El Black Friday es, por lo general, una engaño en España. Siempre lo ha sido. Es puro márketing, porque chollos de verdad, pocos o ninguno.
Habláis de PcComponentes y yo les tengo en muy buena estima. Siempre han funcionado y trabajado bien y siempre he tenido con ellos un trato exquisito y cero problemas. La única que vez que tuve que devolver algo, una tele LG comprada de regalo a mi hernano y que tras configurarla, se jodió la pantalla, la gráfica, y no salía imagen, fue todo como la seda: según la devolví, el mismo día que la recibieron me enviaron otra, y llego al día siguiente. Y ahí sigue, desde 2017.
Mi hermano necesitaba un ordenador nuevo. La criatura llevaba con el mismo portátil desde marzo de 2009, un HP con Windows Vista, hecho unos zorros y en el que sólo podía usar el Opera para navegar porque ya nadie da sorpote. No le puedes instslar un Google Chrome o un Firefox, por ejemplo. Y ni hablar de otros programas, AutoCAD, etc.
El caso es que ha conseguido que el jefe se lo pague, sí. Pero el jefe no quería algo muy caro. Al final, mirando, el mismo día de inicio de la semana de ofertas del Black Friday a las diez de la noche, le pillé un Gigabyte Aorus 7 KB de 17,3'' por mil euros, siendo su precio normal de 1600. Esa sí que era una oferta cojonuda, y no me extraña que las 150 unidades de la oferta volaran en un visto y no visto.
Por supuesto, él no tiene ni puta idea de hacer nada con él, así que yo, como buen hermano que soy, le instalado todo (viene sin S.O.) y configurado todo. Ahora ya puede disfrutar en casa de un ordenador con Windows 10.
En todo el tiempo que ha durado el Black Friday en PcComponentes, es la única oferta realmente 'gorda' que he visto, al menos en la sección de ordenadores. Lo demás eran todo rebajas de 100 euros o cosas así.
Todo es puro márketing, ofertas gordas y apetecibles de verdad... poquitas.
Mirad el caso reciente de El Corte Inglés, a la que muchos aún siguen teniéndola en un altar, con una aureóla de comercio exquisito y buena trato al cliente. En el Black Friday pusieron unas teles con unos precios muy buenos, buenísimos. La gente, la buena gente, fueron ellos, todo ingenuidad, a comprar la tele, porque era muy buena oferta y era de El Corte Inglés. Pues bien, incluso cuando ya estaban recibiendo los avisos de los transportistas para entregarles la tele, recibieron una nota de El Corte Inglés diciéndoles que no, que el precio ese "tan bueno" era un error, y que les cancelaban el pedido por cojones. La gente se ha quedado sin tele. Otros, que tenían que ir recogerla a tienda, fueron y al llegar, pensando en llevarse la tele, les dijeron que no se llevaban nada, que había sido un error y que se lo cancelaban. A algunos, de pura chiripa, sí les llegó la tele antes de que los inútiles de El Corte Inglés se lo cancelaran. Y ahí andan, queriando tomar acciones legales, porque creo que, si tú has tenido un error, te lo tienes que comer tú, porque esa gente ha comrpado una tele a un precio, y eso es vinculante, y no se puede luego cancelar "porque sí" y a las bravas.
En fin, pues eso. Menuda chapa he soltado. Buenas pollas.