El problema que veo es que hay muchísimas viviendas cerradas que de salir al mercado la gente que necesita alquilar podría hacerlo en mejores condiciones y que hay que poner garantías a los dueños de esas viviendas de que si las sacan al mercado no se van a encontrar con problemas, morosos y destrozos. Y sí, si no ponen esas medidas que les garanticen seguridad esos dueños no quieren sacarlas al mercado, y en su puto derecho están porque nada ni nadie les obliga a asumir un riesgo o lo que ellos perciben como un riesgo.
Y sí, hay mucha gente que ignora cosas, muchos señores mayores y muchos matrimonios mayores que teniendo una casa cerrada ignoran mucho, o casi todo, de la ley y se dejan vencer por los temores. ¿Qué se supone que deben hacer, meterse en berenjenales burocráticos y lidiar con leyes autonómicas, nacionales, locales y su puta madre y ponerse a aprender de todo eso para alquilar con seguridad? Pues mira, no. No es razonable esperar que hagan eso, porque si esperas eso lo que vas a tener es a gente que mejor no alquila y problema que se ahorra. Lo razonable es ponérselo fácil a la gente y que ponga su vivienda en el mercado en condiciones de seguridad y no crujirles por hacerlo. Los de las viviendas cerradas son estos, los que tienen la que viven y otra más, porque el que tiene veinte viviendas no las tiene cerradas, el que tiene veinte viviendas es el que las tiene para ponerlas en el mercado.
¿Y al final quién paga el pato? El que no encuentra casa para alquilar. Porque, claro, qué es eso de ponerle a la gente las cosas fáciles para que alquilen, putos dueños de viviendas.