La insostenibilidad de los precios de las putas es por varios factores, y aviso, va a ir a peor, mucho peor.
Da la sensación de que muchos tíos prefieren pegarse un homenaje, pagando más, con una puta, antes que ligar por apps o en la calle, porque las tías, la gran mayoría, se han puesto imposibles con mil y una exigencias y por la cantidad de babosos que les entran y no las dejan en paz. Cada vez veo a tías muy normalitas creyéndose putas diosas, pero la culpa en parte es por los arrastrados que hay, que las elevan a las nubes y si hace falta, les pagan las fantas, les proponen planes de la hostia y todo lo que se tercie. Así se crean princesitas caprichosas.
Por eso, cada vez, se va más de putas, en parte para no aguantar a damiselas con ínfulas de creerse que son especiales y todas sus mierdas y movidas mentales, que claro, eso lo hacen con tíos normalitos, pues con guaperas enseguida se abren de piernas. El problema es que cada vez las tías son más insoportables, y a la larga es mejor ir de putas, lo que pasa es que éstas últimas se han olido la tostada, y como también tienen a pagafantas que les huelen el culo, aprovechan para subir precios y cobrar extras de mierda, porque saben que van a ver tíos que lo paguen, ya que éstos prefieren eso a aguantar a una civil gilipollas. Por eso no es de extrañar que se paguen 200 euros la hora a las tres o cuatro que medio están bien y harán un servicio decente. Es una puta mierda, pero es lo que hay.