Capitán Hediondo
Posiblemente el PEOR Forero de la Historia
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- 22 Sep 2005
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Cuando yo era joven, y quizás algunos sevillanos sabrán de lo que hablo, iba regularmente por las tardes a los recreativos de la "Lola". Estaba el local cerca del barrio de la Macarena.
Tremendo. Era un local lleno de máquinas recreativas antiguas, que funcionaban con monedas de 5 pelas ( 5!!!!). Lo regentaba un marica hiperplumas que se dedicaba a pasear entre las máquinas mirando a los chavales y deleitándose con los olores varoniles que destilábamos en nuestra tierna juventud. Las máquinas era muy viejas... allí estaban el Moon Cresta, el Invaders, etc. Eran tan baratos los juegos, porque en la calle ya estaban juegos mucho más modernos, claro.
Lo más fuerte de todo, es que el pavo/trucha que atendía, Lola, iba siempre con la misma camiseta, los mismos vaqueros ultraapretados, y .... empalmado. En serio, el hijo de puta estaba siempre empalmado. Era la puta risión entre los colegas que entrábamos a echar 8 ó 10 partidas a las putas máquinas. El muy gein estaba siempre en celo, pero es natural, cuando era verano (yo sólo fui durante los veranos), todo el mundo entraba en pantalón corto, con camisetas chorras, etc... así que el cabrón estaba en el paraíso, claro, rodeado de tiernos efebos destilando hormonas masculinas por todos los poros de nuestra piel.
Un asco, aquello realmente olía a putos cerdos, pero el pervertido estaba tan salido, que lo encontraba excitante.
Ese es mi recuerdo más divertido de la época gloriosa de los recreativos. Después llegó el Mame, pero no me ha interesado lo más mínimo. Aquello tuvo su época y se acabó. Desenterrar a los muertos siempre trae malos olores y maldiciones indias.
He dicho, hijos de puta.
Tremendo. Era un local lleno de máquinas recreativas antiguas, que funcionaban con monedas de 5 pelas ( 5!!!!). Lo regentaba un marica hiperplumas que se dedicaba a pasear entre las máquinas mirando a los chavales y deleitándose con los olores varoniles que destilábamos en nuestra tierna juventud. Las máquinas era muy viejas... allí estaban el Moon Cresta, el Invaders, etc. Eran tan baratos los juegos, porque en la calle ya estaban juegos mucho más modernos, claro.
Lo más fuerte de todo, es que el pavo/trucha que atendía, Lola, iba siempre con la misma camiseta, los mismos vaqueros ultraapretados, y .... empalmado. En serio, el hijo de puta estaba siempre empalmado. Era la puta risión entre los colegas que entrábamos a echar 8 ó 10 partidas a las putas máquinas. El muy gein estaba siempre en celo, pero es natural, cuando era verano (yo sólo fui durante los veranos), todo el mundo entraba en pantalón corto, con camisetas chorras, etc... así que el cabrón estaba en el paraíso, claro, rodeado de tiernos efebos destilando hormonas masculinas por todos los poros de nuestra piel.
Un asco, aquello realmente olía a putos cerdos, pero el pervertido estaba tan salido, que lo encontraba excitante.
Ese es mi recuerdo más divertido de la época gloriosa de los recreativos. Después llegó el Mame, pero no me ha interesado lo más mínimo. Aquello tuvo su época y se acabó. Desenterrar a los muertos siempre trae malos olores y maldiciones indias.
He dicho, hijos de puta.