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Las discográficas fueron tras la chica equivocada
03:50 PM Sep. 26, 2003 PT
BOSTON - La industria grabadora ha retirado una demanda contra una escultora de 66 años que asegura que jamás descargó software para compartir archivos y que por lo tanto tampoco lo utilizó; podría tratarse de un caso de confusión de identidades.
Sarah Seabury Ward, de Newbury, Massachusetts, y su marido usan la computadora para intercambiar emails con sus hijos y nietos, señaló la abogada de la Electronic Frontier Foundation (EFF, Fundación Fronteras Electrónicas) Cindy Cohn, que ha estado asesorando a la familia. El matrimonio tiene una computadora Macintosh, que ni siquiera es compatible con el servicio para compartir archivos que las discográficas los acusan de haber utilizado ilegalmente: Kazaa.
Sin embargo, Ward fue una de las 261 personas demandadas por la industria grabadora este mes por compartir archivos a través de Internet en forma ilegal. Ward fue acusada de compartir más de 2.000 temas musicales, entre los que se incluía "I'm a Thug", del rapero Trick Daddy.
Un abogado de la Recording Industry Association of America (RIAA, Asociación de la Industria Grabadora de Estados Unidos) retiró la demanda el viernes; el abogado calificó la acción de "gesto de buena fe", aunque le envió una nota a la asesora legal de Ward en la que manifestaba que la asociación seguiría investigando la cuestión y que se reservaba el derecho a volver a presentar la demanda.
La vocera de la RIAA Amy Weiss indicó el miércoles que el grupo cree que la dirección de la computadora -conocida como dirección de protocolo de Internet (IP)-provista por Comcast, el proveedor de servicios de conexión a Internet de Ward, es correcta y la asociación sigue creyendo que se trata de la cuenta que estaban buscando.
Cohn señaló que espera que surjan más casos similares, dadas las dificultades que implica correlacionar direcciones IP con personas concretas. Dijo que los proveedores de servicios de conexión a Internet como Comcast no disponen de direcciones IP suficientes para asignarle una a cada usuario, por lo tanto las van rotando, lo cual hace que sea muy difícil rastrear qué direcciones fueron asignadas a una determinada cuenta.
"Esto es lo que sucede cuando se eliminan todas las protecciones que otorga el debido proceso y todas las protecciones a la privacidad", manifestó Cohn. "Esas son las cosas que impedirían que se llegara al punto de demandar a una anciana agradable que no hizo nada malo".
La vocera de Comcast Sarah Eder se rehusó a formular comentarios específicos acerca del caso Ward, pero dijo que la empresa ayudó a la industria grabadora a correlacionar direcciones IP con usuarios, aunque sólo en los casos en que Comcast estaba obligada por ley a hacerlo.
El marido de Ward y su abogado se negaron a comentar la cuestión.
Weiss señaló que este era la única demanda que había retirado la RIAA, pero Cohn explicó que su grupo estaba investigando varias demandas más que también podrían estar vinculadas con confusión de identidades. Cohn agregó que más de la mitad de los demandados que se pusieron en contacto con su grupo aseguran que era otro el integrante de su familia que estaba compartiendo archivos.
La RIAA está resuelta a ir tras el integrante de la familia que haya cometido las violaciones, como sucedió en el caso de Brianna LaHara, una escolar de 12 años de excelentes calificaciones que vive en Nueva York e integró la lista de 261 demandados. Su madre llegó a un arreglo por 2.000 dólares y las disculpas de Brianna.
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Lo peor de todo es que ahí están los políticos dispuestos a poner a su disposición los impuestos de la gente para ayudarlos.
Art.
03:50 PM Sep. 26, 2003 PT
BOSTON - La industria grabadora ha retirado una demanda contra una escultora de 66 años que asegura que jamás descargó software para compartir archivos y que por lo tanto tampoco lo utilizó; podría tratarse de un caso de confusión de identidades.
Sarah Seabury Ward, de Newbury, Massachusetts, y su marido usan la computadora para intercambiar emails con sus hijos y nietos, señaló la abogada de la Electronic Frontier Foundation (EFF, Fundación Fronteras Electrónicas) Cindy Cohn, que ha estado asesorando a la familia. El matrimonio tiene una computadora Macintosh, que ni siquiera es compatible con el servicio para compartir archivos que las discográficas los acusan de haber utilizado ilegalmente: Kazaa.
Sin embargo, Ward fue una de las 261 personas demandadas por la industria grabadora este mes por compartir archivos a través de Internet en forma ilegal. Ward fue acusada de compartir más de 2.000 temas musicales, entre los que se incluía "I'm a Thug", del rapero Trick Daddy.
Un abogado de la Recording Industry Association of America (RIAA, Asociación de la Industria Grabadora de Estados Unidos) retiró la demanda el viernes; el abogado calificó la acción de "gesto de buena fe", aunque le envió una nota a la asesora legal de Ward en la que manifestaba que la asociación seguiría investigando la cuestión y que se reservaba el derecho a volver a presentar la demanda.
La vocera de la RIAA Amy Weiss indicó el miércoles que el grupo cree que la dirección de la computadora -conocida como dirección de protocolo de Internet (IP)-provista por Comcast, el proveedor de servicios de conexión a Internet de Ward, es correcta y la asociación sigue creyendo que se trata de la cuenta que estaban buscando.
Cohn señaló que espera que surjan más casos similares, dadas las dificultades que implica correlacionar direcciones IP con personas concretas. Dijo que los proveedores de servicios de conexión a Internet como Comcast no disponen de direcciones IP suficientes para asignarle una a cada usuario, por lo tanto las van rotando, lo cual hace que sea muy difícil rastrear qué direcciones fueron asignadas a una determinada cuenta.
"Esto es lo que sucede cuando se eliminan todas las protecciones que otorga el debido proceso y todas las protecciones a la privacidad", manifestó Cohn. "Esas son las cosas que impedirían que se llegara al punto de demandar a una anciana agradable que no hizo nada malo".
La vocera de Comcast Sarah Eder se rehusó a formular comentarios específicos acerca del caso Ward, pero dijo que la empresa ayudó a la industria grabadora a correlacionar direcciones IP con usuarios, aunque sólo en los casos en que Comcast estaba obligada por ley a hacerlo.
El marido de Ward y su abogado se negaron a comentar la cuestión.
Weiss señaló que este era la única demanda que había retirado la RIAA, pero Cohn explicó que su grupo estaba investigando varias demandas más que también podrían estar vinculadas con confusión de identidades. Cohn agregó que más de la mitad de los demandados que se pusieron en contacto con su grupo aseguran que era otro el integrante de su familia que estaba compartiendo archivos.
La RIAA está resuelta a ir tras el integrante de la familia que haya cometido las violaciones, como sucedió en el caso de Brianna LaHara, una escolar de 12 años de excelentes calificaciones que vive en Nueva York e integró la lista de 261 demandados. Su madre llegó a un arreglo por 2.000 dólares y las disculpas de Brianna.
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Lo peor de todo es que ahí están los políticos dispuestos a poner a su disposición los impuestos de la gente para ayudarlos.
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