Estos tíos son la mayoría subnormales, sin ningún tipo de preparación en nada. Tienen el don de jugar al fútbol, y nada más (vale si, hay alguna excepción muy puntual). Que pasa, cuando empiezan a ganar dinero, que lo consigue 1 de cad 1000, sus padres son los que llevan sus carreras, ya que normalmente para los garrulos, la "familia lo es todo".
Se cumple siempre, en el colegio, lo más tontos eran los que mejor jugaban al fúrbo, no es casualidad.
El tonto este, llevaba consigo siempre a los Toys, que eran 8 o 9 hamijos con gastos pagados, cuyo trabajo era ser "hamijo de ney", no me jodas.
Guardiola, solo quería jugadores casados, no quería tarambanas. Por eso cuando llegó al primer equipo, lo primero que hizo fue la frivolidad de cargarse a dos puntales del puto barça en aquella época: Ronaldinho y Decco. Cuentan que ambos dos cerraban el Riviera, y que en alguna excursión se llevaron al inverbe y pelotudo Messi.
Un porcentaje muy alto de deportistas de élite, al acabar su vida futbolera, se arruinan, porque claro, a esos coches, esas casas y esas putas con las que se han casado (modelos o influencers, por no decir tontas del culo) hay que darles de comer y darles el mismo ritmo de vida.
Todo esto le ha pasado a Neymar por gilipollas. Esto, y lo del helicoptero, los toys, su puta familia y sus gilipolleces haran que ningún club de los grandes lo quieran entre ellos, a pesar de ser un puto astro del balón.
Lo de la cerda esta quedará en anécdota, porque no se sostiene, y tiene la suerte que no le ha pasado en España donde hay que creer a las putas Si o Si. Pero será un manchurrón más en su historial.