Para mi profunda desgracia conozco de sobra a los sevillanos, tanto de la capital como de los pueblos. Y puedo afirmar sin ninguna duda que todos SON BASURA. No se salva ni uno/a.
Yo soy de Málaga, que en la actualidad está muy enfrentada con sevilla por motivos obvios.
Cuando estuve trabajando en sevilla, al principio los sevillanos se veían muy buena gente, simpáticos y agradables, con sentido del humor y con “mucho arte”, como dicen allí. Llegué a pensar que eran exagerados los rumores y afirmaciones que hacían de los sevillanos.
A los seis meses no pude soportar estar allí ni un minuto más por lo siguiente:
1. Los sevillanos parecen buena gente porque son los mayores hipócritas que uno se pueda echar a la cara. Basta con que te des la vuelta o acabes de salir de una habitación, para que te pongan verde y te critiquen a mas no poder, aunque cinco minutos antes hayan estado dicéndote lo buena gente que eres. Eso lo sé porque en primer lugar lo hacen entre ellos mismos, lanzándose como buitres sobre la carroña, y en segundo lugar porque he pillado infraganti a bastantes sevillanos haciendo precisamente eso: poniéndome de vuelta y media nada más abandonar una habitación, cuando 10 segundos antes estaba con ellos invitado a tomar cerveza y despidiéndose de mi muy efusivamente.
2. Simpáticos y agradables si que son, si. Pero siempre que no tengan posibilidad de putearte. En cuanto pueden ponerte el pie en el cuello y apretar hasta ahogarte no dudeis de que lo van a hacer.
3. Su sentido del humor es lo más simple que hay, pero cuidado, porque si haces el más mínimo chiste irónico, o simplemente sueltas un pequeño sarcasmo, se lo tomarán al pie de la letra y te crucificarán por “decir barbaridades”. Esta gente no sabe diferenciar un sarcásmo de un pimiento.
4. Y en lo que respecta a que los sevillanos tienen “mucho arte”, no es ni más ni menos a que están mezclados con sangre gitana. Raro es el sevillano que no tenga abuelos, primos lejanos, etc, gitanos, aunque muchísimos de ellos ni siquiera lo saben, y por supuesto su familia inmediata lo negará totalmente (recordad que son hipócritas a más no poder).
5. Por último decir que son orgullosos hasta caerse muertos: “sevilla es la mejor del mundo”, “como los sevillanos no hay nadie”, “mi sevilla no la cambio por nada”, y otras perlas parecidas tuve que escuchar durante seis meses, todos los dias.
A los seis meses pedí el traslado a Córdoba, de la que los sevillanos siempre hablan mál, de hecho tiene un dicho que dice “Cordobés y hombre de bien... no puede ser”. Los muy hipócritas, cuando deberían aplicárselo a ellos mismos.
Con los cordobeses no he tenido ningún problema, son gente honesta, y si no le caes bien a alguno, te lo dice en la cara, y si le caes bien pues también de lo dice, y ya está.
Además muchos a muchos cordobeses les encánta Málaga y tienen muy buen concepto de ella, cosa que no es así con los sevillanos, que la desprecian profundamente, aunque eso si, en verano bien que se van a las playas de Málaga a bañarse, que gente...
Trasladárme a Córdoba fue como volver a nacer, y si tengo que elegir otra provincia donde vivir después de Málaga, me quedo con Córdoba.
Precisaré que las mujeres sevillanas, aunque algunas son bastante guapas, por dentro están vacías y son superficiales a más no poder. Hay chicas preciosas que han llegado a darme auténtico asco hasta tocarlas o estar cerca de ellas.
Y por supuesto procura no caerle mal a ninguna, porque intentarán por todos los medios hundirte y pisotearte a más no poder.
También decir que para guarras y putas las sevillanas, eso si que es verdad. Si estás bueno te puedes follar a media sevilla, aunque... ¿follarías con mentes podridas como las de las sevillanas?, yo no desde luego.
Y que tengan presente los sevillanos que cuando llegué a sevilla no tenía ningún prejuicio y estaba dispuesto a integrarme entre ellos lo que hiciera falta.
Del asco y el odio que le tengo a sevilla, la culpa es de los sevillanos y de nadie más.