Art Vandelay
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Yo iría más lejos; está íntimamente relacionado con el espíritu del tiempo.está el habito de consumo musical relacionado con otros habitos diarios?
El que escuchaba música en los 60, al haber pocos discos (materialmente hablando) rulando , y ser difíciles de conseguir, la música se escuchaba "en grupo", todos en torno al tocadiscos en silencio y fumando petardos como si de una ceremonia se tratase.
He oído historias de gente escuchándose de golpe y tirón y en silencio un disco entero de Pink Floid con el más absoluto deleite y atención, "descubriendo" como si de una revelación se tratara, esa música.
Y luego, en los 2000, el caso de un letón que se me refirió a este mismo grupo, al verlo en la portada de una revista, como "ese grupo, es imposible de escuchar, no sé de qué va, hemos intentado ponerlo varias veces y lo hemos tenido que quitar, no tiene sentido".
Es decir, 40 años después NO HAY paciencia para la experiencia musical como tal.
Y hoy en día es un fenómeno clamoroso a todos los niveles:
Naide, pero naide, se escucha un disco entero de pé a pá. Entonces Spotify.
Las series sustituyen a las películas.
Twitter a los phoros.
Hasta el ponno va directo al aquí te pillo.
El selebro no quiere esforzarse, cada vez es más adicto a la recompensa inmediata y cada vez más frecuente. La atención se va a tomar pol culo, cada vez el procesador es peor.
Y todo esto explica un poco la relación entre los hábitos de bida y el consumo de música tanto como el ser asmático e inventar un tipo nuevo de jazz o el que te falte un deo y dar lugar a un tipo de rasgueo flamenco que 10 o 20 años más tarde imitarán todos los guitarristas molones.
No sé si era eso por lo que preguntabas, pero ahí va el tocho.