ErPaquillo rebuznó:
TitoTricky rebuznó:
La verdad es que jode bastante que te roben, y encima tener que pillar el metro por que no hay mas pelotas.
El metro ya de por si es bastante patetico para que nos lo amenicen estas buenas gentes trabajadoras, explotados en una ciudad que no es la suya, lejos de casa... Ya os he dicho de donde son los que yo veo.
¡Pero si es que los gilipollas llaman la atencion!
No es que sea de perdedores, para una ciudad como Madrid es necesaria, pero por lo que pagamos, joder que se lo curren mas.
Mirad el metro de Moscu, que pasada. O el de no se que parte de japon, que hay personas con casco empujando a la gente para que cierren las puertas...
Hay metros para todos.
Si tienes garaje en tu zona de trabajo, enhorabuena R@sTr3r0.
En el metro de Tokyo nadie empuja a nadie. Te lo puedo asegurar, porque Torbe y yo estuvimos allí en Diciembre y no había nada de eso...
De todas formas, y si tanto te interesa, puedo pasarte algunas fotillos hechas en el metro de Tokyo...
es que "Japan is different"
Por lo que dice la página de este personaje lo de los empujadores que habia hace algunos años en el metro de Tokio ya es un mito(yo lo vi una vez hace tiempo por tv)
https://perso.wanadoo.es/goliver19/Asia/tokio.htm
Tokio es la ciudad más organizada y limpia que he conocido. Pero también la más cara: una Coca Cola cuesta 250 pelas. Billete para el cine, 2500 pesetas. Hamburguesa en Mc Donalds, 1000 pesetas. Hotel muy barato 8000. Metro 200. Helado 400. Mini Sándwich en un 24 horas, 300 pelas. Café 250. Los taxis comienzan en 900 pelas. Sin embargo, la electrónica es relativamente barata. Probablemente estoy en uno de los países más machistas del mundo desarrollado. Las empleadas de comercio o restauración, tras finalizar tu compra, emiten con una sonrisa frases estereotipadas reproducidas a través de vocalizaciones ininteligibles. Según tengo entendido, intentan no demostrar un ápice de inteligencia delante de los hombres. De esta manera resultan más atractivas a los hombres. Visten elegante pero sobriamente y se maquillan poco. Dicen que son muy sumisas. Muchas llevan un pequeñísimo teléfono móvil y las ves hablando desde cualquier lugar. La palidez y los zapatos de suela gruesa y alta están de moda entre las jóvenes.
Los ciudadanos de Tokio son amables y tienen nociones de Inglés, por lo que es fácil orientarse. Sin embargo, los extranjeros que viven en Tokio me dicen que los japoneses discriminan a la gran mayoría de los no japoneses. Ninguno de los extranjeros que he conocido aquí quieren quedarse a vivir en Japón. Los coches están SIEMPRE nuevos e impolutos. Todavía no he visto un coche con algo de polvo en la carrocería. A los 5 años de antigüedad, los impuestos suben tanto que cambian de auto cada 2 o 3 años. Aquí conducen por la izquierda y lo hacen muy deprisa. Donde envían los coches usados?
Tokio es la ciudad de las contradicciones:
La pausada ceremonia del té contra el ritmo frenético del centro urbano, los numerosísimos templos budistas y en contra los rascacielos de oficinas de la calle Ginza, Disneylandia y contra la muy popular comida japonesa. Tiendas de moda Europea en cada esquina contra el retorno de la moda kimono en las mujeres más ricas. La corbata y camisa blanca de los oficinistas contra los pelos pintados y pendientes en la nariz de mucho jóvenes. Ni una colilla en la calle contra cucarachas en las habitaciones. Potencia intelectual pero también insultante machismo. Mezcla equilibrada entre iniciativa individual contra intervencionismo estatal. Humildad aparente, formalismo y admiración por el estilo de vida occidental contra elevado orgullo nacional y salvaguarda de las tradiciones. Emperador casi divino contra escándalos de corrupción política. Los 90,000 componentes de la Yakuza (mafia) conviven pacíficamente con una de las policías más eficaces del mundo. La Yakuza obtiene sus ingresos a través del crimen de guante blanco. La violencia física en el país se produce por ajustes de cuentas entre los propios representantes de la Yakuza.
Admiración al físico "blanco" occidental de ojos no rasgados contra xenofobia. Mitología tradicional contra supercomputadoras. Organización absoluta, contra caos para encontrar una dirección (las calles y casas no tienen número) El turista o viajero que venga a Japón con algún pre-concepto, quedará confundido.
En contra de la creencia general, el japonés no trabaja más o mejor que el occidental. Simplemente le dedica más horas. Después del trabajo saldrá a divertirse con sus compañeros de trabajo y continuará hablando de negocios en los restaurantes y bares. Llega a casa, frecuentemente borracho, cuando su familia está durmiendo.
También en contra de las creencias, los estudiantes preuniversitarios se rompen los cuernos por acceder a una universidad prestigiosa. Una vez que acceden, se pasan 5 o 6 años sin pegar golpe Las calles y casas en Tokio están subidas una encima de otra. He visto pocas avenidas. Da la agobiante sensación de que falta espacio. Viven en minúsculos departamentos y casitas con todos los avances tecnológicos. Tres habitaciones es un lujo. Sin embargo, el aire de la ciudad es relativamente limpio.
Los más jóvenes (menos de 25 años), los varones japoneses caminan ciegamente hacia adelante buscando terminar la reconstrucción de un país destrozado por la Segunda Guerra Mundial. Parece que aun no se enteraron que la reconstrucción ya terminó, y sacrifican su vida y familia por la empresa e indirectamente, por su país.
El japonés es mas consumista que los propios americanos.
El metro de Tokio es el sistema de transporte público más eficiente que he visto. Las aglomeraciones con "empujadores" para entrar en el vagón son un mito.
Los Japos tienen una increíble capacidad de quedarse dormidos en cualquier lugar. En muy pocas ocasiones los he visto hacer fotografías o filmar con cámara vídeo. Contrariamente, los chinos son obsesivos con las cámaras.