Becerro de oro rebuznó:
Una cosa muy llamativa es que de esas zorrillas tránsfugas un alto % son de las CCAA que formaban el antiguo reino de Aragón, los machos de esas regiones no saben retener a sus hembras!
Bueno, eso se debe a que suelen ser comunidades bilingües cuyas hembras tienen facilidad para adquirir una tercera lengua, de ahí la inclinación hacia los romances erasmusianos y xenofílicos. Por ejemplo, aquí en Cataluña, entre los catalanohablantes, está muy extendida la creencia de que todas las lenguas romances son parecidas al catalán, esto es, más parecidas al catalán que al castellano, como si el catalán fuera una lengua proto-romance más troncal que el castellano, de manera que es fácil encontrarte a zorritas catalanas diciendo: "Ai, m'agrada l'italià/francès perquè s'assembla al català bla bla". De la plasticidad lingüística de las catalanas a comer pollas de macarronis hay un solo paso, claro.
O sea, que no es porque los machos de la Corona de Aragón fallemos, sino porque las hembras de la Corona de Aragón se creen chochitos europeos y plurilingües, y porque a un macho europeo no le cuesta nada follarse a una española aunque ésta provenga de un país socioeconómicamente inferior.
Esto no ocurre con los machos catalanes, que a pesar de tener la misma plasticidad lingüística y la misma querencia por lo extranjero, no podemos beneficiarnos a chochitos italianos o franceses con tanta facilidad, porque ya se sabe que un macho de un país socioeconómicamente inferior siempre lo tendrá más crudo para follarse a hembras de países socioeconómicamente superiores, ya que ellas no buscan en el macho solamente un físico o un vehículo reproductor, sino también un estatus social y económico, que claro, un muerto de hambre de la piel de toro no puede proporcionárselo.
Pero bueno, estas zorritas que se casan con macarronis no tardan mucho en sentirse como lo que son, un útero rodeado de carne en un país donde todo el mundo considera a los españoles como unos vagos y unos payasos, y a sus hembras como meros objetos sólo aptos para tener hijos y acatar las órdenes del marido. La comunidad de mujeres españolas expatriadas suele sufrir unos índices de machismo y violencia intramatrimonial que te cagas, machismo y violencia que aguantan so pretexto del shock cultural, multiculturalismo, ecumenismo, alianza de civilizaciones, o su puta madre.