La vergüenza de la operación puerto fue que en españa se ha ido tapando los casos que se sabían. Así nos va.
Oscar Sevilla: corriendo vueltas de tercera regional por esas carreteras de dios y hasta las trancas igual
Valv.Piti: protegido por todos y estaba entrampado. Tuvo que ser desenmascarado desde Italia merced a una hábil estratagema :121
A.C. desde hoy, Alberto Clembuterol. El subnormal de Lissavetzky o como se diga no tuvo huevos de pedir una prueba de ADN para comparar su sangre con la de una bolsa de Eufemiano. Era cuestión de tiempo que la mierda llegara hasta el borde de la taza.
De Beloki, SMS Sánchez, y otros cuantos no digo nada porque no he seguido el caso tanto.
Alemania se cepilló a Ullrich, Italia a Pantani, Francia a Virenque. Normal que desde ahí fuera nos vean como la RDA 2.0 y nos tengan unas ganas locas. Ya es triste que tengan que venir de fuera a limpiar los trapos que nosotros no queremos reconocer que están sucios.
Y la afición, pues unos borregos todos, riase uted del fumbol: todos diciendo a coro que el emperador tiene un traje bordado de hilo de seda con detalles en oro y piedras preciosas. Joder, de verdad, si sale el clembuteroles a decir que la virgen maría se le apareció y por eso dio positivo, el 90% de los globeros se lo creían, son de vergüenza ajena.
El ciclismo actual es como esa canción de Pereza, Superjunkies
Los niños tienen que estar contentos,
sus héroes se ponen ciegos, muy ciegos,
saben qué es difícil aguantar esa presión,
saben qué sus superhéroes en realidad son
Superjunkies, ahá superjunkies.
superjunkies junkies, ahá
superjunkies superjunkies,
todos nosotros somos superjunkies,
todos vosotros sois unos,
superjunkies, junkies
os dejo con este enlace. Salvo las lamidas de ojal a Freire y el odio que destila a Arribas, el de "el pais", es muuuy recomendable su lectura, y más en días como éste.
Ciclismo 2005