INDEPENDENCIA DE LA RED ELÉCTRICA: CONTINUACIÓN
Como he comentado en el primer post, la idea básica es independizarnos por completo de la red eléctrica, y la mejor y más satisfactoria forma de conseguirlo, es con una instalación solar / eólica profesional y sostenible en el tiempo, que se amortice en pocos años y nos dure toda la vida, permitiéndonos así disfrutar del mismo estilo de vida que tenemos en la actualidad, sin el inconveniente y la preocupación de todo aquel que tiene que pagar el recibo de la luz.
Para esto hace falta dinero, bastante dinero de hecho, calculando aproximadamente entre diez mil y veinte mil euros el sistema que nos permitirá generar electricidad de autoconsumo y no depender nunca más del suministro eléctrico externo.
Este es el objetivo, y si se tiene dinero suficiente, o una forma de financiación apropiada, yo me lanzaría directamente a este tipo de instalación. Y de hecho en el último post nos vamos a dedicar específicamente a esto.
Pero como ya he comentado, la mayoría de las personas del país o bien no puede permitirse de forma inmediata este gasto, o bien su situación es precaria, o bien otras circunstancias se lo impiden. Por ejemplo, en mi caso concreto, este piso en el que vivo, pese a estar íntegramente pagado, no será mi vivienda definitiva, así que no me compensa una inversión grande en una instalación de autoconsumo con paneles solares, por ejemplo.
Por multitud de razones, tenemos que resignarnos a usar otros medios más económicos y alternativos, como son los que he mencionado anteriormente, y que si bien no son los más cómodos ni usuales, sí que son plenamente efectivos y muy económicos.
Pero hasta en lo más simple, hay que saber hacer las cosas, pues en caso contrario nos encontraremos con un fracaso que dará al traste con el objetivo de darnos de baja de la compañía eléctrica.
En este post intentaré aportar lo que he experimentado personalmente, para que evitéis errores y os sea más sencillo conseguir el objetivo.
Lamparas de aceite:
Las lámparas de aceite se pueden comprar hechas o fabricárselas uno mismo, pero tanto en un caso como en otro, y pese a la multitud de vídeos y páginas que nos encontramos en internet, no es fácil fabricar una lámpara de aceite que funcione como es debido, y menos aún una que podamos tener en el interior de la vivienda sin que nos produzca humo o malos olores.
Como ya he comentado en este foro, soy prepper desde el año 2007, y desde ese año empecé a investigar cómo vivir sin electricidad de forma efectiva. Con lo que empecé a realizar experimentos con todo tipo de artilugios y combustibles, la mayoría de los cuales no acabaron demasiado bien.
Las lámparas de aceite que venden en las tiendas, así como las caseras que os podéis encontrar en páginas de internet, no funcionan demasiado bien, debido principalmente a que el conductor del combustible, es decir, la mecha, no tiene la suficiente capilaridad, ni es la adecuada para producir una luz abundante y libre de humos durante todo el tiempo que tengamos aceite en la lámpara.
La mayoría de las mechas se consumen rápido, o no conducen el aceite suficiente, y se acaban quemando o apagando con el aceite aun dentro de la lámpara.
Las tres alternativas viables que he encontrado son:
La lámpara estilo Lucerna romana, para exteriores o sitios techados con una constante renovación de aire, y mecha de algodón.
La vela de aceite múltiple, o “de mariposa”, para el interior.
La lámpara de aceite con sistema de presión por gravedad y mecha de papel.
La lámpara de aceite romana, perfeccionada por los árabes en Al Andalus, concretamente en Córdoba, la primera ciudad del mundo que iluminó sus calles por la noche, usando este tipo de lámparas. Es un sistema de iluminación sencillo y eficiente que produce luz suficiente para iluminar una estancia. Con dos de ellas, se consigue una iluminación superior a la de una bombilla Led de bajo consumo.
El problema es que estas lámparas necesitan una renovación de la mecha casi diaria, a la par que producen una cierta cantidad de humo, que pese a ser inapreciable, no las hace ideales para el interior de la vivienda.
Aun así, se pueden usar si ponemos un tope en la parte superior de la llama, pero por lo general yo las suelo usar en sitios como la cochera, el lavadero y similares.
Existen imitaciones muy económicas, a las que sólo debemos añadir el aceite y la mecha de algodón, que sustituiremos cada cierto tiempo.
El soporte de pared debe estar lo suficientemente bajo como para permitirnos alcanzar la lámpara, así como para evitar que el techo sufra algún desperfecto. Lo ideal es a 1,85 m. de altura.
Igualmente, el soporte de la lámpara debe estar retirado de la pared unos 30 cm. Y es ideal si se coloca un espejo o metal reflectante para maximizar la cantidad de luz producida.
También podemos fabricarlas nosotros de forma casera. El funcionamiento es el mismo que el de este vídeo:
Más fácil aun es usar un plato de café lleno hasta la mitad de aceite y con dos mechas de algodón una a cada extremo, que sobresalga un poco por los extremos del plato.
Las velas de aceite, comúnmente llamadas “mariposas”, son aquellas que usan parafina o aceite en forma líquida, en lugar de cera o parafina sólida. No deja de ser una vela, y es sumamente sencillo fabricarla.
Si usamos una media de cuatro o cinco “mariposas” por cada recipiente que nos haga de lámpara, y tenemos dos o tres de estas en cada habitación, podemos garantizar una perfecta iluminación de toda la vivienda, suficiente para movernos por ella y realizar casi cualquier actividad sin problemas.
Es lo que yo recomendaría para empezar: fabricar de forma casera una lámpara de este tipo y probarla. Instalar dos o tres soportes para pared en cada habitación (o mesitas o muebles que sirvan para tal fin), y comprobar su efectividad.
La lámpara de aceite con presión y mecha de papel utiliza el principio de las lucernas romanas, pero el depósito de aceite está encima de la mecha, no debajo, y la gravedad hace que el aceite empape la mecha por presión más que por capilaridad, evitando así que esta se queme.
Este tipo de lámparas no las vais a encontrar hechas, pero son muy sencillas de construir.
La mecha (de papel poroso de cocina) es la ideal para que el aceite fluya de forma rápida y no disminuya su luminosidad o acabe quemándose la mecha teniendo aun aceite en el depósito.
Aquí un vídeo demostrativo:
Lámpara de aceite sin humo y sin olores - YouTube
El recipiente que veis debajo es para recoger posibles y esporádicos goteos, que luego se puede volver a echar dentro del recipiente principal.
El tipo de aceite:
Aunque he hablado del aceite reciclado como combustible ideal para este tipo de lámparas, pero es necesario filtrarlo y prepararlo para que queme de forma adecuada, por lo que no lo recomendaría para un iniciado.
En su lugar, podéis adquirir a bajo precio aceite de semillas o especial para quemar en este tipo de lámparas. Un litro os dará tranquilamente para un mes de luz en vuestra vivienda, y os saldrá por menos de dos euros.
Yo aun estoy haciendo pruebas, y normalmente no enciendo todas las lámparas cuando empieza a anocheces, sino que lo hago con la del pasillo, las de la habitación en la que estoy, y una en el cuarto de baño. Sólo las enciendo todas en caso de visitas.
Para moverme a de una habitación a otra, en la habitación tengo un candil de queroseno, que es el que uso en lugar de ir encendiendo y apagando lámparas. Me desplazo con él hasta la cocina, por ejemplo, y allí enciendo las lámparas del salón, para apagarlas cuando vuelvo a la habitación.
El sistema es medieval, lo admito, pero en absoluto es ineficaz, y de hecho a mí me gusta bastante por la ambientación que crea. Se ve perfectamente y en comparación la luz eléctrica parece fría e impersonal. Entiendo muchos jamás contemplarán el usar voluntariamente este tipo de sistema de iluminación, en su derecho están.
No he encontrado ninguna foto de habitación iluminada con este tipo de lámparas, y una foto que he hecho de la habitación ha salido casi negra, y con flash no se aprecia debidamente.
Aun así, para que os hagáis una idea, mi habitación, iluminada como está ahora con las tres lámparas de aceite, está más o menos así:
LAVADORA
Este es uno de los factores que más me preocupaba a la hora de prescindir de la compañía eléctrica, no teniendo aun la instalación definitiva que pretendo.
Para mí, y supongo que para el resto de la humanidad también, es comodísimo poner la lavadora y cuando termina el ciclo de lavado tenderla y olvidarme del asunto. Lavar a mano era algo que no había hecho más que en un par de ocasiones y mi inexperiencia hizo de eso algo casi traumático.
Igualmente, desconocía de la existencia de lavadoras de tracción mecánica como sustituto de la lavadora eléctrica convencional.
GINA DORA: Así se llama la lavadora manual, no digan que el nombre no es atractivo.
Es lo que su nombre indica: una lavadora y una secadora manual. Tiene forma de barril, la parte superior es un asiento
Y una vez sentados encima, con el pie presionamos y hacemos girar el mecanismo que lava la ropa y también la seca.
Según comprobaciones, lava la ropa tan bien como cualquier lavadora convencional. De hecho si vemos el funcionamiento de la lavadora eléctrica, el giro del tambor no es constante ni contínuo, y de igual forma lo podemos hacer con la “Ginadora”, de tal forma que es bien difícil cansarse.
Un lavado de “ciclo largo” equivale a un capítulo de una serie, o incluso lo podemos hacer mientras foreamos. Mi reto es lavar la ropa mientras me hago una paja. Todo se andará.
Aun no poseo una, estoy en trámites a ver si la pillo a un precio razonable.
Lavar la ropa a mano:
Ni es tan complicado ni requiere tanto esfuerzo (para un hombre) como parece. Sólo hace falta una tabla de lavado, un detergente para lavar a mano, y un quitamanchas que puede ser en polvo o mejor aún, líquido. De hecho el mismo que uso para lavar en frío con la lavadora me sirve para lavar a mano, lo único que cambia es el tipo de detergente.
Con el quitamanchas y el detergente, las manchas salen rápido en cuanto se frota un poco la ropa. Para saber cómo lavar a mano hay docenas de vídeos en youtube, pero vamos, no hace falta ser un genio: poner la ropa en remojo con el detergente en la pila de lavado, en un barreño grande o en la bañera, coger prenda por prenda e ir echándole el quitamanchas líquido en las zonas más sucias o que requieran más dedicación, frotar la ropa en la tabla (no hace falta dejarse los brazos en ello ni hacer una fuerza desmedida), poner la ropa de nuevo en el barreño.
Una vez terminados, vaciamos el agua con detergente y con la ducha aclaramos la ropa, la removemos para que suelte los restos de detergente, volvemos a aclarar, y prenda por prenda se retuerce para sacar el agua. Se tiende y listo.
Tampoco es necesario lavar mucha ropa de una tacada. Eso se hace cuando se pone una lavadora. En media hora se puede lavar la ropa que hemos usado toda la semana, si no sois de cambiaros de ropa tres veces al día. Por supuesto siempre que lavéis vuestra propia ropa y la de nadie más.
Con la Ginadora (me encanta el nombre
) se hace del todo innecesario lavar la ropa a mano, pero nunca está de más saber hacerlo, o para emergencias.
Noticia sobre la Ginadora:
La lavadora manual que cambiará la vida a millones de personas | Biz-Tec
Calefacción:
Cada uno contemplará la mejor forma de calentarse en su casa, no se puede ser axiomático con el asunto, porque formas de calentarse hay.
Lo ideal es tener una casa bien aislada. Si habéis tenido oportunidad de visitar casas en Alemania (o cualquier otro país con un invierno poco amistoso), os asombraréis de lo muy adelantados que están a este respecto: desde las espumas y aislamientos incorporados en el edificio, a las ventanas de triple cristal relleno con aerogel, pasando por el uso de materiales aislantes en suelo y pareces como la madera. Un lujo. Si todas las casas en España estuviesen así de preparadas, apenas necesitaríamos calefacción.
Pero como eso cuesta pasta y no es plan de meterse en obras, si vamos a prescindir de calefacción eléctrica, lo suyo es usar o una chimenea / estufa de leña, o más limpio y práctico, calefacción mediante gas.
El gas natural es la opción que muchos hogares tienen incorporado, pero para aquellos que carezcan de él o no lo terminen de ver, mi recomendación siempre será una estufa catalítica que funcione con gas butano.
Una bombona me dura de dos a tres meses. Supongo que por el norte durará mes y medio, pero aun así creedme que compensa sobradamente. Su facilidad para moverse de una habitación a otra y que empiece a calentar instantáneamente también la hace a mis ojos más factible que una chimenea. Y siempre será más cómodo y hasta más barato agenciarse una bombona de butano que su equivalente en leña, especialmente para el que vive en una zona urbana, porque aunque la leña la podáis recoger gratis, hay que gastar gasolina o gas oil para ir a por ella, y llegados a este punto sigue saliendo más barato el butano, que además os lo pueden traer a casa, o que podéis adquirir en muchas estaciones de servicio (al menos en mi localidad).
El que nunca se haya calentado con una estufa catalítica será reacio, pero esto es como todo, acostumbrarse. Igual que veis a un amigo con melena rapado al cero y no os gusta de entrada, al año lo veis de nuevo con pelo y os gustaba más rapado.
El que tenga chimenea, pues estupendo, yo he vivido en casa paterna siempre con chimena o con estufa de leña. Aunque la he limpiado y retirado la ceniza tantas veces, por no hablar de ir a por la leña al almacén, encenderla y demás, que en comparación la estufa catalítica me parece más práctica. En un piso creo que está fuera de toda discusión qué es lo que más conviene.
COCINAR
Me encantaría hacerme con una cocina de leña como la que menciona ILG, no lo voy a discutir, pero vivo en un piso y no me resulta práctico. Por no hablar que para cocinar para uno, me basta y me sobra con la pequeña bombona de butano y uno de los fuegos.
Cuando cocino algo más elaborado que requiere dos fuegos simultáneos, uso el pequeño campin gas y listo. Ese pequeño camping gas es el que uso también para preparar el café de forma artesanal (que sale de muerte y sólo se necesita un cazo y un colador con filtro), los vasos de sopa que me meto entre pecho y espalda cada noche, o la lata o fideos chinos que me hago cuando no tengo tiempo o ganas de preparar algo más elaborado.
En mi caso de niño teníamos eso mismo, gas butano, y cuando vino la moda de las vitrocerámicas todo el mundo, efectivamente, hizo el cambio.
En aquel momento merecía la pena, no lo discuto, porque el recibo de la luz no asustaba a nadie, pero hoy por hoy, ha resurgido el gas butano, y hasta encontraréis por ahí híbridos de vitrocerámica y gas butano. En muchos comercios las podéis encontrar y además que no os engañen, que son, o deberían ser, más baratas que las vitrocerámicas.
De hecho hoy por hoy es raro quedarse sin suministro eléctrico más de unos minutos, pero de niño recuerdo apagones que duraban todo el día, y al menos la comida caliente gracias a la cocina de gas, no faltaba.
Tengo una vitrocerámica y un horno eléctrico en mi piso porque no me costó un céntimo. Mi hermana quiso, en la época del boom económico, renovar la cocina, y yo me quedé tanto con sus muebles como con sus electrodomésticos. Pero si de mi hubiese dependido, habría instalado fogones de gas butano para cocinar, al igual que instalé sin dudarlo un momento, gas butano para calentar el agua.
Con el tiempo venderé la vitrocerámica y el horno y me haré con un buen equipo de cocina butano, eso lo tengo por seguro. Por ahora con los fuegos independientes para conectarlos a las bombonas voy sobrado.
Pero no acaba ahí la cosa, también mencioné y tengo dos gasificadores que funcionan con madera.
Uno me lo hizo un herrero que conozco, y que me costó dieciocho euros. El otro me lo fabriqué yo mismo con latas, tal cual.
Funcionan con ramitas pequeñas de madera, de diez o doce centímetros de largo. Con seis o siete ramitas de esas se puede cocinar durante casi media hora.
El gasificador, al contrario que la estufa de leña, aprovecha mucho más la madera y también da mucho más calor.
De hecho, colocando en la mesa del salón una bandeja metálica grande, y el gasificador pequeño encima, puedo cocinar y a la par calentar el salón (sólo hay que ir echándole una o dos ramitas cada diez minutos) y la comida sale de muerte, con mucho más sabor.
Reconozco que lo uso menos que el camping gas, porque requiere más tiempo para encenderlo y luego hay que limpiarlo, pero es extremadamente útil y cuando salgo a hacer senderismo me lo llevo siempre para cocinar.
Ya puse este vídeo en el hilo de los preppers sobre su funcionamiento:
Del frigorífico ya he hablado y no creo que haya nada más que comentar: carnes y pescados, cómprenlos el día que vayan a comerlo. Además, si no pueden prescindir de él, siempre se puede hacer una pequeña instalación con placas fotovoltaicas exclusivamente para el frigorífico. No debería costarles más de trescientos o cuatrocientos euros.
También existen frigoríficos que funcionan con gas butano que consumen unos cincuenta céntimos al día al precio actual de la bombona. No es que salga más caro que una nevera eléctrica, pero para eso yo preferiría usar el mencionado sistema fotovoltaico.
Ordenador, Router, recarga de móviles, etc.
Aquí está la madre del cordero.
Yo sin esto no puedo pasar, y hasta hace poco ha sido el principal motivo por el cual he seguido abonado a la red eléctrica.
Verán, siempre contemplamos el tema de las renovables para el domicilio al completo, pero es muy factible y mucho más barato establecer ese sistema solamente para un electrodoméstico, especialmente si consume tan poca energía como un ordenador portátil, un móvil, y similar.
Hasta ahora he estado usando una única placa que no era de la mejor calidad, y que no me recargaba convenientemente las dos baterías que tenía para tal fin. La idea era tirar de la placa durante el día, y por la noche gastar las baterías, pero como digo no daba el resultado esperado.
Al final acabé usándolas para recargar el móvil, la tablet, el ebook reader, y al final me hice con un cable para alimentar el router y lo mantenía sin problemas.
Aun estoy en negociaciones, pero en las dos últimas semanas una empresa de un pueblo cercano me va a instalar, por un precio que llegará a los quinientos euros, dos placas de alto rendimiento, que instalaré a cada lado de la ventana de la habitación, y cuatro baterías más potentes.
El portátil, los discos duros, el móvil y el router irán conectados directamente a las baterías, no con sus enchufes normales (que incorporan un transformador y que se enchufan a la corriente de 230 v.) sino con cables que van directos la regleta, que a su vez va conectada a las baterías.
Las placas producen 18 v. que recargarán las baterías, que son de 12 v. y la salida de la regleta es de 19 v.
Durante las horas de sol la regleta da electricidad tomada directamente de las placas solares, a la par que recarga las baterías.
Cuando las placas no dan suficiente rendimiento, se tira de dichas baterías, que en teoría pueden hacer funcionar el portátil durante 24 horas ininterrumpidas.
El día de mañana, dentro de dos o tres años, y dependiendo de cómo evolucione todo el tema de las fotovoltaicas en este país, tengo plena intención de hacer una instalación para toda la vivienda, con fotovoltaicas y un molino de viento de tamaño pequeño como suplemento para las horas nocturnas. Ya lo he comentado con el vecino y en teoría no debería haber problemas, siempre que el día de mañana, cuando él decida instalar a su vez sus propias placas, yo no me oponga.
Ahora mismo estoy en pleno proceso, y estoy seguro que, como todo, tendrá sus problemas y periodos de adaptación, pero incluso ahora, la habitación desde la que estoy escribiendo está perfectamente iluminada con tres lámparas de aceite, y la estufa catalítica la mantiene calentita, y eso que sólo llevo puesto una bata.
DARSE DE BAJA DE LA COMPAÑÍA ELÉCTRICA
Ya hace meses que hablé en las oficinas de mi localidad, y para darse de baja no hay ningún problema. De hecho no les queda más remedio, puesto que con negarse a pagar el recibo de la luz, ya le cortan a uno el suministro rápido.
El contador quedará donde está, no lo retiran, aunque el técnico tiene que desconectarlo de la red y comprobar que no haya irregularidades como enganches piratas y demás. No hay coste por tenerlo ahí puesto. Y he hablado con un abogado y me asegura que si en algún momento pretenden cobrarme o que me abone a la fuerza de nuevo al suministro eléctrico, tengo pleno derecho a hacer que retiren ese contador.
Darse de nuevo de alta, en mi pueblo, cuesta unos ochenta euros, y a partir de ahí viene el técnico, hace de nuevo el enganche según la potencia contratada, y a pagar recibos.
Hoy por hoy, y por mucho que presionen las eléctricas, no pueden obligar a una persona a estar abonado a la red eléctrica. Es algo bastante obvio, que aunque ya sabemos que aquí lo obvio no cuenta y que tenemos que poner el culo ante todas las injusticias y opresiones que a los de arriba se le ocurran, en este caso, por pura lógica, es bastante complicado obligar a alguien estar abonado y consumir electricidad.
Lo de la legalidad de las placas solares, pues ya veremos qué ocurre. Les aseguro que, pase lo que pase, y pongan las leyes que pongan, no me preocupa en absoluto.
Hasta que las eléctricas comprendan que la vivienda auto sostenible energéticamente es una realidad, habrá tensión, habrá corrupción, habrá muchas cosas jodidas, pero en este caso al menos, hay demasiada gente, demasiadas empresas y demasiadas organizaciones involucradas para que las eléctricas y nuestro corrupto gobierno se salgan con la suya.
AUTOSUFICIENCIA ENERGÉTICA CON ENERGÍA SOLAR
Vamos a terminar el post con algunas indicaciones sobre los pasos a dar para una instalación de placas solares que permitan la completa autosuficiencia energética.
Hay que tener en cuenta que todo lo anteriormente explicado no tiene por qué caer en saco roto para cuando llegue el momento de hacer este tipo de instalación.
Cuanto menos electrodomésticos y gasto eléctrico tengamos, más sencilla y barata será la instalación que necesitemos.
Evidentemente, para este tipo de instalación, qué menos que poder usar nuestro frigorífico, lavadora, vitrocerámica, ordenador, etc. Pero si podemos prescindir de la calefacción eléctrica, incluso de la vitrocerámica (y limitarnos al uso del microondas y la panificadora, por ejemplo), pues tanto más fácil lo tendremos para tener un autoconsumo más llevadero y menos problemático.
LO PRINCIPAL: FORMARSE
Ser autosuficiente mediante una instalación fotovoltaica no consiste en contratar una empresa para hacer la instalación, desconectarnos de la compañía eléctrica y seguir como si nada.
El sistema eléctrico ahora es nuestra responsabilidad, y debemos saber cómo funciona, qué inconvenientes puede tener, qué problemas puede dar, cómo solucionarlos, y sobre todo, saber adaptarnos a él.
Igualmente, no vale cualquier kit “hágalo usted mismo” o una empresa de tres al cuarto para hacer este tipo de instalación.
Si estamos lo suficientemente formados y somos unos manitas, sí que podemos hacerlo nosotros mismos, pero no por eso tiene que salirnos más barato, ya que según estoy viendo, una empresa seria que realice este tipo de instalaciones, puede vendernos las placas solares a un precio inferior al que nos costaría a nosotros comprarlas o incluso fabricarlas con células fotovoltaicas compradas para montaje.
Es necesario, como digo, que la empresa sea buena y tengan conocimiento de lo que están haciendo. No todos los instaladores saben maximizar la eficiencia ni conseguir un rendimiento apropiado de las baterías.
Esto hace que muchos tengan que cambiar las baterías cada año, por ejemplo, o que en unas zonas de la casa existan fallos de suministro eléctrico cuando enchufamos algo de más.
Lo primero es hacerse con buenos manuales sobre energía solar, cuanto más recientes mejor. Así que no pondré enlace, ya que día a día sale material nuevo y puede que lo que vaya a poner no sea dentro de dos meses lo mejor que podáis conseguir en la red. Para buscar material está google.
No confiéis mucho en los vídeos de youtube. La mayoría de lo que muestran esos vídeos es un fraude que no funciona, o es ineficiente.
Mi recomendación por tanto es que os forméis en primer lugar, que cuando llegue el momento, contratéis una buena empresa, y que vosotros mismos os daréis cuenta de si son profesionales o no.
Imprescindible que hagan un estudio de vuestra vivienda (que la visiten, vamos), que hagan mediciones de los electrodomésticos, de la instalación del cableado, etc.
Y para finalizar, es más que probable que os resulte más conveniente vender los electrodomésticos de alto consumo energético y los sustituyáis por otros de bajo consumo, ya que os saldrá mucho más barato que instalar más placas y baterías para suministrar electricidad a electrodomésticos que consumen mucho.
Pongo un par de vídeos orientativos para que os hagáis una idea de lo que supone hacer una instalación de este tipo. No es ninguna tontería, requiere un esfuerzo, y desde luego no es barata.
Eso si, la satisfacción de ser autosuficiente energéticamente, no tiene precio.
Con esto doy por finalizado el tema de la electricidad. En un último post, que seguramente duplicaré en otros hilos como el del afeitado clásico, pondré un enlace a Mega de todos los manuales de los hilos que he creado en los últimos seis meses, y con eso ya doy por cumplido el objetivo que tenía previsto con estos hilos.
Tengo que agradecer la paciencia y tolerancia de la mayoría de foreros, y en general debo decir que ha sido un placer pasar estos meses en vuestra compañía, muy especialmente durante estas navidades, que no me han resultado muy fáciles de llevar.
Un Saludo a todos.
Muerto por dentro
Freak
Baneado
Clásico
Forero del todo a cien
121:121
Freak total
Muerto por dentro+
