Juande se va a quedar sin su extremo
Hace dos años el Madrid fichó bastante bien en el mercado de invierno: Gago, Higuaín y Marcelo. Los dos primeros han valido, se puede decir ya. El tercero está en el aire. Pero eran fichajes que no estaban marcados por la urgencia para cubrir agujeros concretos, sino más bien jugadores con proyección a los que no se les pedía solucionar una emergencia, sino más bien hacer plantilla para tiempos mejores. Pero los fichajes de ahora son otra cosa: vienen a remediar lesiones (Diarra y Van Nistelrooy) o defectos del mal verano (la operación Cristiano, que acabó en la salida de Robinho y el desdén de Cazorla).
Huntelaar está bien, espero. Es un finalizador. Su precio es ajustado a un buen goleador joven. Lo de Diarra II (o Lassana Diarra, como prefieran) ya empieza a parecerme un abuso. Es jugador macizo, disciplinado, que ocupa campo y actúa con sensatez, pero es el tipo de futbolista por el que nadie cruzaría la calle para verle jugar. Hacen falta jugadores así, pero su precio no debe pasar de los diez millones de euros. Los otros diez corresponden al abuso que sufre el Madrid por su estado de necesidad, una vez que 'el otro' Diarra es baja para toda la temporada y que con De la Red no se sabe qué va a pasar.
Ese sobreprecio que el Madrid está obligado a pagar por Diarra II (el fichaje aún no se ha rematado porque se le pide a él que afloje su salario, dado lo elevado del precio) aleja el refuerzo más añorado desde que empezó la Liga: otro extremo. Juande quiere un equipo simétrico y quiere velocidad. Para las bandas sólo tiene a Robben y Drenthe. Ningún reemplazo. Quizá Marcelo, quizá Palanca, pero sólo son experimentos. A cambio le piden que se conforme con Parejo, buena promesa, pero que es de nuevo un Guti, un Sneijder, un Van der Vaart. ¿Adaptable al extremo? Eso tendrá que intentar Juande, me temo.