Victor I rebuznó:
Empezaré diciendo algo que deberas entender instintivamente sin necesidad de superfluas explicaciones "Me las'metio malamente".
Exacto. Precisamente el vídeo del "
Me las metío malamente" es un buen ejemplo de cómo las mujeres usan el coito como instrumento, como un peaje por el que pasan pero que no va mucho con ellas. Si os fijáis en la actitud de la jenny del vídeo, en especial su mirada justo después de poner en marcha la cámara, es como la de una ama de casa que se dispone a planchar las camisas del marido o preparar un cocido para la familia. Es una mirada entre abnegada y ausente, como diciendo: "
Güeno, surmano, ahora se supone que
habemos de
foshar, pero yo
toi pensando en el vestido que
sa comprao la Vane en el Zara y en el cabrón de mi ex que me dejó por una guarra".
Y así funcionan todas.
Ahora bien, cuando digo que la mujer es una máquina biológica de abnegación y renuncia, me refiero a una abnegación puramente
sensorial-genital, una abnegación que instrumentaliza para posicionarse, ella y su prole, en el plano social y económico. Es decir, la mujer exige en el hombre valor social, económico, genético, ahí sí que no es nada abnegada ni conformista, todo lo contrario; exige, exige y exige; pero en el goce genital sí, en el goce genital está dispuesta a sacrificar porque para ella el goce genital está muy abajo en su lista de prioridades. Y no es porque ellas controlen mejor sus impulsos sexuales ni nada de eso. Es sencillamente porque el cóctel hormonal femenino conlleva una libido baja y la morfología genital femenina les dificulta gozar plenamente del coito. Esto es así hasta el punto de que muchas mujeres son prácticamente frígidas y anorgásmicas, y ni siquiera tienen la sensación de estarse perdiendo nada.
Lo que pasa es que hay un factor que lo emponzoña todo que es el
factor pornografía. Es difícil haceros entrar en razón cuando en vuestras cabecitas retumba la pregunta: "¿Y entonces por qué las muy cochinas ponen esa cara de gozarlo cuando se las folla Nacho Vidal?".
La respuesta es:
Nacho Vidal es un macho de alto valor social. A diferencia de otros actores del mundillo, es extrovertido, entusiasta, vividor, canalla, pendenciero, amigo del director y de todos los actores, se curra a las actrices antes de la escena, las seduce, las adora, las desconcierta, etc. Y lo más importante, tiene buen cuerpo, buena polla y ojos azules. No olvidéis la obsesión que tienen las mujeres con los ojos azules. Dentro del mundo porno hay pocos actores que combinen buen cuerpo con verdadero entusiasmo y pasión heterosexual. Por eso las actrices se lo gozan con él. Pero no porque el tío folle como un animal, sino por su alto valor social dentro del mundillo y por su privilegiada dotación genética. Desengañaos, que si vosotros les hicierais a las tías lo que Nacho Vidal les hace a las zorras de los vídeos, os ponían una denuncia por malos tratos más rápido de lo que canta un gallo. A vosotros no os lo permitirían porque no sois machos de alto rango.
Y esto de Nacho Vidal lo tendría que haber puesto en el otro hilo, pero bueno, aquí se queda.