Elabora los motivos de la razón por lo piensas así
Experiencia propia y ajena.
Nunca es una métrica tan simple como "ganas menos que yo". Para ellas siempre "son muchas cosas". Tienen un enjambre en la cabeza. Ganar más que tú es el primer zumbido, luego les pesa, como a cualquiera que quiera a sus hijos, no estar más con ellos. La conciencia intranquila es un demonio terrible, otro zumbido que se suma, atronando. Y a partir de ahí todas las pequeñas cosas, las ofensas que para ellas se acumulan aunque sucedan en años distintos.
Cuidar de la casa es una tarea muy poco agradecida. Con críos es el caos interminable. Y si la persona que viene de fuera se encuentra una leonera porque al enano le pasa algo y necesita atención cada cinco minutos, impidiendo que termines NADA, es inevitable que se irrite.
Hace falta mucho aplomo y amor para llegar de un día de mierda en la oficina, con hambre y sueño, y cambiar tu ansiado plan de comer y dormir por fregar los platos que tu pareja, que "sólo" tenía que hacer eso, se ha dejado formando la montaña prometida de la religión de las moscas.
Ellas no saben perdonar como nosotros. Y, repito, la ofensa no es el hambre y la molestia, es su puto runrún interno, su culpa por ser mala madre que deja a su hijo atrás, eso lo multiplica todo. El mero recuerdo de una sola vez hace mella cada día como si volviera a suceder, hasta que de hecho ocurre de nuevo y la hecatombe parece inexplicable para quien no ha estado soportando a ese diablo en el hombro que ellas llevan. Si encima te lo tomas con calma, si a pesar de ser amo de casa eres estoico y aguantas el temporal con la mayor paciencia del mundo, no te van a entender, lo van a ver como otra cagada más porque "te da todo igual".
Los días que lo hagas todo bien y llegue a casa para encontrar una familia feliz y unos niños que progresan en su ausencia, SU AUSENCIA va a ser lo único que resuene de esa frase. No se puede ganar. Quedarse en casa y cuidar de los hijos es algo que a muchos nos parece una vida de ensueño, yo lo haría encantado, no hay ningún trabajo que me importe más, pero el riesgo de la ira de una mujer bien vale ir a la mina, que al menos te mata con menos sufrimiento.
Dicho esto, espero que no sea tu caso, tampoco puedo decir que en mi experiencia (sin hijos ni dependencia económica, pero con menos ingresos) o las de quienes conozco no hubiera ninguna señal de antemano de que eso acabaría mal.