Pues sigo con mi monólogo en este hilo ya que el Viernes tengo cita con mi nueva compañera de juegos.
No negaré que se me ha hecho extraño lo de consensuar los límites de la sesión, las palabras de seguridad, una para moderar la intensidad y otra para parar si me excedo.
Será la falta de costumbre, pero es lo habitual en este mundo. Preferiría haberlo hecho en persona, y de hecho ya hemos hablado sobre nuestros gustos y nuestros límites, pero cuando le he confirmado que nos íbamos a ver se ha puesto especialmente interesada en saber qué tenía pensado para ella. Pero es imposible planificar una sesión, ya que por mi experiencia hay que ir moderando el trato, la brusquedad, los momentos de dolor y los momentos de placer al nivel de la persona que tienes delante, y no se cómo va a reaccionar ella, por lo que no hemos hecho más que hablar de hasta donde no llegar.
No esperéis paja en mano un relato, algún detalle quizás daré, pero no sera una sexpe completa. Al ser nuestro primer encuentro, nos lo tomamos más como una prueba, ni ella espera que sea totalmente dominante, ni yo que se entregue desde el primer minuto, habrá sexo, sí, seguro, habrán azotes hasta dejarle marcas, también, tocará inmovilizarla y hacerla sufrir un poco, pero la idea es sobre todo (en realidad había puesto sobre todo junto porque soy un subnormal) ver si hay esa afinidad que se palpa.
Por cierto, el otro día nos besamos por primera vez al despedirnos, vaya cosa de explicar, no ? El caso es que mientas la besaba, la agarré del pelo y la apreté contra mi, y soltó un pequeño jadeo que me puso a 100 y más cuando me susurró al oído que si ya estaba excitada de toda la tarde que llevábamos juntos, ese gesto hizo que dejara las bragas (de star wars
) empapadas. El rollo little que lleva me está empezando a parecer curioso, esa mezcla de carácter infantil y que luego me pida que le rompa el culo mientras la asfixio me tiene intrigado.