Hombre, la Naranja Mecánica, obviando que dice mucho más de lo que pueda parecer a un nivel muy superficial (lo de la violencia extrema), ha tenido mucha continuidad hasta nuestros días (cualquier slasher de mierda puede servir de ejemplo), así que es normal que, en ese aspecto, uno ya esté acostumbrado a todo y no nos impresione una mierda en cuanto a escenas de violencia. Pero se trata de una ruptura bastante heavy con lo anterior y, si se profundiza un poco, es una película única.
Calígula, para qué vamos a decir nada (¿escenas de sexo explícito?... buah, chaval), pero a ver qué film encuentras de estas características en el que participen actores reputados y convencionales. En este aspecto, es también única, revolucionaria y muy valiente.
Y de las otras monstruosidades y aberraciones que citamos, a ver cuándo cojones van a ser superadas, porque mira que han pasado años...
Así que sí, el cine de los 70 fue el más valiente de la puta historia; se hizo adulto a lo bestia.