Ostras, será que no me he sorprendido veces a mi mismo, escribiendo o pronunciando en situaciones normales de la vida cotidiana frases de esa misma universidad. Cuando alguien dice imperdibles en mi cabeza resuena: y los pelos de colores, y así miles. La gente me mira con caras raras cuando suelto alguna así.
¿Padece usted el mismo dolor?