En Madrid en agosto también se folla, cuando apenas hay gente y toca a más, sobre todo con las guiris. El año pasao, y nunca olvidaré esos melones, calló una rubia polaca alta y tocha -rellenita, pero qué carnes, eso sí que era una hembra-, nunca antes con otra había conseguido rematar con corrida una cubana. El resto del año por más que lo intentes -yo, al menos- con las madrileñas o residentes, es imposible, a menos que te vean la cartera o les enseñes los pectorales de gimnasio. Por mi experiencia, ni les gustan los tíos con caras difíciles como yo, ni los obesos -PherSeo SerPheo, puto gordo narcisista ergo homosexual-. Me resisto a creer que hay que trabajar 6 horas diarias los músculos para ligar fácilmente en una gran ciudad como esta...
Por cierto, en agosto me voy a Tenerife -por libre, sin la novia-, y ahora que me lo habéis confirmado, voy a investigar si es verdad eso de que se folla todo lo que quieres, y en la misma noche que conoces a la hembra. Lo malo de todo esto es que seguramente cuando vuelva en septiembre la parienta me haya mandado a tomar por culo, porque sospechará y yo no sé mentir bien, y estaré sin follar todo el otoño, quizá también el invierno. ¿Merece la pena un agosto tinerfeño follando como un poseso para luego quedarse en blanco durante el otoño-invierno-primavera-y-más-allá?