Dr. Quatermass
Freak
- Registro
- 6 Nov 2006
- Mensajes
- 5.893
- Reacciones
- 0
Rashomon (1950) Akira Kurosawa
Otra obra maestra de Kurosawa. La verdad es que hablar de pelis como ésta es ya bastante redundante, pero yo aún no la había visto. Narrada en forma de elipsis gigante, en la que además se intercalan los flashbacks de los diferentes personajes, que articulan una historia de samurais, honor e incluso fantasmas. Resulta a veces un tanto teatral, pero contiene una lúcida reflexión sobre la volatilidad del juicio de los hombres, además de contener secuencias realmente memorables especialmente en la parte más fantasmal de la historia. Un clásico. Ocho.
Mad Max, salvajes de la autopista (1979) George Miller
Película que con el tiempo casi ha alcanzado el status de mito, y que sin embargo me ha parecido bastante corriente. Tal vez sea por lo mucho que ha sido imitada con posterioridad, pero me ha dejado cierto regusto amargo. La primera media hora es cojonudamente original, pero a medida que avanza se vuelve más efectista, y lo que es peor, aburrida. Cinco.
Nanuk, el esquimal (Nanook, el esquimal) (1922) Robert J. Flaherty
Documental sobre la vida esquimal en el Ártico a principios de siglo. Desprende humanidad por los cuatro costados y es realmente amena. Su único lastre se reduce a quebrar en cierta medida las reglas no escritas de género documental, puesto que muchas de las cosas que ocurren son ficciones preconcebidas. Pero además de eso es una joya bastante olvidada e interesantísima para acercarse a estos personajes, los cuales, por mucho que Homer diga lo contrario, verdaderamente existen y no los ha inventado Coca Cola. Siete.
Crank 2: Alto voltaje (2009) Mark Neveldine, Brian Taylor
Cojonuda. El objetivo es crear algo completamente surrealista, bobo y hasta ridículo, y la verdad es que los Neveldine y Taylor lo consiguen con creces. Me ha gustado tanto o más que la primera parte. Es un sinsentido si cabe mayor. Cabezas en formol, operaciones a corazón abierto, descargas de alta tensión, gente en llamas, tetas, sexo en medio de un hipódromo, y un largo etcétera de despropósitos a velocidad de crucero. Me lo he pasado de puta madre otra vez. Seis.
Otra obra maestra de Kurosawa. La verdad es que hablar de pelis como ésta es ya bastante redundante, pero yo aún no la había visto. Narrada en forma de elipsis gigante, en la que además se intercalan los flashbacks de los diferentes personajes, que articulan una historia de samurais, honor e incluso fantasmas. Resulta a veces un tanto teatral, pero contiene una lúcida reflexión sobre la volatilidad del juicio de los hombres, además de contener secuencias realmente memorables especialmente en la parte más fantasmal de la historia. Un clásico. Ocho.
Mad Max, salvajes de la autopista (1979) George Miller
Película que con el tiempo casi ha alcanzado el status de mito, y que sin embargo me ha parecido bastante corriente. Tal vez sea por lo mucho que ha sido imitada con posterioridad, pero me ha dejado cierto regusto amargo. La primera media hora es cojonudamente original, pero a medida que avanza se vuelve más efectista, y lo que es peor, aburrida. Cinco.
Nanuk, el esquimal (Nanook, el esquimal) (1922) Robert J. Flaherty
Documental sobre la vida esquimal en el Ártico a principios de siglo. Desprende humanidad por los cuatro costados y es realmente amena. Su único lastre se reduce a quebrar en cierta medida las reglas no escritas de género documental, puesto que muchas de las cosas que ocurren son ficciones preconcebidas. Pero además de eso es una joya bastante olvidada e interesantísima para acercarse a estos personajes, los cuales, por mucho que Homer diga lo contrario, verdaderamente existen y no los ha inventado Coca Cola. Siete.
Crank 2: Alto voltaje (2009) Mark Neveldine, Brian Taylor
Cojonuda. El objetivo es crear algo completamente surrealista, bobo y hasta ridículo, y la verdad es que los Neveldine y Taylor lo consiguen con creces. Me ha gustado tanto o más que la primera parte. Es un sinsentido si cabe mayor. Cabezas en formol, operaciones a corazón abierto, descargas de alta tensión, gente en llamas, tetas, sexo en medio de un hipódromo, y un largo etcétera de despropósitos a velocidad de crucero. Me lo he pasado de puta madre otra vez. Seis.