En este momento de mi vida, mis fantasías van más de lado de las teens. Cuando era un jovenzuelo, me gustaba follarme a cuarentonas, para mí eran el no va más. Experiencia, ganas de cerdear...
Recuerdo a una divorcieta. Me llevaba fácil 20 años y 12 cm. de estatura. Me venía a recibir en su piso a pie de portal, (era un bajo), con una camiseta sin nada por debajo, y antes de llegar a la puerta ya estaba chorreando. Y me la follaba antes de darme tiempo a sacar los calcetines, ya ves tú..
Follarse a una tía más grande que uno también tiene su punto, a cuatro patas lo mismo la tenía que abrir mucho, pero son gajes del oficio supongo. En horizontal la cosa ya da igual, y total de pie no te las follas. El que piense que le da miedor una tronca más grande es que tiene un problema de identidad sexual. Un hombre se folla lo que sea cuando aprieta.
Luego la tipa se curraba algo para picar, que no eran sino exquisiteces (era chef con experiencia internacional). Volvía a casa que me temblaban las piernas y me tenía que poner nivea en el cipote por el tema del rozamiento. Nunca me preguntó si me follaba a alguien más, cero celosa. Aunque me comentaba que estaba empezando a colarse y sabía que yo volaría.
Lo de las teens era más complicado, porque no saboreaba los polvos igual. Eran aquí te pillo aquí te mato, aprovechando casas sin padres, parques solitarios o cualquier otro lugar. Cuando no tienes un duro para montártelo en plan hotel y demás, las cosas no resultan.
Ahora dame una teen, y volver a sentir esas carnes prietas, esos coñitos casi virginales... Adiestrar también mola, enseñar a una como se come bien una polla, llevándole la cabecita. Esas cosas no tienen precio. (Bueno, sí lo tienen, carisísimo..)