Capitán Hediondo
Posiblemente el PEOR Forero de la Historia
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Partiendo de esta noticia, a todas luces ejemplo claro del mal estado de la Justicia en España
Condenado a dos años por obligar a su mujer a hacer una felación a su perro
El Supremo confirma la sentencia dictada por un juez de Barcelona
El Tribunal Supremo (TS) ha confirmado la condena de dos años de cárcel impuesta a un hombre por un delito contra la integridad moral por obligar a su mujer a realizar una felación a su perro.
Así lo ha acordado la sala de lo penal del TS en una sentencia, en la que desestima el recurso interpuesto por el condenado contra la resolución dictada en julio de 2009 por la Audiencia Provincial de Barcelona, que también le impuso ocho meses de cárcel por quebrantar la medida cautelar de aproximarse a su esposa, pena que también confirma el Alto Tribunal.
En diciembre de ese año, el acusado acudió al domicilio de su esposa, donde tras mantener relaciones sexuales con ella le pidió que efectuara a su perro varias felaciones, a lo que ella accedió, sin que conste que manifestara su voluntad en contra de llevar a cabo los referidos actos.
Posteriormente, el procesado insistió en que volviera a hacerlo, momento en el que ésta se negó, aunque finalmente accedió después de que su marido le amenazara con matarla a ella y a sus tíos.
La sentencia en sí, y por extensión todo el caso, demuestra hasta qué punto la Justicia española desprecia absolutamente los derechos de los animales, que siendo como son, criaturas de Dios, también tienen los mismos derechos que nosotros. Toros, la cabra desde el campanario, las lanzas del pueblo ése de energúmenos patriotas, todas estas muestras vienen a dar la razón a PETA y a las demás asociaciones para la defensa del animal, pero esta última vejación, más allá de cualquier lógica, viene a dar la puntilla a la poca confianza en el ser humano que pudiera quedarnos.
Lassie, perrita mía, voy por el lubricante al establo y te demuestro mi amor eterno.
El perro tiene el mismo derecho que este homosexual de mierda
a chupar y ser chupado. ¿Porqué negarse la mujer entonces? ¿Qué tiene en contra del perro?
Su marido, un hombre preocupado por la salud y el bienestar de su mejor amigo, su fiel aliado, su defensor, sólo busca satisfacer las lógicas ansias del can por desfogar su libido, ya sea con una perra con pedigrí, o con la mujer de su dueño. El perro es inocente, y el dueño, más.
Hay, por otro lado, otra clase de fémina, aquella que piensa primero en el bienestar del animal, que en el suyo propio, y que hace todo lo posible, porque el bicho pase lo mejor posible su tiempo en este valle de lágrimas que llamamos vida.
Toma vagina en lata, Brioso, que esta noche las dos chupamos a cuatro carrillos.
Mujeres que saben lo que quieren, que aman la naturaleza, y que obran en consecuencia. Ésas son las mujeres del futuro, las que de verdad son ecologistas, las que viven por y para Gea. Ellas heredarán la Tierra.
Pareja interracial liberal busca mastín o negro mandingo para intimar y lo que surja.
Como despedida de esta putísima mierda de hilo, dejo aquí los datos de uno que se anuncia en la página de contactos de la revista Hipódromo Moderno.
Pura sangre árabe, liberal, con las ideas claras, limpio, ordenado y bien dotado, busca mujeres solas o parejas para contacto. Sólo gente seria. Atiendo sólo por móvil.
Condenado a dos años por obligar a su mujer a hacer una felación a su perro
El Supremo confirma la sentencia dictada por un juez de Barcelona
El Tribunal Supremo (TS) ha confirmado la condena de dos años de cárcel impuesta a un hombre por un delito contra la integridad moral por obligar a su mujer a realizar una felación a su perro.
Así lo ha acordado la sala de lo penal del TS en una sentencia, en la que desestima el recurso interpuesto por el condenado contra la resolución dictada en julio de 2009 por la Audiencia Provincial de Barcelona, que también le impuso ocho meses de cárcel por quebrantar la medida cautelar de aproximarse a su esposa, pena que también confirma el Alto Tribunal.
En diciembre de ese año, el acusado acudió al domicilio de su esposa, donde tras mantener relaciones sexuales con ella le pidió que efectuara a su perro varias felaciones, a lo que ella accedió, sin que conste que manifestara su voluntad en contra de llevar a cabo los referidos actos.
Posteriormente, el procesado insistió en que volviera a hacerlo, momento en el que ésta se negó, aunque finalmente accedió después de que su marido le amenazara con matarla a ella y a sus tíos.
La sentencia en sí, y por extensión todo el caso, demuestra hasta qué punto la Justicia española desprecia absolutamente los derechos de los animales, que siendo como son, criaturas de Dios, también tienen los mismos derechos que nosotros. Toros, la cabra desde el campanario, las lanzas del pueblo ése de energúmenos patriotas, todas estas muestras vienen a dar la razón a PETA y a las demás asociaciones para la defensa del animal, pero esta última vejación, más allá de cualquier lógica, viene a dar la puntilla a la poca confianza en el ser humano que pudiera quedarnos.
Lassie, perrita mía, voy por el lubricante al establo y te demuestro mi amor eterno.
El perro tiene el mismo derecho que este homosexual de mierda
a chupar y ser chupado. ¿Porqué negarse la mujer entonces? ¿Qué tiene en contra del perro?
Su marido, un hombre preocupado por la salud y el bienestar de su mejor amigo, su fiel aliado, su defensor, sólo busca satisfacer las lógicas ansias del can por desfogar su libido, ya sea con una perra con pedigrí, o con la mujer de su dueño. El perro es inocente, y el dueño, más.
Hay, por otro lado, otra clase de fémina, aquella que piensa primero en el bienestar del animal, que en el suyo propio, y que hace todo lo posible, porque el bicho pase lo mejor posible su tiempo en este valle de lágrimas que llamamos vida.
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Mujeres que saben lo que quieren, que aman la naturaleza, y que obran en consecuencia. Ésas son las mujeres del futuro, las que de verdad son ecologistas, las que viven por y para Gea. Ellas heredarán la Tierra.
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