un amigo mío es bastante triunfador. Liga rápido y en abundancia con jóvenes de buen ver, pero tiene un extraño fetiche. Y este es... las mujeres casadas (seguro que os habréis sorprendido, el título era bastante ambiguo). En su trabajo trabaja con gente de más edad, y las mujeres casadas se le entregan casi sin esfuerzo. Este atlético muchacho, en sus propias palabras, disfruta muchísimo del morbo de poner cuernos, es algo casi enfermizo.
Pero su imprudencia le llevó hace poco a una situación poco agradable, consecuencia de meterla en vagina ajena. Una señora, de la que disfrutaba sus placeres carnales, quiso abandonar a su marido y sentar una nueva vida con un chico diez años menor que ella. Una especie de crisis de los cuarenta femenina. Ya os imaginaréis que mi amigo estaba acojonado, y lo sigue estando of course, porque la pirada esa le amenazó con contarle todo su idilio a su hombre, y por lo visto ese caballero bien podía reaccionar cavando un par de agujeros en Monegros, si entendéis lo que os quiero decir.
Esta historia os la cuento para que opinéis sobre la suerte que puede correr mi pronto finado amigo y me contéis experiencias similares y su feliz desenlace.
También, para relacionarlo con el tema del ligue que tanto da de si y para que la gente levante el dedo del botón, os diré que las casadas deben ser presas fáciles de cojones. Cuando veáis cenas de empresas, fiestas de amigas o cualquier otra ocasión que tengáis para entablar relaciones con mujeres casadas, por lo visto vuestro éxito será espectacular. Yo no lo hago porque tengo valores, pero vosotros no creo que tengáis que preocuparos por eso.