Lo unico q encuentro de interesante en todo esto, como en otros muchos manuales para freaks de esos con titulos como "Vida Sexual Sana", "Sexo y bilinguismo", y mierdas asi donde se detallan cuales son las zonas erogenas, nombre q le quita a uno las ganas de cualquier cosa, es lo q se ha dicho sobre la importancia de la mente.
Con el escaso margen q da una sola zorra uno se ve obligado a jugar, y solo te salva de la monotonia el uso inteligente de la cabeza, usada para pensar y no como ariete. Lo importante es saber q cada cual se excita a su manera y q en esa excitabilidad la mente juega la baza mas importante. Y entonces, cuando las cosas se hacen bien, los instantes se transfiguran y no tiene sentido mirar el reloj. Recuerdo el momento de desnudar por primera vez a una virginal cerdilla como un accidente de trafico, algo capaz de hacerte perder la nocion del tiempo, cortarte la respiracion y olvidarte del entorno. Esos segundos imborrables se vuelven eternos, plenos, sobrecogedores, como los q tarda el coche en caer fuera de la carretera volando por el terraplen. Como diria el poeta arabe, "quien lo ha probado lo sabe".
La mente puede concebir una idea para follar con argumento q luego plasmara en la materia, pero en ese acto es imprescindible improvisar, pq la deleitosa excitabilidad de la otra persona solo se descubre por su reaccion y no siguiendo ningun manual, ni contando los minutos del reloj, q probablemente lo unico q haga es distraerte para acabar haciendolo todo mal. Pq como las ratas de biblioteca ya sabran, no todo se aprende en los libros.