Las feminazis

El Loco de las Coles rebuznó:
Ilovezorras rebuznó:
SáBaNa rebuznó:


Has herido mi sensibilidad para la próxima media hora.

Verdaderamente una cosa es que las mujeres sean subnormales profundas y otra estas imágenes, me siento igual que este hombre, especialmente la primera, me parece espantosa, todavía conservo sensibilidad.

La verdad es que es una imagen que provoca rabia. Si el soldado nazi hubiese follado un poco más (con hembras), sabría que no hace falta tirar tanto de la pierna, sino que basta con levantarla un poco para que la articulación fémur - pelvis haga su trabajo y poder separar más las piernas sin cansarse y sin provocarle distensiones musculares y lesiones a la pobre muchacha.

Aclarar también que a ese dibujo le falta algo, o ¿acaso las ratas van a entrar por el chichi de la tia por que si?, sin embargo si le aplicas una llama al fondo de la jaula, las ratas al notar el calor si que buscarán una via de escape, eso mismo lo leí en no me acuerdo que libro pero con un caldero y sentando a la victima sobre el, dentro una rata, y debajo fuego, parece ser que les quedaba el ojete mas grande que el de Goatse.
 
Pervertor rebuznó:
llevo mil meses sin dormir y aun así sigo viendo gilipollas everywhere, oiga.

Me alegro de ver que aún conserva las buenas costumbres.
 
Joder con las putas ratas de los cojones...

Las ratas es un símbolo de la suciedad, del animal feroz que ha inspirado siempre miedo al hombre, proveedor de enfermedades y un sinfín cosas por el estilo.

Los nazis (por lo que he leido, así que no puedo afirmarlo) las utilizaban para encarnar esos miedos y supongo que en parte para satisfacer su naturaleza sádica y llegar a los límites del miedo humano.
Ataban a una persona y despues de sacar una par de ratas que llevaban sin comer un par de semanas, perforaban el estómago e introducían las ratas para que estas devorasen sus entrañas en vida.
También he leido que las introducían por el culo y ellas se iban abriendo camino a mordiscos.

Supongo que Richard Gere lo encontró sensual y por eso le pedía a Cindy Crawfor que le metiese jerbos via rectal.

Podemos encontrarlo también en el libro 1984 para convecer a un rebelde que no amaba al Gran Hermano.

Ratas, sexo y miedo. Está bien.
 
El problema con estas "feminazis" es que en un mundo donde hay que ser políticamente correcto, están consiguiendo todos sus objetivos, uno detrás de otro. ¡Ojo! Yo no digo que algunas de las cosas que promulguen sean malas. En verdad algunas cosas sí debían ser dadas.
Y el problema es que estas mujeres YA han convertido al hombre en un enemigo en potencia. YA se practica usualmente la discriminación positiva en favor de las mujeres. Pero la discriminacción, por muy positiva que sea, discriminación es. Ya no se mira las cualidades de una persona y sí en que haya paridad. No importa si están preparados para ese puesto o no mientras haya paridad. Sí es cierto que hay trabajos en que la mujer cobra menos que el hombre. Pero lo que los medios de comunicación (no lo olvidemos, el 4º poder) es que en algunos de esos trabajos, las mujeres no realizan algunas tareas y que en muchos otros SÍ cobran igual. Y que hay muchos trabajos en que cobrán más porque su preparación, estudios y labor hacen que sean merecedoras de ello.
La acción de lo políticamente correcto no es más que una gran censura ante la que poner buena cara mientras todo se derrumba a nuestro paso. En Valladolid, lo sé porque lo conozco, se observa muy bien todo esto.
Venimos a una época en que pretextando errores del pasado lejano, se ataca el presente y el futuro. es decir, se sustituye un problema grave por otro igual de grave. Por ejemplo, hace unos años salió un juego que se llamaba "Guerra de sexos". Se trataba de un mundo en que hombres y mujeres estaban enfrentados. Sacar hoy día ese juego es sacar un boleto para acabar en la cárcel o en la puta calle.
Sin embargo, obsérvese que, no esto precisamente, siempre que se avecinan cambios generales, grandes y violentos, las sociedades caminan hacia su colapso, empiezan a vivir por encima de sus posibilidades, empiezan a enfrentarse entre ellos y continuan con una aguda crisis. No digo que se vaya a desencadenar la 3ª guerra mundial, ni que la guerra de sexos sea consecuencia directa de ello pero, sin duda, está radicalizando a grandes pasos la sociedad.
También hay hombres maltratados que no reciben casi ayudas por ser hombre. Hay personas muy cualificadas que por la paridad ven como su puesto pasa a otra persona menos preparada. Y sólo por su sexo.
La igualdad está bien pero con cabeza. Hoy en día la igualdad es IMPOSIBLE porque estamos llenos de resentimientos. Resentimientos por actos que a nosotros no nos han afectado y porque algunos y algunas HIJOS E HIJAS DE PUTA, se autotitulan representantes del resto y, por culpa de ser políticamente correctos, aumentan el resentimiento, el odio cercano, la crispación aunque destruyan aquello que querían proteger. Pero ha pasado así durante toda la historia. Somos unos completos gilipollas por no aprender de ellos. Ya sabemos, asimismo, que el ser humano es un hijo de la gran puta.
Y, repito, esta guerra de sexos no es desencadenante pero sí es una fuerza motriz muy importante, y fomentada en muchísiiiiiimos casos, del odio exacerbado.
Hale, a más ver. Esta es una opinión personal. No debéis estar de acuerdo o sí pero creo que, tal vez, sirva en animar y ofrecer otro punto de vista a este tema.
 
No me agrada trabajar por cuenta ajena y por ello reivindico desde este púlpito que las mujeres regresemos a cuidar los hogares, que en sí mismos constituyen una empresa digna de cuidar y por la que luchar.

Entonces me veo poseida por una fuerza acorpórea y clamo con otra voz un romance de Doña Urraca, que se fue para Cabezón a quejarse al rey y le espeta:
—Morir vos queredes, padre,   ¡San Miguel vos haya el alma!
Mandastes las vuestra tierras   a quien se vos antojara:
diste a don Sancho a Castilla,   Castilla la bien nombrada,
a don Alfonso León, con Asturias y Sanabria,
a don García Galicia  con Portugal la preciada,
¡y a mí, porque soy mujer,  dejáisme desheredada!
Irme he yo de tierra en tierra como una mujer errada
mi lindo cuerpo daría  a quien bien se me antojara,
a los moros por dinero (japuta jajaja)   y a los cristianos de gracia;
de lo que ganar pudiere,   haré bien por vuestra alma.
  Allí preguntara el rey:   —¿Quién es esa que así habla?
Respondiera el arzobispo:   —Vuestra hija doña Urraca.
—Calledes, hija, calledes,   no digades tal palabra,
que mujer que tal decía   merecía ser quemada.
Allá en tierra leonesa   un rincón se me olvidaba,
Zamora tiene por nombre,   Zamora la bien cercada,
de un lado la cerca el Duero,   del otro peña tajada.
¡Quien vos la quitare, hija,   la mi maldición le caiga!
Todos dicen: «Amen, amen»,   sino don Sancho que calla.


Se lo conté a un probo aldeano y me espetó impávido y lleno de inteligencia parda:

¡LAS BURRACAS SON LADRONAS!
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Que pedazo de zorra, Doña Urraca :lol:
 
Asta rebuznó:
No me agrada trabajar por cuenta ajena y por ello reivindico desde este púlpito que las mujeres regresemos a cuidar los hogares, que en sí mismos constituyen una empresa digna de cuidar y por la que luchar.

Entonces me veo poseida por una fuerza acorpórea y clamo con otra voz un romance de Doña Urraca, que se fue para Cabezón a quejarse al rey y le espeta:
—Morir vos queredes, padre, ¡San Miguel vos haya el alma!
Mandastes las vuestra tierras a quien se vos antojara:
diste a don Sancho a Castilla, Castilla la bien nombrada,
a don Alfonso León, con Asturias y Sanabria,
a don García Galicia con Portugal la preciada,
¡y a mí, porque soy mujer, dejáisme desheredada!
Irme he yo de tierra en tierra como una mujer errada
mi lindo cuerpo daría a quien bien se me antojara,
a los moros por dinero (japuta jajaja) y a los cristianos de gracia;
de lo que ganar pudiere, haré bien por vuestra alma.
Allí preguntara el rey: —¿Quién es esa que así habla?
Respondiera el arzobispo: —Vuestra hija doña Urraca.
—Calledes, hija, calledes, no digades tal palabra,
que mujer que tal decía merecía ser quemada.
Allá en tierra leonesa un rincón se me olvidaba,
Zamora tiene por nombre, Zamora la bien cercada,
de un lado la cerca el Duero, del otro peña tajada.
¡Quien vos la quitare, hija, la mi maldición le caiga!
Todos dicen: «Amen, amen», sino don Sancho que calla.


Se lo conté a un probo aldeano y me espetó impávido y lleno de inteligencia parda:

¡LAS BURRACAS SON LADRONAS!

Que pedazo de zorra, Doña Urraca :lol:

Hermoso poema.

Mis respetos para la gobernanta de la ciudad que El Cid no pudo tomar, allí donde, al pie de sus murallas, murió el Rey Sancho de Castilla.
 
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