En un mundo de fantasía, vería con buenos ojos que una competición así sustituyese a la actual Shempions y, desde luego, siempre es positivo alejarse de la influencia de estómagos agradecidos, intermediarios y burócratas del fútbol. Sólo ver a esos ejecutivos top, a esos Tebas y Rubiales viendo peligrar sus cortijos y con el ojal en pleno frenesí ya hace que sea un viaje que merece la pena.
Pero como aficionado de medio pelo, una competición sin descensos, ni ascensos, totalmente endogámica (elemento necesario para que el puñado de franquicias dominen la competición con mano de hierro sin influencias externas), no me parece especialmente atractiva hoy en día, y eso es clave. No hay competición sin meritocracia orgánica. Preferiría dejarlo todo como está, incluyendo tirar por el retrete ese lamentable nuevo formato de Champions.
En todo caso, la globalización avanza imparable y esto va a pasar y, como ya han dicho, acabaremos tragando y dando palmas con las orejas. Los ”modestos” pueden llorar, pero la realidad es que buena parte de ellos recoge lo que siembran esos clubes posh liderados por FlorenThanos, y la salida de los mismos significará la puntilla de toda competición que no quiera pasar por el aro.
El argumento de la solidaridad... En fin, LOL.
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