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El blanco y el negro no están considerados como colores, a mi el azul eléctricoEl mío antes era el azul. Luego cambié al gris, pero entonces una enteradilla me dijo que el gris no es un color (no estoy muy seguro aún de eso) y ahora no sé.
Y el vuestro?
Verde es la esperanza.
Azul la alegría.
Gaviotas al alba.
De la vida mía.
Y roja es la sangre.
Que derramó el pueblo.
Con la que el corrupto.
Se ha teñido el cuerpo.
Naranja al olvido
Por su indecisión.
Pudieron hacerlo.
Huevos les faltó.
Violeta de engaños.
Y de usurpación.
Corruptos malversos.
Son la perdición.
El verde regresa.
Con fuerza y valor.
Ahora esperanza.
Futuro de acción.
Confiad con certeza.
En este color.
Porque con justicia.
Volverá el honor.
Eso te lo explicó el ruso, no? Azul claro y maricón se dicen igual, a que sí. galuboi.
Nunca lo había visto desde ese punto de vista, pero desde luego lo has clavadoJoder con los rusos. No se cortan con las campañas anti droga. Ahí está una moza de 20 años que parece una vieja con el mono y de fiesta con el Krokodil. Que brutos son.
Para vestir el gris la verdad, como el forero. Me encantan mis cosillas grises, me las pongo como segunda piel, los vaqueritos, el jersey gris claro pela, el gris marengo, la camisita gris con puntos. Me reconfortan, me sienro elegante, camuflada, bien.
No es triste, es sobrio, discreto, elegante...Joder, el gris. Creo que no tengo nada gris, plateado tal vez. Que color más triste.
Rojo con subtono azulado, siempre, para todo.
Personalidad no sé, pero lo que me hace gracia es el paradigma cuantitativo que organiza este o cualquier otro asunto en una escala cuantificable. Aquella modernidad que ha sustituido toda cualidad por por cantidad, eso sí que es subnormal, y es la infraestructura de los tristes tiempos que nos han tocado vivir.Gente que cree que los colores tienen personalidad.
Te ha faltado recomendarle algun libro. Ni un post sin recomendación !Personalidad no sé, pero lo que me hace gracia es el paradigma cuantitativo que organiza este o cualquier otro asunto en una escala cuantificable. Aquella modernidad que ha sustituido toda cualidad por por cantidad, eso sí que es subnormal, y es la infraestructura de los tristes tiempos que nos han tocado vivir.
En fin, que no lo quiero llevar a mi rollo, pero los colores se acercan más a lo que entiendes por personalidad que a una posición dentro de unas coordenadas numeradas que te da el photoshop y así parece que hemos objetivado y así marcado aún más la absurda separación entre sujeto y objeto que nos disocia tanto de la vida.
Os puto reviento, putos hijos de la grandísima puta.
De toda la vida el arma de distracción para las mujeres en los examenes ha sido un generoso escote. Si tú careces de él, te hubiera valido una minifalda.No es triste, es sobrio, discreto, elegante...
El que no me gusta para vestir es el beige, me queda como un tiro, me hace cara de acelga. Era el color que utilizaba en los exámenes en la universidad para mimetizarme con las mesas y pasar desapercibida por si quería sacar chuletas.
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