OrgasmSEEKER rebuznó:
Lo que es verdad, es que nadie -hombres o mujeres- se siente atraido por alguien que no se quiere a si mismo. Y si uno se quiere o no, se acaba transmitiendo...Uno piensa:"Si tu que eres quien te conoces más, me demuestras que no te quieres, tragandote mis aros, ya me has ahorrado tiempo de estudio de tu personalidad: no vales la pena".
Y ahí está la paradoja del "amol" y la atracción: Cuando menos lo necesitas, más lo tienes, y a la inversa. Eso hace que oferta amorosa y demanda amorosa lleguen a acuerdos en muy puntuales ocasiones. No se si es más triste querer y no ser correspondido, u observar la mirada enamorada de una tía y sentir indiferencia ante ese mundo emocional que te pone en bandeja. Como dice Sabina:Un juego en el que un par de ciegos juegan a hacerse daño.
Por una parte eso es cierto, pero creo que el libro tira por otra vertiente.
Simplemente han trasladado pautas del pensamiento y comportamiento femenino al masculino, en un intento de equiparar ambos modelos, cagandola obviamente.
Como ya han dicho, un hombre en ese sentido es muy diferente a una mujer, dale a un hombre una mujer que le guste fisicamente, equilibrada y con unas afinidades minimas, y será el hombre mas feliz del mundo para el resto de su vida. Los hombres se pueden enchochar de un fisico, pero no de una actitud cabrona o dificil, cosa que puede pasar con una mujer.
Es mas, diria que la mayoria de los hombres, una vez que les ha apaleado un par de veces, aprenden rápidamente la lección y pocas veces buscan una mujer fatal(el equivalente al macho alfa cabrón)
En cambio dale a una mujer lo mismo un hombre fisicamente atrayente, bueno(pero sin ser gilipollas) y con afinidad... lo que pase en el futuro dependerá de la estabilidad emocional y mental de la mujer( o lo que es lo mismo, tendrás mas garantias llevando un bote de nitroglicerina en una montaña rusa)
Una mujer puede tener una convivencia feliz con un ejemplar y bello marido y al dia siguiente saltarle un relé y enamorarse perdidamente de un hijo puta drogadicto que no tiene donde caerse muerto. Una mujer puede pasarse hasta los 40 años enamorandose de balas perdidas, sin racionalizar que ese tipo de hombres no le convienen y asi un largo etc.