La caída en picado del dólar a su valor real, o sea, cero, no le conviene a casi nadie, ya que esto derivaría en un caos mundial sin precedentes. Ningún país es autosuficiente, amén de que todos poseen buena parte de sus reservas en dólares y bonos USamericanos. Entre quienes tienen consciencia (muy pocos) de la real situación en la que estamos, existe una gran preocupación por lo que pueda venir.
En estos mismos momentos, los judíos, (expresión adecuada ya que el 90 % de la diáspora se declara solidaria con el movimiento sionista, amén de honrosísimas y valerosas excepciones, claro) están presionando al gobierno de EEUU y demás países occidentales para que se efectivicen sanciones severas contra Irán, lo que ante la negativa iraní, quien no dará el brazo a torcer ya que tiene el privilegio de ser el único país genuinamente independiente de la Banca Internacional, puede suponer un devastador ataque militar. La posición de Rusia es absolutamente clave en todo este asunto.
Ni más ni menos, entre bastidores como siempre, están chantajeando al mundo con el Apocalipsis económico y social. Están en posición, como en 1929, de que se venga abajo todo el tinglado capitalista con un simple chasquido de dedos. Simplemente tienen que dejar de comprar deuda pública usamericana o provocar la caída del precio del Dólar mediante su venta masiva, poder que comparten con el engendro chino. Antes de la SGM pusieron a Inglaterra y a EEUU en la misma disyuntiva, o iniciáis una guerra mundial, o la ruina. El sistema financiero internacional está a la deriva y en bancarrota por culpa de su propia y demencial dinámica, diga lo que diga la prensa y los políticos. Según analistas al servicio de la Banca Internacional, la única solución viable es el establecimiento de una Divisa Mundial con respaldo de Oro. Esa es la solución que se están barajando entre bastidores, y es la carta ganadora del Sionismo.
¿Quién ha estado acumulando todo el Oro físico disponible durante los últimos 2000 años?, el cual ha desaparecido misteriosamente del mercado y de los bancos centrales durante las últimas décadas. Creo que ponto, si no lo ha sido ya, la propuesta sionista será: o hay hongos atómicos en Irán y nos dejan eliminar a nuestros enemigos o hay hongos económico-sociales en el resto del mundo. Así de sencillo, una jugada a dos bandas que les permitiría aniquilar a Irán, y barrer con Gaza, Siria y Líbano en el borbollón e instaurar la Divisa Mundial, previo crash y caos terminal, con un férreo Patrón Oro como garantía y respaldo, cosa que indudablemente sumergirá a la población mundial en la más absoluta de las miserias ya que la implosión del Sistema traerá la ruina de todos los sistemas productivos así como la automática extinción de las clases medias, ya que desaparecerán instantáneamente los ahorros de las familias. Si Obama se planta en la negativa, pues cometerán un atentado de bandera falsa y plantarán los hongos ellos, además de acelerar la ruina de la economía mundial. De una manera o de otra, EEUU eclipsará como única potencia dominante y el Gobierno Mundial a través de las organizaciones mundialistas y transnacionales controladas por los amos del Dinero, de los Medios, de la Tecnología y de los mega-conglomerados Energéticos estará servida.
Los movimientos en el mercado del Oro (Comex de NY), anuncian el inicio de esta ofensiva apocalíptica. Pronto no habrá Oro físico en el mercado. ¿Saben lo que eso significa? Este es el despliegue de la sincrónica pinza del Sionismo Político más el Sionismo Financiero, destinado a barrer con los enemigos del Estado Judío en Medio Oriente, y a instaurar la Divisa Única Mundial, controlada por un Banco Central Mundial.
Obama, es un homúnculo del sionismo, y sigue, indudablemente su Agenda, pero, dada la gravedad de la situación, por cierto, existe mucha gente dentro de la Administración y de las Fuerzas Armadas y de Inteligencia norteamericanas, así como sectores del pueblo que son verdaderamente patriotas y son los que evidentemente están presionando, ya con las cartas a la vista, para que se tuerza la Agenda Sionista. No es tarea fácil y Obama lo tiene verdaderamente difícil, ya sea si opta por un camino o por el otro. EEUU corre un muy serio riesgo de guerra civil y la pandemia de gripe es una excusa para movilizar a la Guardia Nacional.
Ya en un terreno que a muchos lectores sorprenderá, comentaré una cosa. Advertido por un amigo muy iniciado en las cuestiones esotéricas, fui a al cine a ver la última película de Tarantino “Malditos Bastardos”. La película en si es una basura absoluta, en línea con la deriva esperpéntica y mediocre en la que está cayendo la “varita mágica” (Hollywood). Herramienta estratégica para el reformateo mental de las masas de eunucos y teletubbies. Pero, para quienes tengan ojos para verlo, esta representación de sacrificio humano al Dios Moloc, no tiene desperdicio. Es la escenificación simbólica y cinematográfica de un Sacrificio Ritual, en el cual la Dama de Rojo, o Mujer Escarlata (una judía que representa a Israel), propicia la muerte por el fuego (holocausto) de toda la cúpula nazi, la cual está encerrada en un cine, (acto pre-final, de un simbolismo supremo). Lo curioso es que la Dama de Rojo, antes de morir, (¿la desolación de Jerusalem?) “encarga” mediante un beso muy particular, la ejecución del asesinato ritual, a un hombre negro. ¿Casualidad?. Un antiguo principio hermético dice que la Casualidad es una Ley Cósmica que aún no ha podido ser descifrada… En fin, no me extenderé con la jugosa lectura transversal de la película, pero les puedo asegurar que nos están tomando el pelo y en nuestras propias narices. Por supuesto la proyección de la película se cierra con un cerrado aplauso de un público, evidentemente, zombie irreparable. Dignos, y de momento satisfechos, esclavos de Zión.
“El Jehová racista y negociador que prometía territorios, tesoros, sangre y poder sobre otros, a cambio de un ritual de sacrificio, que debía ser llevado a cabo en un lugar preciso, en una tierra específica. Esta tribu (la de Judah) con un curioso aire, fue una de las que inició viaje hacia el futuro, cargando la doctrina incorporada por los Levitas, a saber, que eran “el pueblo escogido” de Jehová y, que cuando llevaran a cabo “todos mis estatutos y juicios”, heredarían una tierra prometida y el dominio sobre todos los pueblos. Entre estos “estatutos y juicios” tal como los Levitas finalmente editaron, aparecían repetidamente, las órdenes, “destrucción absoluta”, “derrumbe”, “corte de raíz”. Judah fue destinada a producir una nación dedicada a la destrucción”.
Douglas Reed (La controversia de Zión)