¿Cuánto se gasta en la preparación?
No sabría decírtelo, no porque no quiera sino porque depende mucho de cómo computes esos gastos. La diferencia es astronómica ya simplemente considerando la comida, pero entiendo que comer tendría que comer igual aunque no me preparara, así que no la incluyo como gasto per se, aunque sea una dieta más cara que la que llevaría en otras circunstancias. Si te refieres a los costes asociados directamente con la competición en sí, entre tinte, viajes, alojamientos, bañador y demás, puede rondar alrededor de los 500 euros, pero eso también depende, porque si consigo rascar algo eso me abrirá las puertas a competir más veces. Si te refieres a la química exclusivamente de competición, que entiendo que me preguntas por eso, sumando la terapia y el post alrededor de 1000 euros. Otros 600 en la hormona de crecimiento. Todo eso lo tenía ya pagado para la preparación que tuve que interrumpir en 2020 (afortunadamente no llegué a empezar), y a eso le he añadido este año otro kit de hormona, otros 300.
¿Por qué MK-677 y no HGH?
¿No le da pereza tener que inyectarse todos los días? ¿No le parece una cárcel mental?
¿Son Adria Albiol y Miguel Iniesta naturales?
¿Nick Walker/Ángel Calderón top 3 open/212 Mr. Olympia?
¿Has hecho caca hoy más de tres veces?
Gracias.
Sí que estoy usando HGH, de hecho es la primera vez que la uso durante un tiempo más o menos sostenido, y la verdad es que otro uso no le veo. Pero es un tema complicado, simplemente el hecho de no tener accesibilidad a hormona legítima hace que muchos se lo piensen. El MK-677 lo usé simplemente para comprobar si me ayudaba a incrementar el apetito, algo que siempre ha sido mi punto flaco en los volúmenes. Alrededor de la 5-6 semana me saturo y tengo muchos problemas digestivos, de hecho he tenido úlceras estomacales y no se lo deseo a nadie. No estaba interesado para nada en los supuestos beneficios que tiene en el incremento de la secreción de somatropina endógena, algo que aún siendo cierto creo que distaría mucho de ser una elevación suficientemente significativa como para marcar alguna diferencia real.
¿No le da pereza tener que inyectarse todos los días? ¿No le parece una cárcel mental?
Ni mucho menos me inyecto todos los días, aunque sí es cierto que ahora es mucho más frecuente que en volumen, cuando generalmente inyectas una o dos veces por semana, porque se usan preparados de acción más rápida. Básicamente porque los efectos a corto plazo son más fáciles de controlar y es más sencillo rectificar algo de ser necesario. De todos modos son sustancias con concentraciones tan bajas que usan disolventes poco potentes y no son incómodas de aplicar, en volumen se usan sustancias con ésteres generalmente más largos y suele costar más que pasen, es más engorroso. De todos modos la pregunta interesante hubiera sido si uso algo que me de pereza de usar, y la respuesta es SÍ, estanozolol, que por su naturaleza de sustancia en suspensión es dolorosa de inyectar. Pero eso es una constante, mi preparador suele mandar incluso en volumen aunque sea en dosis bajas, por algún motivo que desconozco en su país de origen sienten una verdadera fascinación por esa sustancia. Al final te acostumbras.
Pero si me permites reconducir la pregunta sobre la cárcel mental, no ya en lo relativo a inyectar sino a la preparación en sí, voy a responder algo que creo que es necesario aclarar y de lo que además no creo que haya que esconderse. En 2020 me diagnosticaron una depresión después de un período de apatía y malestar generalizados, al principio lo achacaba a algo pasajero que terminaría una vez mejorara el tema pandémico, pero fui yendo a peor hasta el punto en el que tuve varios ataques de ansiedad estando en el gimnasio. De los de tener que esconderse, más adelante llegando al punto de quedarme fuera durante una hora pensando que algo malo iba a suceder si entraba. Al final llegó un día en el que dejé de ir, no es que no tuviera ganas de ir a entrenar o que me diera pereza como nos puede dar a todos, de hecho estando en casa tenía ganas, pero conforme iba llegando me empezaba a dar verdadero pánico el hecho de tener que entrar y cumplir con la serie de requisitos necesarios para progresar, aunque físicamente fuera capaz de ellas. Eso fue lo que me acojonó de verdad, darme cuenta de que empezaba a ver el deporte como un lastre, algo que aborrecer, en lugar del espacio propio que sentía mío. No sé si lo he contado alguna vez, pero de pequeño competía a nivel nacional en natación y la acabé odiando, aún a día de hoy cuando me lanzo a la piscina no puedo evitar acordarme con amargura. Me daba terror que llegara a pasarme lo mismo con esto. No sé si decir afortunadamente, pero por experiencias personales que viví de cerca pude reconocer los síntomas a tiempo y pedí una ayuda que debo decir que no me faltó, tanto por parte de mi familia como de mi pareja. Empecé un tratamiento pronto, en ese punto mi prioridad era única y exclusivamente recuperarme y no me podía dar más igual el deporte. Por suerte respondí muy bien, con el tiempo pude ir volviendo al gimnasio a hacer sesiones de toma de contacto, muy alejadas del rendimiento, en las que fui recuperando el gusto por entrenar. Viendo mi buena respuesta mi terapeuta me planteó la posibilidad de volver a competir como aliciente para recuperar mi rutina lo antes posible. El símil que hizo fue una cuerda a la que agarrarse para salir del pozo, pero a mí me daba miedo que el estrés de la competición no se convirtiera en una mochila que acabara hundiéndome más. Después de mucho meditarlo y seguir progresando en la terapia y con el apoyo de mi preparador decidimos que sí, y aquí estamos.
TLDR; lo que para mí fue una verdadera cárcel fue encontrarme atrapado en una realidad en la que no era capaz de disfrutar de nada, ni siquiera de las cosas que me habían hecho feliz toda la vida. La oportunidad de tener salud mental, y poder competir a buen nivel, teniendo en cuenta cómo estaba justo hace un año, más que una cárcel me parece liberadora.
¿Son Adria Albiol y Miguel Iniesta naturales?
Ni idea de quiénes son, pero en todo caso deberías preguntárselo a ellos.
¿Nick Walker/Ángel Calderón top 3 open/212 Mr. Olympia?
Ojalá, aunque lo dudo muchísimo. Pero la verdad es que se lo merecerían, Nick por ser el único de la categoría open que hace dieta, y Ángel porque es la definición de picar piedra. Es incansable.
¿Has hecho caca hoy más de tres veces?
Pues la verdad es que hoy aún no, pero ayer sí.